𝐊𝐈𝐃𝐍𝐀𝐏𝐏𝐄𝐃 𝐁𝐘 𝐏𝐒𝐘𝐂𝐇𝐎𝐏𝐀𝐓𝐇𝐒┃Masky, Hoodie

𝐶𝑎𝑝í𝑡𝑢𝑙𝑜 48

Elena Jones

¿Cómo es que mi vida dió un giro tan oscuro y retorcido?

Dejé caer el hacha con fuerza, dicho objeto punzante entró por el cráneo del policía, la sangre salió como ríos fuera de su caudal, manchando todo a su paso y a nosotros. El hacha llegó rápidamente al estómago y ahí fue cuando todos sus órganos, vísceras, hígado, corazón y demás pedazos de carne brotaron por todas partes, hasta que terminé por partir en dos partes el cuerpo. La mitad del cuerpo cayó duramente sobre la tierra y la otra mitad continuó de pie, retorciéndose levemente y temblando como gelatina, hasta que finalmente cayó como peso muerto al suelo. Un sonoro sollozo escapó de mi boca.
El cuerpo aún partido en dos seguía moviéndose y retorciéndose, teniendo reacciones abruptas y dando un espectáculo lúgubre y grotesco. Sus órganos rosados y palpitantes aún se mueven.

Contemplé detalladamente el cuerpo y aquí es dónde me pregunto... ¿Cómo de un momento a otro mi vida dió un giro tan oscuro?

—Estás temblando demasiado, Elena.—Comentó Masky con esa máscara inexpresiva totalmente salpicada de sangre.—Sólo falta uno más, sólo uno, muñeca.—Dijo entre risas, lo que me produjo escalofrios.

Toby se llevó arrastrando una mitad del cuerpo y Masky la otra mitad hasta el sitio dónde está el otro cuerpo, dejando un gran rastro de sangre en el trayecto.

—El que sigue—, Anunció Cody trayendo el último policía.

Sentí a Hoodie tomar mis hombros desde atrás y presionarlos sin lastimarme.

—El último...—Susurró en mi oído para después alejarse quedando detrás mío.

Me quedé callada aguantando las ganas de llorar, estoy apretando mis labios para no gritar, me estoy aguantando las ganas de no seguir con ésto.

Íba a negarme e intentar correr cuando pusieron frente a mí al último policía, pero de repente una voz grave y gutural resonó en mi cabeza haciéndome jadear y quedarme quieta en mi sitio.

—No escaparás, Elena.—Es Slenderman, el jefe de los Proxy's.—Termina tu trabajo, finaliza lo que se te ha indicado. ¡Obedéceme!—Me alzó su tono de voz haciendo que me sienta más asustada e intimidada.—Ahora eres mía, me perteneces, quiero que seas una más de mis Proxy's y no está a discusión. Termina ésta prueba que te he puesto—.

Ordenó de una manera tan fría y autoritaria que me intimidó tanto.

«Slenderman me intimida mucho más que mis secuestradores».

Giré mi rostro en busca de observar a mi última víctima que se me hacía muy extraño que no dijera nada o que no suplicara por su vida. Pero en ese mismo instante brinqué por la sorpresa al ver a mi mismísimo tío y no al policía delante de mí.

Estoy tan paralizada por el terror de verlo frente a mí.

«¿Qué mierda estoy viendo...? No... Tú estás muerto... Yo te maté. Y lo volveré a hacer... Te mataré las veces que sean necesarias porque nunca será suficiente para mí».

—¡TE HARÉ PEDAZOS, MALDITO BASTARDO!—Bramé llena de rabia sorprendiendo a todos por mi cambio brusco de actitud.

Hace unos momentos me mostraba asustadiza y ahora me muestro muy agresiva.

Dí un hachazo en su cabeza, por lo que la sangre no tardó en hacer su aparición deslumbrante, salió a chorros como lluvias torrenciales. Sus ojos se volvieron viscos al observar la sangre que sale de su cabeza, muy pronto cayó como peso muerto al suelo desangrándose y retorciéndose como un animal moribundo.

Todos retrocedieron mirándome sorprendidos.

Dejé de lado el hacha y me senté a horcajadas sobre el cuerpo, agarré una roca y golpeé de manera violenta su rostro, dejando un gran hoyo y sumida la zona golpeada. Siento una energía increíble en todo mi cuerpo y no deseo detenerme. Sonreí de forma sicótica cuando la sangre salpicó con intensidad toda mi cara, ahora mismo estoy cegada y perdida en esa oscuridad que tanto detesto. Seguí golpeando su cráneo hasta dejarlo completamente destrozado y haberle sacado el cerebro, un enorme charco de sangre creció alrededor de mí. Escuché las carcajadas malvadas de todos los Proxy's mientras me aplauden, me lanzan chiflidos y piropos por éste espectáculo macabro.

Me detuve abruptamente mirando el cadáver debajo de mí, respiré exaltada y limpié bruscamente la sangre de mi rostro. Mi lado razonable había vuelto a mí y entré en pánico por lo que he hecho; El cadáver frente a mí no pertenece a mi tío, era el cuerpo del policía.

Mi ropa, mis manos, mi rostro y mi cabello están repletos de sangre inocente.

«¿Qué he hecho otra vez?»

Slenderman manipula y trastorna mi mente.

—Misión cumplida. Muy bien hecho.—Mencionó Cody.—Sólo que te demoraste una hora con los cadáveres, debe ser más rápida, necesito más rapidez.—Lo escuché decir mientras yo me encuentro perdida mirando el cadáver deformado debajo de mí.—Slenderman está satisfecho contigo, pero debes mejorar en las próximas pruebas—.

«¿Próximas pruebas...?», pensé con terror.

—Elena...—Me sobresalté al escuchar la voz de Hoodie.—Me tienes cautivado, eso fue maravilloso—.

Me puse de pie alejándome de todos ellos que ya empiezan a querer acorrarlarme.

—Estoy muy orgulloso de tí. Cada día estoy más enamorado de tí, princesa.—Ésta vez habló Masky con una voz más grave y escalofriante de lo normal.

«No... No me volveré una asesina como ellos».

—¡Aléjense de mí! ¡Los maté porque ustedes me obligaron! ¡Yo no quería hacerlo!—Retrocedí asustada sin dejar de mirarlos con terror mientras ellos avanzan hasta mí.—¡No me volveré como ustedes! ¡Yo me largo de aquí!—Me dí la vuelta para comenzar a correr, pero la voz amenazante de Hoodie me detuvo.

—¡No te atrevas a dejarnos! ¡Si te atreves a huír te arrepentirás!—Reveló ya listo para comenzar a perseguirme.—No conoces éste bosque, estás en nuestras manos, no escaparás y te atraparemos—.

—¡No me importan sus amenazas! ¡Yo me iré y lograré escapar!—Justo antes de correr, la voz de Masky me hizo detenerme en seco.

—Hagamos un juego; Si logras escapar, te dejaremos en paz, pero si te atrapamos, el castigo será muy doloroso.—Ante la amenaza de Masky me eché a correr antes de que ellos vengan por mí.

—No la dejen escapar y atrapen viva a Elena.

Escuché a Slenderman por todo el bosque dándoles la órden a sus Proxy's para atraparme. De inmediato, ellos acataron su órden y comenzaron perseguirme para darme caza. Ahora puedo sentirlos correr detrás de mí mientras se carcajean.

«La casería ha comenzado para mí».