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Harry.
Últimamente he estado pensando mucho, a veces tengo el sueño de tenerla de la mano. Algunas veces la llevo a la universidad en mi auto rojo y caminamos de la mano juntos por el campus. Ella se roba las miradas de todos pero yo me siento afortunado de poderla llamar mía.
En mi cabeza soy su novio y me detengo en medio de todos con una sonrisa de campeón para robarle un beso que me deja...
Y la realidad arruinó mi vida.
—¡Harry! ¡Hey! —Niall me mira con el ceño fruncido.
—¿Qué decías? —el hombre rueda los ojos y bufa enojado.
—Te estoy diciendo que te muevas tu silla, no dejas pasar a las personas, idiota.
Mi mirada rápidamente ubica nuevamente a Emma sentada en el mismo lugar de siempre. Sonríe mientras conversa con Karen sobre algo y hace una mueca cuando su amiga le respondo.
—¡Harry!
—¡¿Qué?!
—¡Muevete!
—No jodas, Liam.
Y es que si me movía, no iba a verla gracias a la gran columna de concreto que tenía delante de su mesa.
Escucho los bufidos de mis amigos pero miro mal a todos los que quieren pasar detrás mío, obligandolos a rodear la cafetería y tomar el camino más largo.
Intento mantener el hilo de la conversación pero me pierdo cada vez que la veo y ella sonríe, porque no puedo evitar hacerlo también.
Es tan bonita.
No sé en que momento termina mi espacio de break y debo ir a clases. Y aunque podría pasar todo el día mirando a Emma, mi futuro llamaba a gritos mi nombre.
—¿Ya piensas decirle que te gusta? —Louis se burla luego de golpearme el cuello.
—No —digo tratando de aliviar con mi mano el dolor.
—Llevas meses enamorado de ella, lo único que haces es sonreírle como niño bonito y ya ¿Crees que así va a enamorarse de ti? —Liam opina y yo trato de ignorarlos porque ellos no saben nada.
—Hey Emma, eh, sí, yo, tú, digo, yo, espera no, tú —Louis empieza a imitirme y giro mi rostro enojado para golpearlo.
—¡Yo no soy así! —reclamo inmediatamente.
No lo era.
—No, eres peor —se carcajea Niall.
Y por un minuto me arme de valor. Harto de las burlas de estos idiotas doy media vuelta y camino decidido hasta ella. En el camino mis piernas tiemblan y siento como el rostro se me va poniendo rojo. Estoy solo a unos pasos y cuando siento que me falta el aire.
Aparece él.
Emma da un pequeño salto en su asiento cuando siente sus manos en su espalda. Luego sonríe, le sonríe a él. Y el corazón se me rompe un poco más.
Porque yo siempre he soñado con ser su novio, pero eso es algo que ella ya tiene. Porque siempre siento que estoy jugando un juego que estoy destinado a perder, y como no, no puedo competir contra él, contra su sonrisa de comercial y sus veintisiete tatuajes.
Matt no la merece. Y no lo digo porque este celoso, sino porque realmente es un imbécil. No sé si tantos batidos para tener músculos le dañaron el cerebro o simplemente él nació así.
Y quizá me quisiera matar un poco más no solo por ser el capitán del equipo de fútbol, sino, porque estoy seguro de que no le agradaría la idea de saber que me muero por su novia.
Las clases siguen con normalidad. A la hora de salida me despido de los idiotas con los que comparto carrera y parto rumbo al estacionamiento. Camino despreocupado saludando a algunas personas con las que me cruzo en los pasillos y cuando doblo para salir hacia el campus, me golpeo con alguien haciendo que ambos fueramos al piso.
—Carajo —una voz hace que se me detenga el corazón.
—¿Emma? —sus ojos azules me miran y automáticamente se le borra el ceño fruncido.
—Harry —mi nombre suena bendito en sus labios.
—Lo siento mucho —digo cuando logro recomponerme.
Rápido levanto el libro que llevaba en la mano y la ayudo a levantarse.
—Descuida, soy muy distraída.
Y se coloca un mechón detrás de su oreja, mierda.
—¿Cómo... eh, cómo vas?
—Bien, bueno, de hecho estoy muy cansada intentando sobrevivir al semestre —me ríe, me ríe a mi. —Vi que el equipo clasificó a las finales, felicitaciones, H.
—Si, eh... si. Gracias, Em —¿Ahora que le digo?. —Deberías venir a algún partido.
—Si he ido y te he visto jugar —¿Qué ella qué?. —Podría decir que soy tu fan.
¿Que ella qué?
—Yo... yo no te he visto nunca, digo, no es que yo te busque, bueno, es que...
—Estabas muy concentrado para que te distrajeras —se encoge de hombros.
—La próxima vez pásame la voz —casi suplico.
Emma asiente y puedo darme cuenta que me gusta más de lo que debería admitir. ¿Matt estará tan enamorado como lo estoy yo de ella? ¿Sería capaz de gritar que daría todo por esta mujer? Porque yo lo haría.
—Voy de camino a casa ¿Te vas o...?
Pude articular luego de unos segundos.
—Si, voy a casa pero no te preocupes, puedo caminar y...
—Déjame llevarte, Em, como disculpa luego de lanzarte al piso.
Ella ríe y aunque me mira dudosa, acepta.
El corazón se me va a salir, y solo puedo dejar de respirar cuando salimos caminando juntos por el campus. La gente nos mira y aunque no vamos tomados de la mano, la tengo a mi lado.
Llegamos a los estacionamientos y le abro la puerta del auto, ella agradece e ingresa a él. Corro hasta el otro extremo y debo parpadear dos veces para poder creer que la tengo a mi lado, en mi auto.
—¿Eres fan de Coldplay? —chilla cuando la música se enciende automáticamente.
—Me encantan —digo mientras nos saco de ahí.
—¡Son mi banda favorita!
Y no puede evitar cantar Viva la vida a todo volumen. No la detengo, la disfruto.
Este momento irreal y que ocurrió en mi mente millones de veces está pasando. Y solo puedo pensar si él la abrazara cuando se sienta triste, si la besará o complacerá porque Emma lo merece.
¿El diría que está enamorado? ¿Él pensaría en la palabra amor cuando ve a Emma?
Porque yo si lo haría.
🌻🌻🌻
Holaaaa!
Espero se encuentren bien como siempre besties. Creo que he empezado a querer escribir shots de canciones de los uandiiii.
¿Que canción quisieran que fuera el siguiente shot? ¿Cuál es su canción favorita?
