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Lo primero que miró Kylian al despertar esa mañana fue a Anais. Anais yacía muy indefensa en la cama. Debió haber llovido mucho la noche anterior, la lluvia entraba a cántaros por la ventana entreabierta.

"¿Es por la lluvia?"

Sabía que la razón por la que ella acudió a él era por la lluvia.

La amabilidad de Anaís. Deseó que fuera todo suyo. Odiaba esa sensación de opresión en el pecho. Cada latido de su corazón le provocaba un dolor punzante, como si tuviera una aguja larga clavada en su interior. El dolor se desvaneció cuando Anais se rió y se intensificó cuando miró a otra persona.

Cuando vio a Anais dormida, sintió que el dolor menguaba.

"Mmm..."

Anais dio vueltas y vueltas en su cuerpo con un sonido bajo. Kylian de repente recordó que había venido aquí tan indefensa. Llevaba sólo un camisón muy fino.

Su piel era visible bajo la tela blanca traslúcida. ¿Cuánto ella no... lo ve como un hombre?

Se dio cuenta de que ella nunca lo había considerado un hombre. Frunció el ceño y salió de la habitación con resentimiento.




* * *




Kylian sabía que pronto cumpliría dieciocho años.

Nadie celebró su cumpleaños ni nada. Ni siquiera la familia imperial. Ni siquiera Duchy Percival celebra el cumpleaños de Kylian.

La familia imperial no le ha enviado nada aparte del relicario de su madre. Había un presupuesto asignado a los príncipes, pero incluso eso lo mantenía el duque Percival.

"Que patético."

Estaba sentado bajo una glicina. Los pétalos de la glicina se sentían como la sonrisa de Anais.

También le gustaba el olor a glicina. Había muchos árboles de glicina cerca del campo de entrenamiento, por lo que podía oler este aroma cada vez que entrenaba.

De repente recordó el collar que le iba a regalar a Anais. Después de que le robaron el collar, Kylian regresó a la plaza del pueblo varias veces, pero no pudo encontrar al carterista.

Sin saberlo, tocó el collar con relicario de su madre que colgaba de su cuello. Quería darle a Anais algo especial. La idea lo deprimió aún más. Luego, cansado por el sol abrasador, se quedó dormido.

Cuando volvió a abrir los ojos, el rojo atardecer se estaba hundiendo.

Al darse cuenta de que pronto sería hora de cenar, Kylian se dirigió rápidamente al edificio principal. Le encantaba la hora de comer. En otros momentos no tiene muchas oportunidades de hablar con Anais, pero a la hora de comer era diferente.

Cuando el duque Percival estaba ocupado, los dos comían solos.

Anais siempre le hacía preguntas amablemente cuando estaban solos. Cuando Duke Percival estaba cerca, decía algo duro. Pero sabía que Anais le estaba prestando atención.

Corrió hacia el edificio principal.

"¿Kylian?"

"Ah..."

Kylian chocó con Anais en la puerta del edificio principal.

"No te he visto en todo el día".

"...Sí."

Cuando la villana murió, el protagonista masculino se volvió loco.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora