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"Puaj..."

"¿Estas despierto ahora?"

A Anais le resultó difícil adaptarse a la voz familiar que provenía de su propio cuerpo y hablaba en un tono ligeramente elevado. Sólo después de darse cuenta de que la voz provenía de su propio cuerpo, Anais pudo mirar hacia adelante.

"Intenta levantarte".

"Me duele la cabeza."

El dolor en la cabeza de Anais era tan severo que no podía concentrarse. Incluso si hubiera quedado inconsciente, actualmente se encontraba en el cuerpo de Lilith Isadora. Según todos los indicios, ya debería haberse recuperado, pero su cabeza todavía latía inusualmente.

"¿Dónde estamos...?"

"Ja, Anaís. Anímate." 

Lilith habló con irritación. Intentó mantener un tono informal pero, sin darse cuenta, volvió a hablar formalmente con Anais.

"¿Está Lilith detrás de mí?"

"Sí."

Mientras sus ojos se adaptaban a la oscuridad, Anais inspeccionó su entorno. El lugar le era desconocido, pero podía sentir a alguien detrás de ella, probablemente Lilith, ya que era su voz.

Además, su cuerpo no respondía bien. Anais se preguntó si su incapacidad para moverse se debía al dolor de cabeza mientras intentaba torcer su cuerpo. Pero le dolían demasiado las muñecas y se sentía débil por todas partes, como si la hubieran drogado.

"¿Por qué estamos aquí?"

"¿Cómo puedo saber?"

A pesar del tono sarcástico de Lilith, Anais no pudo recobrar el sentido. Parecía que su movimiento estaba restringido, pero le tomó un tiempo darse cuenta, dado su estado de aturdimiento.

"Mi cabeza se siente rara".

"Te han dado analgésicos del Templo de Morfeo".

"¿Como sabes eso?"

"Los he tomado yo mismo".

Anais se preguntó si todo esto era una alucinación por las palabras de Lilith, especialmente porque podía ver a alguien acercándose a ella.

"¿Kylian?"

Lilith suspiró con desdén.

"La alucinación desaparecerá pronto. No parece que te hayan dado mucho".

Anais no pudo entender las palabras de Lilith mientras Kylian la distraía sonriéndole. Tenía el rostro de su juventud de hace cinco años, no el comportamiento severo del emperador sino la alegría fresca del día de su boda.

Kylian con ojos vidriosos que realmente no matarían ni siquiera a las arañas, y buenos ojos que se curvan ligeramente cuando la ve. Brillante como si tuviera oro en los ojos.

"Es una alucinación".

"Te dije que lo era".

"Ja."

Anais se sobresaltó cuando el sonriente Kylian pareció acercarse a su lado.

"¿Por qué puedo sentir el toque?"

"Es un efecto secundario".

Anais quedó desconcertada cuando la aparición de Kylian se sintió real y acarició su mejilla. La alucinación le sonrió dulcemente y luego abrió suavemente sus ojos para encontrarse con los de ella.

"Esposa."

En ese momento, su rostro se transformó en el Kylian actual, lo que provocó que Anais murmurara una maldición en voz baja.

Cuando la villana murió, el protagonista masculino se volvió loco.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora