Confrontación

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Beatriz estaba preparándose para salir de Ecomoda. Estaba realmente cansada. La cabeza no le daba para más. Solo quería cerrar los ojos y desaparecer de su realidad por un momento. Se encontraba guardando su agenda en la cartera cuando escuchó la puerta abrirse y vio a una Marcela furiosa entrar por ella. Evidentemente su malhumor seguía.

-Necesito hablar con usted, Beatriz- le dijo con gesto altivo mientras se ponía las manos en la cintura.

-Sí, claro, realmente ya iba de salida, pero podemos hablar - le respondió con calma mientras volvía a sentarse. Estiró la mano para señalar la silla de enfrente indicándole que se sentará. Marcela miró la mano de Beatriz y se sentó. Sus movimientos eran tan elegantes pero a la vez agresivos, denotando la furia que la embargaba.

- la esucho- le dijo Beatriz mientras enderezaba su espalda y adoptaba una pose receptiva. No iba a seguirle el juego de la agresividad a Marcela. No iba a permitir que se desquitase con ella por su pelea con Armando.

- En primer lugar, quisiera dejar varias cosas claras respecto a la relación de la presidencia con Hugo, frente al proyecto de Armando y su viaje. Lo de Hugo no es nada que no sepamos. Es evidente que no se soportan y puedo entender las razones de los dos, pero en medio de un ambiente tan hostil es muy complejo trabajar.

Estaba tratando de controlar su ira sacando primero los temas de la empresa, para no mostrarse vulnerable cuando hablara lo que realmente la llevó allí. Los primeros temas eran una excusa.

- Pero si bien entendí en el comité, el acuerdo es que yo no voy a interferir en la colección, simplemente voy a supervisar lo del cuartel. Es usted quien nos apoyará en ese sentido.

¿Apoyo? Ja. Al diablo es apoyo.

- Mire Beatriz. No rete a Hugo. Usted no lo conoce y sí, yo voy a supervisar la colección y voy a trabajar con él, pero si esa hostilidad entre ustedes no para, Hugo se irá y créame que lo que menos falta le va a hacer es trabajo. No podemos darnos el lujo, en este momento, de perder a un diseñador como él. Así que realmente evalúe su relación con él.

Beatriz notaba el desdén en las palabras de Marcela. Su mirada fría. Además, lo que le estaba diciendo no era precisamente algo parecido a un trabajo en equipo. Esa actitud le molestó realmente. Se había prometí jamás dejar que la humillaran y no iba a dejarse pisotear por Hugo Lombardi ni por nadie.

-Usted dice que entiende la relación hostil del señor Hugo conmigo, pero parece que realmente no lo hiciera. Y me parece que seguir recalcando que no puedo interferir en esa área está de más. Y una cosa es que con el señor no seamos los mejores amigos y otra muy distinta es que yo muestre algún tipo de animadversión hacia él. Respeto y reconozco su trabajo, pero tampoco le voy a permitir que pase por encima mío y como sé lo fundamental que es que él de quede por eso no me opuse ni hice algún comentario cuando él dijo que solo se entendería con usted- cuando terminó de hablar estaba ligeramente sobre el escritorio y mirándola directamente a la cara, de manera fría y seria.

Marcela pudo notar la tensión y molestia de Beatriz. Ya no tenía caso seguir discutiendo lo demás. Ya estaban en la misma sintonía para ir al grano.

- Okay, Beatriz. Al fin y al cabo usted es la presidente de Ecomoda, es quien deberá responder por la empresa. No acepte mi sugerencia si no está de acuerdo con ella, pero por lo menos, tenga el valor de cumplir sus promesas- alzó una ceja al decir lo último.

Eso sí que no lo esperaba. Quedó en blanco, no tenía idea de a qué se refería si por el contrario, le había contado del acercamiento de Armando.

- No... No la entiendo- alzó ligeramente los hombros y la miró con cara de confusión.

Destino - Marcela y BettyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora