[The Dream]

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Scarlett




Ya estábamos a lunes y los chicos volverían a casa el miércoles,Becca estaba profundamente dormida en la cama ya que ayer nos habíamos quedado viendo la entrevista de los chicos y como la pausabamos para reírnos terminamos de verla a las dos de la mañana.




La miré unos segundos desde mi lugar del colchón,luego me paré de la cama y me dirigí a la cocina mientras peinaba un poco con mis manos mi pelo enredado.





Preparé dos cafés con leche,tomé dos medialunas y unas servilletas,puse todo en una bandeja y lo llevé a la pieza.




-Arriba,vaga - Hable mientras me acomodaba en la cama intentando que no se me volcarán las dos tazas de café- Traje el desayuno, soy servicio a la habitación, me deberías pagar -Ella levantó un poco la cabeza y luego la volvió a dejar sobre la almohada- Traje medialunas.


-Buenos días- Murmuró aún con su cabeza enterrada en la almohada y luego se sentó tranquilamente,agarro una de las tazas y una medialuna- Prende la tele - Su voz de zombie me divertía bastante.




Encendí el plasma y puse Tom y Jerry. Yo siempre había amado ver dibujitos,los prefería antes que enterarme de todo lo malo que sucedía sucedía en el mundo,me parecía muy masoquista poner las noticias sólo para enterarte que la sociedad va de mal en peor.





Cuando vivíamos en Holmes Chappel mis padres casi siempre discutían acerca de las noticias,tanto políticas como religiosas,me volvían loca,pero gracias a eso me hice la mejor amiga de Harry.



Cada vez que no quería estar en casa o me sentía ridículamente mal iba a la panadería de Barbara,una mujer de unos 40-50 años actualmente,rubia, cariñosa,amable y los suficientemente de confianza como para refugiarnos a ambos cuando nos escapábamos del colegio,Harry siempre estaba trabajando ahí, decía que estaba ahorrando para la universidad,aunque,bueno,parece que nunca lo necesitó.





Yo siempre esperaba a que Harry saliera de trabajar,me sentaba en una de las mesas de madera a comer uno de los cupcakes que preparaban Harry y Analia,otra de las mujeres que trabajan ahí,y cuando necesitaban ayuda yo me ofrecía sólo para perder un poco de tiempo.





Cuando Harry salía de la panadería, luego de despedirnos de las mujeres,emprendíamos camino hacia un pequeño bosque que había luego de un gran descampado que las personas del lugar ocupaban como parque.Durante el camino pasábamos por varias casas del vecindario y,por más que el lugar era seguro y tranquilo,había una casa que había estado abandonada por años,Harry empezaba a temblar y su tono de piel cambiaba a pálido cuando veía que yo me frenaba frente a la casa,la cual, irónicamente,estaba al lado de la suya; él decía que estaba embrujada.




“Gallina”





Era lo único que podía pensar antes de largar una carcajada y luego solía decirle:




“Harry,eso es una tontería”




Él sonreía “Valiente” y luego continuábamos nuestro camino hacia el bosque un poco más tranquilos.




Era divertido pensar en eso,recordar viejas historias que podrías contarles a tus hijos o a tus nietos en un futuro,cosas lindas y sencillas que te hacían sonreír sin necesidad de que esa persona esté al lado tuyo,era hermoso.




-Deja de sonreír tanto y ve a lavar las tazas,Jaime - La mire mal.





Jaime era el típico nombre que ocupaban los sirvientes de todas las películas. Me parecía tan cliché.




I Can't Believe ThisWhere stories live. Discover now