( ͡° ͜ʖ ͡°) Masturbating ( ͡° ͜ʖ ͡°)

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Scarlett




Me desperté rodeada por unos fuertes brazos que hacían que fuera imposible el tan sólo moverme.Ya habían pasado un par de semanas desde que me había mudado con Kevin, era asombroso,nos turnabamos para cocinar y lavar las cosas, él me ayudaba con las cosas para el canal de YT y yo lo ayudaba con la renta del departamento.




-Kevin...- Susurre suavemente y empecé a aflojar su agarre con mis manos lentamente -¿Dónde están las pastillas para el dolor de cabeza? -Murmuré esta vez un poco más fuerte y me safé completamente de su agarre,él  símplemente gimió  y se volteó para mirar hacia otro lado en donde no le diera la luz.




Caminé descalza hasta la cocina, ayer nos habíamos tomado todo lo que encontramos en la casa y comimos demasiado, probablemente yo vomite unas dos o tres veces mientras que Kevin había vomitado sólo una vez.Me paré en un pequeño banco y bajé de la alacena una cajita con pastillas para la resaca, el tarro de café,  un paquetito de edulcorante y una taza.




Pusé a hervir el agua mientras yo me encargaba de prepararme un cortado, siempre me había gustado el café con leche, me dirigí a la puerta de entrada del departamento y entré el diario que siempre dejaba Gary, el recepcionista,en la puerta.Coloqué el diario arriba de la mesa del comedor y abrí las cortinas provocando que la sala se iluminé con la luz del sol, abrí un poco la ventana permitiendo que el departamento se llené de aire y volví a la cocina, llené la taza hasta la mitad de agua hirviendo y la otra mitad la llené de leche, cogí unas galletas de agua junto con la pastilla y me encamine hacia el comedor, me senté silenciosamente  en una de las sillas y dejé todo sobre la mesa, puse el remedio sobre mi lengua y bebí un poco de café haciendo mi cabeza para atrás facilitando el camino de la pastilla, odiaba tener que tragar esas cosas.





¡Las hacían de un tamaño inhumano!





Escuché pasos lentos bajar de la escalera y fijé mi vista en Kevin, parecía aún estar dormido, tenía un poco de olor a alcohol y su mano derecha estaba sobre su cabeza como queriendo evitar que el ruido la atraviese, me dedicó una sonrisa cansada y yo se la devolví.




-El agua ya está caliente, prepárate un té, arriba de la mesada hay una pastilla para la resaca -Hablé despacio y tranquila, sabía cuánto le molestaba que las personas le hablen fuerte para comenzar la mañana, más si tenía una enorme resaca en cima.




Luego de unos minutos se sentó a mi lado a tomar su té, me quitó dos galletas de agua y se tragó la pastilla junto con un sorbo de té. No rechisté acerca de las galletas y seguimos tranquilos nuestro desayuno.




-¿Ya le regresarás esa camisa a tu ex? -Preguntó cuando estábamos lavando nuestras tazas y yo frunci el ceño.




-¿De qué hablas, Kevin? -Pregunté confundida.




-De eso -Señaló la camisa negra que tenía puesta y yo la miré, él tenía razón, era de Harry- Te la pusiste cuando llegamos anoche, después de vomitar, claro -Él rió y yo hice una mueca de asco.




-Iré a su casa hoy-Dije segura y Kevin me miró, su mirada era atenta y sorprendida.




-¿Estás segura? Si quieres puedo acompañarte -Dijo amigablemente, su mirada parecía protectora,  como si fuera un padre cuidando de su pequeña hija.




-Muy segura -Afirmé- Y no, yo tomaré un taxi o quizás vaya caminando, tu tienes que ir al hospital.




-No, ni lo sueñes - Negó -Me tomaré el día libre, iremos al departamento de tu ex, le darás la camisa y luego haremos lo que se nos de la puta gana ¿De acuerdo? -Dijo sonriente y yo asentí de la misma forma, éste chico me podía* demasiado.






I Can't Believe ThisWhere stories live. Discover now