My Biology Teacher

~Capítulo 5~"Buenos deseos"

Mi garganta casi se rompe. Mi mundo se sacudió y se hizo pedazos en un abrir y cerrar de ojos. Su amplia espalda... sus caderas... lo había observado a él anoche. Eran él y mi hermana...

Su rostro por fin retoma aquella expresión inescrutable y relajada, mirando hacia donde me hallaba—

-¿Qué haces aquí?—Pregunta con normalidad. Me duele el pecho, pero verlo allí parado como si nada pasara, provoca un dolor que nace en mi pecho y pronto se transformaba en ira—

-Yo vivo aquí—Respondo firme y furiosa—

Donghae mira hacia la puerta de mi hermana y luego hacia donde me hallo, y al mismo tiempo, aprieta los parpados—

-Mierda—Lo escucho mascullar—

Respiro hondo y me reincorporo, emprendiendo pasos hacia el frente—

-Sí. Mierda—Repito sus palabras, y lo paso de largo—Que tenga una mierda de día profesor. Salga por la puesta principal y despídase de mi hermana antes de marcharse. No sea maleducado—Escupo cada palabra ingresando a mi habitación y luego cierro de un portazo.

No entiendo ni siquiera por qué me duele tanto si él ya había dejado en claro que yo no le interesaba. ¿Qué te pasa, (TN)? ¿Es que no eres capaz de asimilar la realidad? No le interesas y a ti, él no debe interesarte ¿Es que eres tonta? "Eres guapa, todo lo que un hombre podría desear, y él no es el único tío que existe sobre la faz de la tierra"—

Aprieto las manos contra mi rostro sintiendo mis ojos arder, pero me contengo. No voy a llorar. Solo es una necedad. Solo una necedad... y aun así muero por escuchar la versión de mi hermana. "¿No que él era un idiota?"

Más tarde ya hacía en la cocina, tomando asiento mientras veo a mi hermana contornearse en la cocina al mismo tiempo que tararea una canción que no reconozco.

-¡Hermanita!—Grita llegando con rapidez con nuestro huevos fritos y sirve el café-- ¡A qué no adivinas!—Exclama emocionada—No tienes idea de a quien he tenido en mi cama esta noche—

Contemplo mis huevos revueltos, y me produce ganas de vomitar—

-Tienes razón. Ni me lo imagino—Le sigo la corriente—

-A tu profesor—Exclama juntando las manos—Santo Dios. Que hombre. No tienes idea de lo que logra causarme—Pronuncia gruñendo y yo no logro quitarme la imagen de ellos en la cama—

-Anoche él también estaba en la conferencia como parte de los expositores—continúa—No tienes ni idea de lo que fue anoche. Hablemos de nuevo, bebimos y de repente ya estábamos dándonos el lote sobre mi auto—sonrió mirando emocionada a su huevo—Vinimos a la casa. Espero no haberte despertado anoche—Sonríe de oreja a oreja—

-Claro que no—fuerzo una sonrisa—Ni lo sentí y mucho menos escuché—Creo que estaba en modo automático. Era increíble cómo es que últimamente había empezado a mentirle a mi hermana. "Son solo un par de mentiras... ella no tiene que saberlo. De todos modos, entre mi maestro y ella hay algo, mientras que entre mi maestro y yo, jamás pudo haber algo" Él lo dejó bien claro, y yo soy alguien capaz de asimilarlo.

-Me alegro por ti—sonrió hacia mi hermana y ella se inclina apretándome entre sus brazos—

-Yo también—sonríe besando mi frente—No tienes ni idea de lo feliz que estoy. Tendremos que salir algún día. Ya verás que él ha de tener algún amigo—Me guiña-

¿Un amigo de él? Ni de coña.

Esa es la primera mañana que llego tarde a clases. Ingreso después de maestro y tomo mi respectivo lugar, dispuesta a cambiar las cosas de ahora en adelante. Mi maestro inicia su clase. "Su estúpida clase"