EXTRA PARTE 2

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III

—Peter Hale, tienes visitas —le dijo un enfermero, viéndolo vacíamente desde arriba.

—¿Visitas? —preguntó Peter. Tenía miedo de que fuera alguien que lo quisiera muerto y fuera a acabar con él, pero la curiosidad le ganó y de mala gana siguió al enfermero. De todas maneras, todo era mejor que estar con su escalofriante compañero de celda. A Peter se le ocurrieron un par de personas que estarían ahí, pero nunca se imaginó a Hannah Hale, luciendo como si dominara el lugar aunque era obvio que no encajaba con su perfecto cabello rubio cayéndole lacio y cada vez más largo por la espalda, una blusa negra ajustada y unos jeans del mismo color.

—No pensé que aceptarías la visita —dijo Hannah. Peter notó que estaba pretendiendo su tranquilidad cuando por el rabillo del ojo captó como encajaba sus uñas en la palma de su mano.

—No pensé que vendrías —respondió Peter—. Ya sabes, después de que fuiste tú la que me puso aquí.

—Intentaste matar a mi Alfa —gruñó Hannah en voz baja—. Quiero a Scott y lo sabes, aun así decidiste ir tras mi espalda y orquestar todo tu plan que casi lo mata.

—Pensé que me querías a mí y me elegirías —Peter no se molestó en ocultar el rencor en su voz—. Toda una vida conmigo y llega ese... chico y te atonta. No es bueno para ti, Hannah.

—Solo vine a ver si estabas bien, ya vi que sí, entonces lo mejor es que me vaya.

—¡No! Hannah, por favor, tienes que sacarme de aquí —susurró Peter, el terror escurriéndose en su voz—. Mi compañero es un idiota y me van a poner con uno peor, estoy seguro. Los escuché murmurando algo. Tienes que sacarme de aquí.

—¿Para qué intentes matar a Scott de nuevo? No lo creo.

—Somos familia —insistió Peter—. Te vi nacer. Te enseñé a andar en bicicleta, a pelear, a huir. Estuviste para mí después del incendio, sé que debo de significar algo para ti.

Los ojos de Hannah se llenaron de lágrimas sin derramar. Después de unos intentos de controlar su respiración, dijo:

—Significaste algo para mí. Ya no somos nada —Hannah se paró y se fue, escuchando los gritos de Peter.

—¡Somos Hale, Hannah! ¡Hale! Yo soy más tu familia que tus padres. ¡Nunca te haría daño a ti! ¡Se suponía que serías mi Beta! ¡Mi Beta! ¡Por favor! ¡Te quiero! ¡Hale! ¡Hale! ¡Te quiero! ¡Somos familia!

Hannah salió corriendo del lugar a los brazos de Kira, quien sorprendida, abrazó a Hannah al instante.

—Por favor, no le digas a nadie que vinimos —susurró Hannah, con un nudo en la garganta—. Y no hagas preguntas al respecto.

...

—Peter Hale —dijo un enfermero, pasándole un plato de asquerosa comida. Pensó en dejar la carne de la hamburguesa fría y gris a un lado y solo comerse el pan, pero cuando la destapó para hacerlo, un papel diminuto se asomó.

Peter lo destapó con cuidado, ocultándolo de las cámaras de seguridad, simplemente para descubrir una sola palabra que ocultaba más significado para Peter de lo que alguna vez más imagino.

"Espera", decía el papel. Peter se lo comió para eliminarlo, tratando de ocultar la sonrisa en su rostro.

Sabía lo que Hannah le había querido decir. Espera. Algún día iré a buscarte. Y Peter podía vivir con eso.

Losing /Teen Wolf |running#3|Where stories live. Discover now