Me perteneces (COMPLETA)

Capítulo 36

POV MYLA

Inmediatamente Khris se marcha de la habitación, me levanto de la cama, me pongo algo de ropa y me marcho sin hacer el más mínimo ruido. Me hice la dormida para que no me hiciera ningún tipo de preguntas. Hacía mucho que no tenía una pesadilla. En realidad no recuerdo cuando fue la última vez que tuve una. Sé que Khris se merece una explicación, pero en este momento no puedo dársela. No sé si en algún momento pueda. No me merezco que sea tan atento y considerado conmigo. Él es demasiado bueno para mí y no lo merezco. Por eso me hice la dormida, para poder alejarme en silencio. Ya son casi las nueve de la mañana y al entrar en el apartamento me encuentro a Liz y Alexie preparándose un café.

- ¿Myla, te encuentras bien, qué sucedió? - pregunta Liz mientras Alexie me mira en silencio.

- Tuve una pesadilla, sólo necesito dormir. Necesito mis pastillas - me mira con recelo ya que en una ocasión hice mal uso de ellas. Por eso tan pronto llegué aquí se las entregué para que las asegurará.

- ¿Sabe Khris que estás aquí? - pregunta Alexie.

- Sí, lo sabe - le digo que sí porque será el primer lugar al que vendrá, sí es que decide buscarme y no se ha hartado de mí todavía.

- Está bien, iré por ellas - dice Liz y se retira a su habitación a buscarlas. Me marcho a mi habitación, voy al baño y me lavo la cara, me quito la ropa y me meto a la cama. Todavía tengo el cabello mojado, pero no me molesto en secarlo. La puerta se abre y Liz entra y me entrega dos pastillas con un vaso de agua. Me las tomo y vuelvo a acomodarme en la cama - ¿Quieres hablar, Myla?

- Te lo agradezco, pero sólo quiero dormir.

- ¿Vendrá Khris a buscarte?

- No lo sé. Honestamente espero que no lo haga - al pronunciar estás palabras siento un dolor inmenso, pero es lo mejor. Liz me dedica una mirada de lástima, me besa en la frente, apaga la lámpara y se marcha. Al cerrarse la puerta me hecho a llorar con ganas ...otra vez.

POV LIZ

Ver a Myla así me destroza el corazón, como si no fuera suficiente lo que ha sufrido ya. Hacía mucho que no tenía pesadillas y sé que pueden llegar a ser muy malas. Por eso le entregué las pastillas, las va a necesitar para poder dormir. Ahora sólo me pregunto cuánto tardará Khris en llegar.

- ¿Está tranquila? - me pregunta Alexie.

- Sí, se ve tranquila, pero tiene que haber llorado mucho. Tiene la cara toda roja y los ojos hinchados.

- No entiendo qué pudo haber sucedido, anoche se veía muy bien, había tomado mucho, pero se veía tranquila, pasiva.

- No lo sé, hacía mucho que no le sucedía y no creo que haya sido por Khris. Anoche hicieron las pases y ella se fue voluntariamente con él - Alexie niega con la cabeza sin poder entender que le sucede al igual que yo. Tomamos el desayuno y al cabo de un rato llaman a la puerta y sabemos quién es.

- Yo le abro - dice Alexie levantándose de la silla del comedor. Al abrir la puerta, entra un ojeroso Khris todo despeinado. También luce como si lo hubiese pasado mal - Adelante compadre. Siéntate con nosotros.

- ¿Dónde está? - Es lo único que pregunta.

- Está acostada Khris. Ven, siéntate unos minutos - me levanto y le preparo una taza de café, la necesita - Ten, te hará bien - ambos hombres se sientan sin decir una palabra - ¿Quieres hablar? - se ríe sin ganas.

- ¿Y de qué me serviría eso, Liz, si ninguno va a decirme nada? - me mira a mí y luego a Alexie y niega con la cabeza. Pone los codos en sus rodillas y entierra sus dedos en su cabello, revolviéndolo aún más. Nunca lo había visto así antes, confundido y preocupado. Alexie y yo nos miramos y decido hablar.