Me perteneces (COMPLETA)

Capítulo 48

POV MYLA
Domingo...

Nos hemos regresado a Nueva York. Ya es tarde cuando regresamos, así que nos hemos dado una ducha y nos hemos ido directo a la cama. Anoche casi no pude dormir y hoy, a pesar del cansancio del vuelo, tampoco puedo hacerlo. Me levanto con cuidado de no despertar a Khris, desenrollando sus brazos de mi cintura. No me ha soltado desde que nos metimos a la cama. Voy a la cocina a prepararme un té. Estoy sentada en el taburete de la barra del desayuno cuando Khris me abraza por la espalda.

- ¡Mierda! - hago malabares para no dejar caer la taza.

- Lo siento, cielo. No era mi intención asustarte. ¿Qué haces fuera de la cama? - pregunta con su cara metida en mi cuello.

- Sólo quería tomarme un té - el otro día que acompañé a Miranda a hacer las compras, encontré mi marca favorita de té de frutas y me he preparado uno de bayas mixtas. Le ofrezco la enorme taza a Khris. La toma sin dudarlo y da un sorbo.

- Umm, sabe muy bien.

- Sí, son mis favoritos. Le añades un poco de miel y limón y ya está - toma asiento en el taburete a mi lado.

- Me alegro que los hayas encontrado cuando fuiste de compras con Nana. Ahora dime qué es lo está pasando en esa hermosa cabecita tuya que no te deja dormir, cielo. Anoche tampoco dormiste mucho que digamos. Habla conmigo, nena. ¿Qué te preocupa? - me le quedo mirando. Pensaba que él había estado dormido en todo momento, pero me equivoqué - Sí, me he dado cuenta de que no has dormido desde ayer prácticamente y quiero saber que te preocupa - da otro sorbo a mi té y vuelve a poner la taza en mis manos - Sabes que no voy a permitir que nada malo te suceda, ¿cierto?

- Lo sé, Khris. Es sólo que tengo muchas cosas en mi cabeza.

- ¿Cómo qué? Suéltalo - agarra el taburete en el que estoy sentada y lo acerca a él. Pasa sus brazos por mi cintura y pone su barbilla sobre mi hombro. Suspiro profundamente. Si algo he aprendido en éstas últimas semanas es que cuando Khris me diga que hable, es mejor que simplemente lo haga o no lo dejará ir.

- Estoy preocupada y nerviosa.

- Sí, eso lo he notado. ¿Es por Erik? - mi cuerpo se encoge ante la mención de su nombre - Cielo, sabes que no tienes de qué preocuparte. No voy a permitir que se te acerque o te haga daño. De hecho, quería comentarte algo. A tú familia también le preocupa Erik. A mí también de hecho. El no tener conocimiento de que carajos es lo que quiere me incomoda bastante. He pensado en ponerte seguridad y un chofer.

-¡¿Qué?! No por favor, Khris. No me hagas esto - le suplico - Te prometo que no saldré del apartamento sola si eso te hace sentir más tranquilo. Pero por favor, no quiero tener a alguien detrás de mí a cada momento. Además, mientras esté aquí no será necesario.

- Cielo, Liz regresará en una semana y sé que van a querer salir a hacer cualquier cosa, cualquier tontería que les permita estar juntas. Dame la satisfacción de que vayan acompañadas. Al menos cuando yo o Alexie no podamos acompañarlas. Además, estoy seguro de que cuando Alexie se entere de esto, el tampoco va a querer que estén solas. Sí no lo hago yo, lo hará él. Te lo aseguro - resoplo como niña pequeña porque sé que tiene toda la razón.

- Está bien. Pero sólo cuando vayamos a estar solas. No saldré de este apartamento por mí cuenta, pero prométeme que no tendré a alguien pisándome los talones e invadiendo mi espacio personal o el de Liz.

- Lo prometo. Ni siquiera se darán cuenta de que la seguridad estará con ustedes - dice satisfecho - Gracias.

-¿Por qué? - le pregunto confundida.

- Por dejarme cuidar de tí, cielo.

- Soy yo quién tiene que agradecerte por la paciencia y todas las molestias que te tomas conmigo. No se merecen.