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Un día había pasado desde el encuentro que tuvieron los híbridos y Jungkook aún no podía dejar de pensar en cómo su híbrido se había abrazado a Suga. Admitía que se encontraba un poquito celoso por la cercanía que los chicos tenían, pero no lograba entender como a TaeHyung le podía agradar esa bestia. Ahora él se encontraba en la cama mientras TaeHyung dormía plácidamente a su lado, Jungkook tenía una mano en su cintura mientras observaba la hermosa carita que este poseía. Con su mano apartó un cabello salvaje de su cara haciendo que TaeHyung se moviera aún adormilado.

-¿A-amo? ¿Que sucede? -pregunto con pesadez-. ¿Por que me mira así?

Esta vez Jungkook no dudo como las otras veces que tuvo oportunidad. Lo beso con delicadeza tocando la mejilla del híbrido suavemente, sonrió con cariño al escuchar como su híbrido jadeaba por la sorpresa. Al separarse Jungkook acarició sus mejillas y nuevamente fue por esos labios que sólo con un beso ya se habían convertido en su mayor obsesión, TaeHyung esta vez no jadeo sólo suspiro entrecortadamente y siguiendo el beso con torpeza digna de un virgen. El híbrido apoyo sus manos en el pecho de Jungkook sintiendo como su corazón latía rápidamente, al igual que lo hacía el propio. Taehyung no dudaba de que si seguían así el se iba a desmayar de la felicidad.

Al separarse Jungkook miro sus ojos fijamente deleitándose con aquel brillo hermoso que tenía su híbrido. -Eres mío -murmuró con la voz ronca a causa del sueño. Taehyung jadeo nuevamente al sentir las manos de su amo fuertemente presionadas sobre su cintura.

-¿A-amo? Y-yo...

-No me gusta verte con otras personas, no cuando se que ellos caerán bajo tus encantos -murmuró besando cada parte de su rostro. Taehyung con felicidad suspiro y ronroneo buscando más caricias de su amo-. Odio verte sonreír con Suga, me hace sentir tan celoso. Pero se que aunque trate de no serlo, no podré.

-¿Por que? - murmuró bajito sintiendo como los dedos de sus pies se doblaban a causa de los nervios.

-Porque me gustas demasiado. Sería un tonto si te dejará ir y yo no quiero eso -dijo acariciando sus mejillas con amor-. Te quiero junto a mi, siempre.

-U-usted también me gusta, amo -murmuró besando sus labios de manera corta y suave. Tanto que sorprendió a Jungkook por tanta delicadeza, pero este no se conformó con aquello, si no que tomo con rapidez la parte posterior de su cuello para besarlo de manera demandante y apasionada sólo como él sabia hacer.

Sólo como él lo iba a hacer con su TaeTae.

...

Todo el día había pasado entre sonrojos y besos. Besos de parte de Jungkook y sonrojos adorables del hermoso híbrido. El mayor de ambos no paraba de repartir caricias hacia el híbrido, cosa que a aquel adorable ser no le molestaba en absoluto, Jungkook se dio cuenta de eso por lo que aprovecho aún más la sumisión de su híbrido.

Su híbrido. Su pequeño.

-Quiero malvaviscos -murmuró con un puchero el menor. Sintiendo la mirada penetrante de su amo, sin más camino hacia la cocina siendo seguido sigilosamente por su mayor, pero claro sin llamar la atención del híbrido.

Taehyung con cuidado se levantó con las puntas de sus pies, logrando que su colita se moviera de un lado a otro causando una sonrisa llena de ternura por parte del mayor. Trato de tomar con dificultad la bolsa de malvaviscos, pero aún así no pudo. Con la mirada busco algo que le sirviera, y así fue, encontró en una esquina alejada un banco un poco bajo para él, pero lo suficiente alto para que pudiera alcanzar la comida que tanto quería.

Con una sonrisa y una exclamación de victoria de su parte, Jungkook tomo la cintura de su pequeño y lo bajo de ese inestable banco, tanto que podría haberse quebrado si TaeHyung hubiera pasado dos segundos más sobre aquello.

-Debiste tener cuidado, casi te lastimas -giro al híbrido para ponerlo frente a él, observando como un puchero se formaba en esos suaves y delicados labios.

- Lo siento, amo -murmuró sintiéndose totalmente culpable-. Pero tenía hambre.

-Ya lo se, pequeño -beso los labios de TaeHyung para sacar ese adorable puchero de su lugar-. Aunque me pudiste pedir ayuda a mí.

-No quería molestarlo, amo -suspiro apoyando su cabeza en el hueco del cuello de Jungkook. Inhaló el característico olor de su amo ronroneando por tanta cercanía, cosa que hizo reír al de cabello negro.

-Tú nunca me molestarías, pequeño -beso su cabello caminando hacia la sala aún con el híbrido en sus brazos.

...
Espero que les guste^^
–c muere ignorada–

My Little Hybrid»KookVOnde as histórias ganham vida. Descobre agora