Obsoleto - El Orden Natural De Las Cosas - Obsoleto

Historias Pasadas - Parte IV

Disclaimer: Nada de Harry Potter es de mi propiedad, los personajes y todo lo relacionado a la historia canon que pueda aparecer, a excepción de lo creado y modificado por mi persona, pertenecen a J.K. Rowling.

Summary: Harry Potter, un muchacho consciente de la magia, con una gran inteligencia, pero roto por culpa del maltrato de sus parientes. Hasta que por azar del destino, su vida va a cambiar completamente y ya nada va a volver a ser igual.

El Orden Natural de Las Cosas.

Año VI

Capítulo LXXX

"Historias Pasadas - Parte IV"

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—DIALOGO NORMAL—

—(PENSAMIENTO)—

—"PARSEL"—

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La nieve continuaba cayendo con tranquilidad; durante parte de la mañana y el mediodía calló sin pena ni gloria, pero con una tranquilidad digna de un romántico relato. Y con la tarde de ese mismo día, después de año nuevo, también llegó lo que había estado molestado a Harry durante todo la mañana, mediodía y tarde.

—De verdad —comentó Harry molesto al lado de Daphne mientras veía a Hermione, como Astoria antes, desaparecer en las llamas verde esmeralda de la red flu —, Minnie no puede ser tan paranoica —miró a Daphne buscando consuelo que caminaba hacia la chimenea, mientras que Luna desaparecía en las llamas —. Solo porque haya había ataques cerca de King's Road no nos puede exigir que viajemos por red flu al colegio, ¿Acaso no sabe que odio este transporte? Me da nauseas. —agregó haciendo una mueca infantil.

Daphne se rio y entrando a la chimenea mientras miraba a Harry dijo.

—Mi amor, ella te ama y solo se preocupa por nosotros. Además, ambos sabemos que ella no permitiría que le sucediera nada a su pequeño y amado Harry, un ataque no es comparable a una pocas nauseas, imagínate que estuvieras embarazado y con eso podés justificar las ganas de vomitar. —agregó guiñándole el ojo divertida.

—Cuando te embarace, te prometo que me voy a reír de tus nauseas. —exclamó Harry ofendido.

La Slytherin, que tenía los polvos flu ya en su mano, miró a Harry con una ceja levantada y comenzó a reírse y dijo.

—No lo harías.

—¿Quién te dijo que no lo haría? —preguntó Harry en un tono intentando sonar desafiante.

—¿Te olvidaste de que soy tu esposa? —preguntó Daphne divertida y con una sonrisa como si ya hubiera ganado la dicción continuó —. Nos conocemos desde hace mucho tiempo, Harry y el día que dejemos de utilizar el hechizo anticonceptivo para que como dijiste, embarazarme, y con lo sobreprotector que podés llegar a ser... creo que el peor de mis problemas van a ser las náuseas —se rio y agregó —. Aunque viendo el lado positivo, imaginarte completamente pendiente de mí en todo momento y a toda hora; concediéndome todos los gustos, antojos y mimándome todo el tiempo como todo el buen y atento padre primerizo que creo que vas a llegar ser, no creo que sea tan malo. Aunque creo que esto deberíamos empezar a hablarlo el próximo año. Te espero del otro lado, lindo. —le lanzó un beso a su esposo que la miraba con cara de completa resignación y pronunciando su destino desapareció.

Harry vio cómo su esposa también desaparecía y quedaba solo en el silencio de Potter Place. Caminó hacia la chimenea y antes de entrar le dio una mirada a Gaya que seguía parada en su percha dorada y preguntó.