22. Diabolus in caritate

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Dedicado a Desastre_23, mi querida Cielo Blanco; Gracias por participar en la actividad de instagram y dejar aquí y allá bellos comentarios.

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22. Diabolus in caritate

No tengo idea de cómo todos en Doble R se enteraron de lo sucedido hoy por la mañana en el restaurante del Hotel Galería. A mi paso repiten las ofensas imputada a Ivanna y ríen. Igualmente, les provoca curiosidad verme en el edificio por dos motivos.

1. Se supone que, debido a la actual competencia por el puesto de vicepresidente, he durado lo suficiente como para imponer un nuevo récord.

2. Si yo estoy aquí, ¿dónde está Ivanna? Es día de cacería. ¿No debería estar acompañándola?

Y las especulaciones contribuyen al cotilleo.

Para ser sincero, no me importa, poco contribuye a empeorar mi día. Mis hombros lucen caídos, camino arrastrando los zapatos, no hay una sonrisa en mi rostro. Aún no puedo creer que Ivanna se deshiciera de mí. No después de lo que acordamos, no después de que ayer fue un buen día para los dos. Aún me debato si se debe a la llamada de Rodwell o porque le molestó que opinara sobre su vida. Ya me habían advertido que no deja pasar lo segundo.

—Aquí tienes —me dice Ángela, secretaria de Mago Perman, al entregarme el cheque—. Firma de recibido.

Lo miro antes de firmar:

—¿Segura que esta es la cantidad? —digo a Angela, boquiabierto—. El señor Rodwell habló de un adelanto.

Ángela sonríe.

—Lo es. Esa cantidad corresponde al 10% de tu sueldo fijo.

—¿10%? —Hasta lo pregunto elevando mi voz.

Con esta cantidad suelo sobrevivir todo un mes.

—Sí —A Ángela le divierte mi reacción—. ¿Al firmar tu contrato no viste el sueldo a devengar?

Hago memoria:

—Como tenía miedo de que Ivanna me regañara por pasar tiempo fuera de la oficina, apenas leí —reconozco y otra vez miro el cheque—. Pero asumo haber creído que la cantidad no correspondía al salario de un mes —Paso una mano por mi cabello—, quizá tres o un semestre.

Ángela coge un Post-it y garabatea una cantidad sobre este.

Me lo entrega.

—No, Luca. Esto es lo que Nómina debe depositarte cada mes.

Doy dos pasos hacia atrás y casi me voy de espaldas al leer la cantidad. Pronto escucho risas a mi espalda. Soy el espectáculo de la mañana en el departamento de Recursos Humanos.

—Si me lo preguntas a mí, es poco por el precio de tener que soportar a Ivanna —dice Ángela.

—Y nada comparado a lo que gana Ivanna —agrega alguien más del departamento—, que además de sueldo fijo y prestaciones por ley, al igual que el resto de ejecutivos, recibe comisión por cuenta obtenida. Y como es la mejor después de Lobo, sus ingresos solo están por debajo de los que obtiene él, Aguilera y el mismo Rodwell.

—«La mejor después de Lobo» —destaca otro chico —. De escucharte decir eso se le reventaría una ulcera.

—No solo Lobo ya consiguió esta semana una de las cuentas imposibles —Le contesta alguien más. La competencia por el puesto de vicepresidente es el nuevo tema de conversación del departamento—. Su comisión se irá a la luna.

El asistente ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora