THORKI - Colección de One-Shots

Viejo amor.

Advertencias:
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Thor gordito

Loki sabe que es un hombre exitoso. A sus treinta y cuatro años de edad es el director de la más reconocida revista de modas del país, tiene a un sinfín de empleados a sus órdenes, y una decena de socios que lo admiran y confían plenamente en sus capacidades. Fuera de su trabajo tiene algún que otro amante ocasional, un departamento con una de las mejores vistas de Nueva York, y un Aston Martin One-77 que despierta la envidia de todo aquel que lo ve pasar.

Algunos podrían decir que su vida es un tanto superficial, pero ya ha experimentado el intentar invertir en un vínculo emocional destinado al fracaso y sabe cuáles son los daños que ocasiona semejante mala inversión.

Así que Loki está a gusto con su vida completamente controlada. Sin drama, sin altibajos, sin sufrimiento. Sin esos enamoramientos que hacen que la gente pierda la cabeza, y su dignidad.

Bueno, al menos cree que es ajeno a todo eso hasta que su secretaria le anuncia que ya tiene a su primer postulante del día para el puesto de asistente en su oficina.

Y todo su mundo se derrumba cuando se encuentra frente a frente con el único hombre en su vida que logró atravesar todas sus defensas y robar su corazón.

Thor Odinson.
Su viejo amor de la Universidad.

Un breve gesto de sorpresa recorre el siempre tan expresivo rostro de su ex, y Loki no puede evitar escanearlo de pies a cabeza. Atrás quedó su musculoso cuerpo de deportista y su pulcro cabello corto peinado a la moda. Por el contrario todo en Thor se ve distinto ahora. Su cabello rubio resplandece largo y brillante sujeto en una informal coleta, y su cuerpo anteriormente escultural ahora está provisto de curvas que Loki se ve tentado a tocar.

¿Diez o quince kilos? El hombre no puede determinar con exactitud cuánto peso ganó Thor, pero está seguro que le resulta sorprendentemente atractiva su versión exuberante.

Lo que es jodidamente turbador considerando que es muy exigente con los cuerpos ajenos.

- Loki... - El rubio balbucea con una sonrisa, y se pone de pie enseguida cuando lo ve entrar. Al joven director no le pasa desapercibida la forma en que Thor intenta cubrirse inútilmente con su abrigo. Al parecer al ex- jugador de fútbol americano no le resulta tan comoda su nueva silueta.

- Thor... tanto tiempo sin verte. ¿Qué han sido... nueve años? - Pregunta con una sonrisa arrogante en sus labios. Loki sabe exactamente que fueron nueve años porque jamás se permitió olvidar su error. El error de enamorarse de alguien tan opuesto a él.

Mientras que Loki había luchado incansablemente por graduarse y obtener un buen trabajo, Thor había pasado buena parte de su estadía de la Universidad practicando en el equipo del campus. Nunca había tenido un objetivo claro, y cuando Loki le había sugerido que sería más productivo enterrar su nariz en un libro que en un vaso de cerveza, Thor se había ofendido y se había vinculado aún más con los cabeza huecas de su equipo.
Alcohol y mujeres. Ese había sido el estúpido lema de esa gente, y aunque su novio no era como ellos, se había visto obligado a formar parte de esos primarios rituales para seguir perteneciendo al equipo.

Loki había llegado a odiar la veta deportista de Thor, porque aunque había llegado a amar su rostro salpicado de felicidad mientras jugaba un partido, el comportamiento engreído del capitán del equipo lo había llegado a enfurecer múltiples veces.
Si tan sólo esos idiotas sin cerebro se hubiesen enterado que el escuálido ratón de biblioteca se follaba a su capitán, se habrían espantado como nunca.

- Ha pasado mucho tiempo. ¡Pero me alegra verte de nuevo! - Thor exclama con una sonrisa que a Loki se le antoja noble y genuina. Un malsano deseo de borrarsela a besos se instala dolorosamente en su pecho. ¿Cómo puede actuar tan imperturbable luego de su dolorosa ruptura?
Y lo que es peor...