THORKI - Colección de One-Shots

Anti-amor

- ¿Cuántas cajas de bombones ya has recibido hoy? - Tony le preguntó sorprendido, mirando la bolsa llena de chocolates que había traído a casa.

La expresión anonadada de su compañero de piso le hizo sonreír.

- Las de siempre. No sé porqué piensan que me compraran con un tonto alimento hecho de cacao. - Loki soltó con desprecio mientras se quitaba la chaqueta y la colgaba pulcramente del perchero.

- Dios le da chocolates al tonto que no los valora. - Tony repuso afligido, mientras se dejaba caer en el sofá, deprimido.

Loki sabía que Tony estaba sufriendo otra vez por Steve. Esos tontos habían decidido separarse, y como consecuencia de eso su mejor amigo había terminado pidiéndole quedarse en su departamento para no estar solo.

- Oh, vamos Tony. No vas a decirme que te deprimirás por una tonta fecha comercial. - Loki lo regañó, molesto mientras veía a su amigo suspirar.

- ¿Qué tal si deja a nuestro pequeño Peter con su abuela para salir en alguna cita? ¿Crees que ya esté viendo a alguien? - Tony preguntó, sumido en su propia miseria.

La bata roja manchada de aceite de papas fritas, las pantuflas de Hello Kitty, la barba normalmente pulcra ahora desalineada, y Loki tuvo suficiente de la imagen patética de su amigo. No permitiría que siguiera así por el imbécil de su ex.

- Tony Stark, deja de llorar como un bebé. Quiero que te bañes, te pongas el outfit más sexy que tengas, y salgamos por unos tragos. -

- ¿Salir? ¿Para qué? Mi vida amorosa está arruinada... - Tony se quejó mientras daba un sorbo a su whiskey.

Loki arrebató con furia el vaso de las manos de su amigo. Era suficiente.

- Mueve tu trasero de ese sofá, báñate y te quiero listo dentro de una hora. Saldremos a celebrar que no necesitamos de un hombre para pasar San Valentín. -

- Yo no necesito un hombre, yo necesito a mi Capipaleta... - Tony lloriqueó mientras se ponía de pie sin ganas.

- Aún no entiendo de donde surgió ese ridículo nombre y ciertamente no quiero saberlo. Y porque sigues en ese estado deplorable por Steve es que hago esto. Ya sabes que volverá a buscarte, siempre lo hace. Pero por hoy necesitas sentir la suave brisa de la soltería y la diversión. - Loki sentenció con solemnidad, mientras empujaba al mayor directo al baño.

- Si tú dices... ¿Qué podría salir mal? - Tony reflexionó con pesar.

       *             *             *

- ¡No puedo creerlo! - Loki estalló colérico al ver dos cabelleras rubias sentadas a dos mesas de ellos. La música y las luces aturdían, pero hasta Tony se había dado cuenta que era su compañero el que estaba allí sentado.

- Te dije que tendríamos que habernos quedado en casa y pedir helado. Ahora tengo que ver como Steve está en una cita con ese dios nórdico. ¡Ni siquiera tengo chances contra un espécimen como ese! - Tony apuró un trago, tragando su amargura.

Loki se sentía furioso consigo mismo y con el imbécil de Rogers.

¿Cómo se atrevía a salir con otro tipo?

Ignoró a la voz de su consciencia diciéndole que el tipo junto a él era más caliente que los actores que estaban de moda. No podía culpar al imbécil de su ahora ex-amigo, por salir con alguien como él.

- Hasta tú lo miras con deseo... - Tony se lamentó. - Incluso yo dejaría mi rol pasivo para follarlo. - Agregó, mientras se llenaba las mejillas de maní.