𝐄𝐋 𝐃𝐑𝐀𝐆𝐎'𝐍 𝐁𝐋𝐀𝐍𝐂𝐎 | 𝐣. 𝐒𝐧𝐨𝐰

Capitulo 24

-No debiste hablarle así.- dijo Jon. 

-Lo odio y este día ya me a dado bastante razones para matarlo.- respondió Hydra. 

-No deberías meterte en tantos problemas por mi.- 

-¿Por ti?- pregunto Hydra y enseguida las mejillas de Jon se sonrojaron a mil y se puso nervioso. 

-Bue..Bueno yo..yo pensaba, que.. que co...como siem...pre enfrentabas a...a Thorne lue...go de una..una charla con...con...migo.- dijo nervioso y Hydra soltó una risa. 

-Tranquilo, la mayoría es por ti pero no tengo problema por ello, igual me gusta enfrentar a Thorne.- dijo Hydra pero no evito que se detuviera el sonrojo o el nerviosismo de Jon. -¿Nos veremos esta noche?-

-Si..Si, iré a buscar a Sam.- dijo nervioso y salio de ahí casi corriendo. Busco a Sam por todos lados, al encontrarlos se escondieron en un lugar seguro en donde nadie los escucharía. -Tengo un problema, Sam.

-¿Que pasa?

-Es Neith.- dijo nervioso y el sonrojo volvió levemente pero su amigo ni cuenta se dio. 

-¿Le sucede algo a Neith?.

-¡No! ¡A mi!- chillo pero a la vez susurrando. 

-Dime, que no comprendo nada.

-Creo que me gusta.- dijo nervioso. 

-¿Quien? ¿¡Neith!? ¡Pero es un chico!- dijo Sam. 

-¡Lo se! pero shhh.... No se que es lo que esta pasando con nosotros pero me gusta estar cerca de el, me gusta verlo sonreír, cuando lucha o en cualquier cosa.... Y acabo hablar con el, yo...yo me sonroje y me puse nervioso.- dijo nervioso nuevamente y ambos se sentaron. 

-¿Estas seguro? 

-No. No lo se. Tal vez si.- dijo Jon nervioso, y ganas de decir completamente no le faltaron. 

-¿Y tu le gustas?

-No lo se.

-Creo que es simple.

-¿Que cosa? ¿Que tengo que hacer?

-Besarlo.- dijo obvio y Jon se alejo un poco para nada seguro.

-¿Besarlo?.... Yo al llegar aquí sabia que me gustaban las chicas, pero ahora.- dijo Jon, no sabia como sentirse, unas ganas de besar a Neith tenia, pero no podía hacerlo, ambos eran hombres. 

-Entonces bésalo, si te gusta el beso es por algo.- dijo Sam con una sonrisa, tal vez no es normal aquello pero le gustaría verlo en algo aunque en la guardia nocturna no se podía estar con mujeres, pero ambos son hombres ¿No?

-¿Estas seguro?

-¡Por supuesto!

-¿Cuando crees que lo pueda hacer?

-Tu sabrás cual es el momento, pero recuerda que los salvajes viene por nosotros y luego los caminantes blancos.- dijo Sam.

Jon estaba nervioso, asustado. Nunca se habia imaginada besar a un chico y mucho menos gustarle uno pero lo haría, quería saber lo que habia entre ellos y tal vez Sam tenia razón, la mejor opción era besarlo ¿Pero si a Neith no le gusta? ¿Y si se alejo de el? Eso no podía pasar, aunque si a Neith no le gustaba podía inventar una buena escusa para que no se alejara de el.

Los días no ayudaron a Jon, cada vez que decidía "hablar" con Neith perdía todas las fuerzas. Aquel día, Hydra se despertó temprano, Rhaegar ya bastante grande dormía en la cama de Hydra, la chica sin ganas de practicar comenzó a caminar por los pasillos del castillo negro y notó la puerta de la bibloteca abierta, ahí estaba Sam. 

-¿Sam? ¿Que sucede?- pregunto Hydra mientras se sentaba al frente de el. 

-Esta muerta por mi culpa.

-¿Quien?- pregunto Hydra preocupada. 

-Gilly, el pequeño Sam.- 

-¿Porque dices esto? ¿Que sucedió?

-Los salvajes atacaron la aldea en donde estaba, fue mi culpa.- dijo y Hydra lo abrazó. 

-No fue tu culpa, tu no hiciste nada malo solo querías protegerla y ademas no podrías haber sabido lo que iba a suceder.- dijo Hydra intentando consolar a Sam. 

-Claro que si, estaban atacando las aldeas vecinas.-

-Tu solo querías sacarla de un lugar rodeados de hombres... Tal vez Gilly logró escapar con el pequeño Sam.-

-Tal vez lo hizo.- dijo ilusionado. -Debo ir por ella.

-No puedes hacerlo Sam, si ella logró escapar vendrá al castillo negro, es el único lugar que conoce y te tiene a ti, no puedes irte.-

De alguna manera Hydra logró calmar a Sam y evitar que hiciera alguna estupidez. Todas las noches, a Sam, Jon y a Hydra le tocaba hacer guardia todas las noches. Aquella noche, Hydra se habia alejado bastante del castillo negro, el muro es bastante extenso y hasta una parte lo aseguraban, Hydra notó que su hijo habia crecido bastante y quería comprobar su forma original. 

Cuando estuvo en su forma original Hydra se sorprendió mucho, la ultima vez que lo habia visto era del tamaño de un león macho pero ahora estaba tan grande que Hydra supo que era un dragón adulto ahora. 

No pensó mucho y se subió arriba de el, Rhaegar estaba contento, hace mucho que quería volar con su madre y esta era el momento, voló tan alto que pasaron las nubes mientras Hydra sonreía y gritaba de la felicidad, Rhaegar fue descendiendo pero evitaron acercarse al castillo negro, Hydra vio el lugar que era la guarida de Craster pero siguieron volando regresando a su hogar. Pero algo sorprendió a Hydra, un gran grupo de salvajes y gigantes empezaban a juntar bastante madera. 

-¡Rápido Rhaegar! ¡Debemos volver!- exclamo Hydra, tal como lo pidió, Rhaegar se apresuro, al llegar en donde se habia transformado, Hydra lo transformo en un caballo y rápidamente llego al lugar, nuevamente lo transformo en un lobo y empezó a correr hasta que encontró a Jon. 

-¡JON! ¡JON!- grito Hydra y varios se acercaron para saber que era lo que pasaba. 

-¡Neith! ¿Que sucede?- 

-Los salvajes, están iniciando el fuego.- se apresuro a decir. 

-¿Pero como? ¿Como lo sabes?- 

-Lo vi, no están tan lejos de aquí, hay que hacer sonar el cuerno.- dijo Hydra y justo una potente luz los ilumino, tal como dijo Hydra, los salvajes habian llegado y rápidamente Jon fue a sonar el cuerno. 

Esta iba a ser una noche larga y lo mejor era que los dioses estuvieran con ellos.