Capitulo 49

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Todos los escudos de la casa Bolton fueron quemados al igual que todos los cuerpos de cada uno de los guerreros de ambos lados. Jon Snow llevo a Hydra al maestre que habia en Winterfell, le sacaron la flecha, le limpiaron todas las heridas que tenia, las curo y las vendo. Cuando el maestre ya habia terminado Hydra se encontraba con algunas lagrimas en sus ojos violetas por el dolor cuando le limpiaron la herida y cuando le sacaron la flecha atravesada. Pero ella estaba bien.

Aquel día, Hydra se limpio y durmió todo el día para sanar la herida. Y para el día siguiente se encontraba bastante bien aunque debía tener cuidado con su herida. Caminaba por los pasillos de Winterfell para llegar al exterior, todavía recordaba la primera vez que estuvo aunque no exploro mucho.

-Sansa.- saludo cuando se detuvo al lado de la pelirroja. 

-Hydra me alegro que hayas despertado, Jon estaba preocupado.- dijo Sansa con una sonrisa y abrazo a la peli-plateado con cuidado. 

-Estoy bien, solo algo dolorida.- dijo con una sonrisa y  Rhaegar llego a su lado. -Entiendo que tu quieres que Ramsay pague por lo que te hizo, a mi no me hizo nada pero me gustaría ayudarte con ello.- dijo Hydra.

-No lo quiero muerto.- aclaro Sansa y Hydra asintió, ella no lo iba a matar. -¿Que le harás?

-Quemar lo mas apreciado de el y asustarlo un poco ¿Crees que pueda?- pregunto Hydra.

-Claro, se encuentra en la perrera ahora.- 

-¿Puedo hacerlo ahora?- pregunto y Sansa asintió, desde conocía a Hydra se alegraba que ella estuviera con su hermano, sabia defender lo suyo y encargase de que paguen los que lastimaron a ella y a su familia, de algunas manera le recordaba a su madre. -¿Y me lo podría llevar de aquí y luego regresarlo? - pregunto y Sansa acepto algo curiosa. 

Edmund y Hydra montaron sus caballos ese mismo día y atras de ellos venia Ramsay Bolton caminando con una cuerda en sus manos. Llegaron igual al lejos. 

-Sabes, querías un lugar lejos para mantener lo nuestro oculto y lo comprendo.- dijo Ramsay Bolton con una sonrisa, su rostro estaba cubierto de sangre, de su propia sangre. 

-Eres un asqueroso lo sabias, y no quiero nada contigo.- dijo con una mueca de asco al ver a Bolton.

-¿Entonces para que estamos tan lejos?- 

-Para pagar algunas cosas que hiciste ¿Dime que te da miedo?- pregunto Hydra con una sonrisa mientras se sentaba en una roca.

-Nada.

-Enserio ¿Ni los dragones?- pregunto Hydra con una sonrisa.

-No existe.

-Acabas de dañar los sentimientos de mi dulce hijo.- dijo y se escucho el rugido de un dragón, Ramsay miro por todos lados asustado y antes de que dijera algo, un enorme dragón blanco se puso al lado de la peli-plateado. -Este es Rhaegar.- dijo mientras acariciaba a su hijo y luego dejo un beso en el. 

Al cabo de algunas horas volvieron a Winterfell y Sansa al igual que otros se sorprendieron al ver a Ramsay Bolton, aquel egocéntrico hombre estaba bastante asustado y sin un pene. Los guardia lo llevaron a su celda que tenia. 

-¿Que le hicieron?- pregunto sorprendida Sansa. 

-Solo lo asustamos un poco.- dijo Edmund con una sonrisa. 

-Y le cortamos la verga.- aclaro Hydra. -Puedes encargarte de terminar con el hoy, o si quieres que sufra un poco, mátalo mañana.- 

-Lo haré y gracias a ambos.- dijo Sansa y los abrazo, luego se fue con una sonrisa en su rostro. Le agradaba Hydra, sabia que era una Targaryen, aquello lo supo cuando lo dijo frente a Ransom Elliot y no se lo tomo tan mal. 

-¡Hydra!- exclamo Jon y se acercó corriendo a la chica y la abrazo con cuidado, luego beso su frente y por ultimo sus labios. -Estuve muy preocupado ¿Donde estuviste?-

-Estuvimos asustando un poco a Bolton.- dijo y Edmund se retiro para darle privacidad. 

-¿Esta vivo?- pregunto mientras la abrazaba con cuidado.- Sansa quiere acabar con el.

-Si, hablamos de aquello y lo regresaron a la perrera.- respondió.

-Te amo ¿Lo sabias?

-Siempre.- respondió con una sonrisa.





Ambos pasaron el resto del día juntos al igual que la mañana del día siguiente en el dormitorio que ambos compartían. 

-Hydra.- dijo Jon acariciando el alrededor de la herida de la flecha.

-¿Si?- dijo cerrando los ojos disfrutando las manos de Jon recorrer su cuerpo desnudo.

-Te amo mas que nada en el mundo. Se que soy un Snow y acabamos de recuperar Winterfell, yo no tengo mucho que darte pero se que quiero pasar el resto de mis días contigo si tu lo deseas.- dijo Jon mientras admiraba todo de Hydra y esta estaba sorprendida con aquellas palabras lo que asustaba un poco a Jon. -Me preguntaba si tu ¿Deseas pasar el resto de tus días conmigo? ¿Te quieres casar conmigo?- pregunto Jon.

Jon estaba nervioso al ver que Hydra no respondía, de los ojos violetas de la chica empezaron a salir algunas par de lagrimas mientras asentía rápidamente. 

-¿Es un si?- pregunto con una sonrisa. 

-Si, si y mil veces si.- dijo y unieron sus labios, era suave, lento y lleno de amor. 

-Todos estarán muy felices cuando se enteren.- dijo Jon con una sonrisa y Hydra también lo hizo.

-¿Quien lo sabia?

-Solo Edmund, Sansa y Ser Davos, a Tormund se le hubiera salido enseguida.- dijo divertido.

-Cierto, aquel pelirrojo no sabe guardar secretos.- dijo también divertida Hydra.

-No sabes las ganas que tengo de gritar al mundo que me casare con la mujer mas hermosa del mundo.- 

-Y yo el hombre mas apuesto, con aquellos ojos grises y sus perfectos rulos.- dijo Hydra y beso la comisura de sus labios. 

-Quiero pasar toda mi vida junto a ti.

-Y lo haremos, te lo prometo.

𝐄𝐋 𝐃𝐑𝐀𝐆𝐎'𝐍 𝐁𝐋𝐀𝐍𝐂𝐎 | 𝐣. 𝐒𝐧𝐨𝐰Donde viven las historias. Descúbrelo ahora