Capítulo 18| Besar a un demonio

7.2K 649 509
                                    

Dulce

Esa noche me sentí muy extraña, tenía sentimientos encontrados y estos aumentaron después de aquella pequeña plática con Darren.

"—No lo creo —se negó —Algo quiere.

—Pues sí, quiere salir con nosotros —le dije con obviedad.

—Algo me huele extraño... —dijo con voz de misterio.

—Deben ser tus calcetines, marrano — lo culpé riendo.

— ¡Hey...!

Un mensaje llegó a mi celular haciendo que pierda la atención sobre Darren y la pase a aquel aparato entre mis dedos.

"Desconocido

—Buenas noches, dulzura, trata de sobrevivir sin mí por una noche ;)"

—He vivido toda mi vida sin ti y aún estoy viva, idiota.

—Si pero desde que llegue a tu vida, le puse un poco más de emoción.

— ¿Qué te hace creer que mi vida no tenía emoción?

— ¿Te has robado autos antes?

—No.

— ¿Has peleado con alguien cada vez que lo ves?

—Mh, no.

—Exacto, emoción, adiós llorona.

No sé en qué momento me había quedado embobada con el celular, una sonrisa se había formado en mi boca y algo muy dentro de mí, sentía emoción.

—Dilo... —la voz de mí primo captó mi atención.

— ¿Decir qué? —pregunté tratando de ignorarlo, sabía lo que quería.

—Lo que ya sabes pero no quieres admitir. —sus ojos demostraron seguridad al decir aquellas palabras.

¿Tenía que admitir que...? Mire por última vez mi celular y lo comprendí al instante.

—Creo que me gusta...—miré a mi primo con terror —Creo que me gusta Damon.

Al día siguiente, las horas pasaron volando, papá gracias a dios no se había enterado de nuestra corta visita a la comisaria lo cual agradecía mucho y a la vez me hacía pensar en ¿Qué había hecho Damon para cubrir todo?

Dejando eso de lado solo faltaba que Damon pasara por nosotros, Darren no creía que el vendría pero aun así se alistó, le hablamos a Luna y Sergio, al final quedamos todos en ir nuevamente al Dorado.

Lo disfrutaría mejor esta noche, después de aquella confesión con Darren, tenía las cosas más claras.

Hoy debía conseguir un beso de Damon ¿Cómo? Ni yo lo sabía. Lo único que sabía era que si lo besaba encontraría la respuesta a mis dudas. Si se sentía mágico, era que me gustaba y se sentía no mágico pues no era.

Vaya mierda que era mi lógica, era un plan completamente loco pero quería intentarlo.

Según luna, no perdería nada intentándolo, creo que ella es la más emocionada con todo este embrollo, tenía incluso un shipp, el lado secreto de las amigas le dicen.

¡Arriba Damulce!

Sí, es una combinación extraña pero bueno, tampoco habían muchas ideas para nuestro shipp, en fin, deje que la tonta de mi amiga haga su trabajo imaginario.

El sonido de una bocina me hizo despertar.

— ¡Darren! —Chillé emocionada — ¡Si llegó!

—En mi defensa, yo no dije que no lo haría... —indicó caminando hacia la puerta para salir.

Prohibido Enamorarse de Dulce ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora