Capítulo 9 [Pasado]

9.5K 530 36
                                    

Anton Strauss

Diciembre 12 (pasado)

Alemania-Berlín

—Hey niño bonito, que te trae por aquí— me dice un drogadicto saliendo de entre las sombras del puente.

Mi sangre empezó a helarse, al darme cuenta que era muy mala idea venir por estos lugares a esta hora de la noche.

—Nada que te importe— respondo mientras sigo caminando.

Hasta que vuelve a atravesarse.

—¿Estás seguro? O es que te quitaron el carro por portarte mal niño rico—se burla y mi humor es una mierda estos momentos. Sigo caminando intentando ignorarlo—. Vamos, cuéntame...

Ya me hartó.

Di la vuelta y con todas las fuerzas que tuve, alcancé a lanzarle un golpe en el rostro. Hasta que cayó al suelo. Iba a seguir golpeándolo, pero él se levantó con todas las ganas de seguirme golpeando. Lo intentó, pero lo esquivé dejando que pase por un lado de mí, furioso. Intentó volver y supe al ver sus ojos rojos que estaba demasiado drogado como para hacer el intento de una pelea. Le puse un pie antes de que llegara a mí y vi caer al idiota tan patéticamente al suelo.

Qué horror. Y pensar que estaba a punto de tenerle miedo.

No se volvió a levantar por un momento. Seguía acostado bocabajo en el suelo—dudo mucho que se haya muerto con esa caída— sin embargo, me acerque un poco e inmediatamente reaccioné yéndome para atrás, ya que el muy idiota intentó engancharme un golpe en la cara. Cosa que no logró y comenzó a levantarse torpemente del suelo. Su nariz aun sangraba por el golpe que le di.

—Tienes buenos reflejos niño bonito— intenta burlarse el imbécil drogadicto.

—Y si me sigues diciendo niño bonito, te enseño que también tengo reflejos para volver a zanjarte otro golpe en la cara—suelto furioso.

Lo miré de arriba abajo. Solo llevaba una playera—que era fatal con el maldito frio que está haciendo aquí en Berlín—. También lleva unos vaqueros rotos en las rodillas y sus zapatos, se notaba a leguas que eran caros—a menos que se los haya robado a alguien.

Me di la vuelta con toda la intención de irme, hasta que volví a escucharlo.

—Oye, oye. No te vayas, te juro que no te molesto, pero no te vayas— dice a mis espaldas.

Volteo fastidiado, frunciendo el ceño.

—¿Qué es lo que quieres? — pregunto molesto—. Porque si sigues jodiendo te lanzo del puente y te aseguro que a los demás le importará una mierda si vives o no—solté.

Este día no puede irme peor, necesitaba un momento solo y aparece este idiota.

—Solo quiero hablar. Vi cuando se te salieron las lágrimas— se ríe y regreso a intentar golpearlo.

Pero esta vez me esquiva y sostiene mi mano jalándome hacia atrás volteándome al suelo, mientas el me sostiene de arriba, esta tan cerca que me da asco, huele a esa mierda de drogas.

—Eres bueno en los reflejos—aprieta más mi brazo a mi espalda. Logrando que suelte un quejido—. Pero no eres tan bueno peleando, de hecho. Porque lo que pasó hace rato, te aseguro que no pasaba. Deberías agradecer que seguía un poco mal, hasta que me diste el golpe en el rostro y me hiciste despertar en un segundo— me dice levantándose y tendiéndome la mano.

La cojo un poco anonadado, ¿los drogadictos saben pelear?

—Mi nombre es Jonathan. Jonathan Travis—hace una reverencia ridícula el muy payaso.

RULER Libro I  (+21)Where stories live. Discover now