❝Hace tiempo alguien me explicó la historia de un paraíso que se hallaba más allá del mar. Me preguntaba qué tan desdichado había de ser alguien para nacer en el infiero, qué tan egoístas habían de ser otros para abandonar a los demás a su suerte en...
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Levi's pov
año 849; Cuartel General del Cuerpo de Exploración
Esa risa. Esa maldita risa. Esa maldita y estúpida risa. Eran probablemente las carcajadas más molestas que había escuchado en la vida, y sabía perfectamente de donde provenían, de la idiota de Elodie.
Al parecer los reclutas se lo estaban pasando en grande en el patio exterior, pues las suyas no eran las únicas risas que se escuchaban. Eran las ocho de la jodida mañana ¿Quién mierdas les había dado permiso para ser tan ruidosos a esas horas?
Me había quedado dormido en la silla de mi escritorio, ¿cuánto habría dormido? ¿cuatro? No, puede que incluso cinco horas. Joder, los libros de Erwin tenían un gran potencial como somnífero. Aunque tal vez hubiera podido dormir más si ese rebaño de estúpidos no hubieran empezado a hacer ruido.
Salí de mi habitación para encontrarme, a no muchos metros de distancia de mi puerta, a Hanji quien miraba desde los ventanales del pasillo a este atajo de críos, junto a Petra que pese a estar allí de pie parecía estar profundamente dormida.
Supongo que ambas estaban aburridas, incluso desganadas, no había sido precisamente el mes más excitante de la legión de reconocimiento, al contrario, puro papeleo, era normal que ambas quisieran tomarse un descanso a la mínima.
— Eh — saludé — cuatro ojos ¿Qué hacen esos críos? — la nombre, ya que era la única que parecía medianamente despierta.
— Buenos días Levi, es un placer verte tan contento a estas horas — respondió esta sarcásticamente — Tal vez deberías aprender de ellos — añadió finalmente.
Mire por los ventanales, unos diez reclutas estaban sentados hablando entre ellos. Probablemente estaban planeando una salida, era un día libre, poco antes de una expedición, era normal que algunos reclutas se agruparan para salir y pasar tiempo con aquellos con los que mejor se llevaban, ya que los dias previos el entrenamiento era "opcional".
— Realmente tiene carisma ¿no crees? — comentó Hanji, quien también miraba por los ventanales como los reclutas parecían estar en el mejor momento de su vida. A saber que estaban tramando.
— Le hacen caso porque la mayoría son hombres — comente.
— Tampoco los vamos a castigar porque quererlo pasar bien ¿no? — dijo en parte corroborando lo que yo decía, para luego reírse.
Entre los reclutas rasos de la legión Elodie no pasaba desapercibida. No solo tenía una fuerza y habilidad que los demás seguramente envidiaban, era además buena en todo aquello que refería a lo social y seguramente a más de un recluta le parecía atractiva, por inverosímil que pareciera.
