Nueva vida

𝐂𝐚𝐫𝐭𝐚𝐬

Inmediatamente Aidan se puso de pie con bastante rapidez y se acercó a ella, los ojos de ambos se cristalizaron por completo, estaban viéndose frente a frente una vez más, la vida les había dado una segunda oportunidad de tener la vida que tanto quisieron vivir y que podían intentar en esta.

Con lágrimas en los ojos ambos se abrazaron con fuerza, ahí estaban los dos, unos pequeños niños aferrándose a esa nueva oportunidad, aférrandose a una nueva vida.

Después de unos cuantos segundos de silencio en aquel abrazo, Aidan de separó y tomó ambos hombros de la chica, la vio a los ojos y una sonrisa se dibujó en sus labios.

- Sigues igual de hermosa como recordaba.

Aquella frase logró sonrojar las pequeñas mejillas de ______, Aidan siempre lograba hacer eso.

- ¿Aún recuerdas todo?

Aidan asintió repetidas veces con una sonrisa.

- Lo recuerdo todo, como si hubiera sido ayer.

Ambos comenzaron a charlar un poco, reviviendo y contando cada anécdota que vivieron juntos en aquellos ocho meses en los cuales habían estado juntos en su vida pasada, momentos los cuales marcaron su vida, momentos memorables que eran imposibles de olvidar, Aidan contaba algunos chistes malos, ______ los escuchaba y volvía a reír como en los viejos tiempos. Con las manos agarradas contaban cada lindo recuerdo que aún hasta la fecha podían recordar.

- Aidan.

- ¿Sí?

- Yo puedo ver el hilo rojo de las personas, cuando me acerqué a ti, sentí una grande conexión, y ahora, nuestros hilos están juntos.

Aidan llevó ambas manos a su nuca y sonrió.

- Después de todo somos almas gemelas, ¿no?

- Sí. - asintió con emoción. - Hay otra cosa que necesito decirte.

- ¿Qué cosa?

- Fui con una especialista en estos temas de la reencarnación, almas, y esas cosas. Ella dijo que probablemente perdamos pronto nuestros recuerdos, además, aún somos niños y no podemos vivir juntos, se me ocurrió la idea de volvernos a reencontrar más adelante.

- ¿Y qué haremos? Si ambos perdemos nuestros recuerdos, ¿cómo nos reencontrarnos?

- Ya pensé en eso. Escribiremos en una hoja toda la información posible, nuestros recuerdos, nuestro propósito, todo lo que sea necesario, para cuando perdamos nuestros recuerdos podamos leer eso.

- ¡Buena idea! Así, aunque perdamos nuestros recuerdos, podremos escribir que somos almas gemelas, y cuando nos volvamos a reencontrar lo sepamos.

- Exacto. - sonrió.

Después de charlar otro rato, el sol comenzaba a ocultarse y ambos decidieron regresar a casa, no antes sin despedirse volviéndose a abrazar con lágrimas en los ojos.

- Prometo volver a encontrarte, la próxima vez que te vea comenzaré un plan de vida para nosotros. - exclamó Aidan con una sonrisa.

- ¿En qué consiste tu plan?

- Ya deberías saberlo, ¿No te dije que nos casaríamos y formaríamos una familia?

_______ sonrió y asintió. - La próxima vez que nos veamos pondremos nuestro plan de vivir una vida más justa en marcha.

Aidan asintió sonriendo y finalmente se retiró.

...

Timeskip
12 años después

______ recién había cumplido los 16 años, sus padres decidieron mudarse de vuelta a su antigua casa, la situación económica no era muy buena en ese momento para sus padres, por lo que no podían comprar una casa más cara.

Sus padres y ella entraron a la casa, la cual estaba amueblada. Su padre caminó al sofá y se echó a él mientras su madre bajaba todas las maletas.

- Mamá. - dijo ayudándola a bajar algunas maletas.

- ¿Sí?

- No entiendo que sigues haciendo con papá, no trabaja, no ayuda en nada en casa, solo se la pasa acostado.

- Cariño es mi esposo, debo aceptarlo tal y como es.

- Jamás vi una muestra de cariño por parte de papá, ya es hora de que lo dejes.

- Pero...

- Mamá, no lo amas, acéptalo.

- ¡Sí lo amo! - exclamó alzando la voz.

- Solo es un capricho tuyo, si sus hilos no están unidos y si no hay una muestra mínima de amor deberías dejarlo ir. ¿O qué te impide hacerlo?

- Cariño... quiero que sigas teniendo un padre. - susurra.

- ¿Él? Ni siquiera lo veo como un padre.

______ se retiró a la cual era su antigua habitación, comenzó a desempolvar algunos cajones y a colocar su ropa en ella. Al abrir el armario, una carta calló sobre ella, tomó dicha carta, abrió el sobre y comenzó a leerla.

...

¡Hola a mi yo del futuro! ¿Cómo estás? ¿Sigues sin reunirte de nuevo con Aidan? ¿Qué estás esperando? -.-

Bueno, creerás que estoy loca, seguramente perdiste los recuerdos de nuestra vida pasada, justo para eso hice esta carta.

¿Crees en la reencarnación? ¿No? Pues cree en ella, yo, o sea tú, estamos en nuestra siguiente vida, quiere decir que reencarnamos.

¿Quiénes éramos en nuestra vida pasada? Lucíamos exactamente igual y tenemos el mismo nombre que en nuestra vida pasada, ahí conocimos a Aidan en un hospital, Trinity nuestra mejor amiga también estaba hospitalizada ahí, así es como lo conocí a él. Aidan y yo solíamos charlar, contar chistes malos, escuchar música, bailar, ver las estrellas, ver el atardecer en la azotea, una vez fuimos a un campo de girasoles ¡Era hermoso!

Vivimos tantas aventuras a su lado, finalmente él falleció, sufrió mucho por esa enfermedad y no pudimos permanecer a su lado para siempre, aunque su alma siempre estaba junto a mi. Es por eso que hoy estamos aquí, buscándolo, buscando una mejor vida en la cual podamos reencontrarnos y podamos vivir juntos una vida plena, recuerda que él te prometió una nueva vida, y lo esta cumpliendo, no lo dejes hacer todo el trabajo.

Aidan y yo somos almas gemelas, yo puedo ver el hilo rojo de las personas, así que no te preocupes, cuando lo veas podrás sentir esa conexión con él y ver como nuestros hilos se unen.

¡Suerte con encontrarlo!

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