Eva Montgomery disfruta de una vida llena de colores y alegría. El ambiente en su trabajo es cálido y acogedor, aunque siempre habrá una chispa de drama alrededor. Una sonrisa es lo que nunca faltará en su rostro, junto con sus ojos brillantes que p...
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JAMIE HEUGHAN
Me sobresalto por el puertazo que Ian acaba de realizar y observo con extrañeza su rostro lleno de pánico.
–¿Qué sucede contigo?– pregunto y termino de guardar los documentos que estaba revisando.
–Eva Montgomery está aquí.
Me quedo en silencio procesando sus palabras.
He decidido no ir a trabajar porque necesitaba relajarme luego de la discusión que tuvimos. Era una testaruda y nada me haría cambiar de opinión con respecto al proyecto, pero en el momento que ella grito y mencionó a su padre todo cambió. Vi la mirada en sus ojos de pánico y me preguntaba que había sucedido, pero entendí que ella no se pondría de esa manera si no fuera porque de verdad era importante que no aceptara el proyecto.
Me encontraba hace un momento cancelando el proyecto y pagando la infracción por no cumplir con el contrato.
Gastando mucho dinero por una mujer. Genial, Jamie.
A pesar de eso, llegue a un acuerdo con respecto a Eva Montgomery.
No tendría más sexo con ella y estaba comprometido a cumplir mi palabra.
–¿Qué hace ella aquí?– decido preguntar luego de aclarar mis pensamientos.
–Al parecer es una de las encargadas del club.
Cierro mis ojos y recargo mi cabeza del asiento.
–Debemos bajarnos, los padres de los niños están presentes, no está bien que nos quedemos en el auto.
Suspiro y maldigo en voz baja. Termino asintiendo con mi cabeza y apago el auto. Prosigo a bajarme, comenzando a adentrarme hacia el parque. El lugar se encuentra un poco dañado y el bullicio se identifica cada vez más mientras nos acercamos a las gradas.
–Aguanta tú pene, Jamie. –murmura Ian cuando ingresamos.
–¿Por qué deb...?
Mis palabras son calladas al verla.
Podría jurar que mi corazón ahora mismo puede escucharse latir con fuerza y estoy seguro de que mi pene no podrá aguantarse demasiado.
Eva está vistiendo un pantalón deportivo que se ajusta a su trasero de una manera impresionante, junto con una camiseta de manga larga que hace resaltar sus pechos. Su cabello está amarrado y una gorra negra cubre sus ojos del sol. Ella luce preciosa de esa manera natural y mi mente me traiciona al imaginar su cuerpo de muchas maneras en este momento.
La imagen es aún más atractiva cuando ella sujeta la mano de Isabela y parece señalarle a una persona con su dedo. Me quedo expectante y llenando mis pupilas por ella. Sé me corta la respiración cuando ella comienza a caminar en nuestra dirección luego de dejar a Isabela con unas niñas. Su caminar me provoca un dolor de bolas porque ella mueve sus caderas de una manera fascinante y detonando una atmosfera intensa.
