Eva Montgomery disfruta de una vida llena de colores y alegría. El ambiente en su trabajo es cálido y acogedor, aunque siempre habrá una chispa de drama alrededor. Una sonrisa es lo que nunca faltará en su rostro, junto con sus ojos brillantes que p...
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EVA MONTGOMERY +18
El club.
Lugar dónde el sexo es tú acompañante. La pasión abunda en cada habitación, sientes la tensión sexual de cada persona. Mujeres luciendo trajes que muestran la silueta de sus cuerpos y hombres listos para cazar. Un mundo de lujuria y placer, pero específicamente con muchos juegos.
Demasiados.
Debes saber aguantar, tener paciencia, de lo contrario estarás jodido. El club no es para cualquiera y lo puedes notar al ingresar. Hombres con trajes y bebiendo alcohol mientras en sus dedos sostienen la famosa tarjeta. Esa que te permite disfrutar de cualquier placer que te muestran los juegos. Observo la mía en mis manos y de reojo veo a Jamie también sostener la de él. Tenemos tres oportunidades para disfrutar con otros, o...con nosotros mismos.
Acepto la copa de vino que me ofrece un mesero y la llevo a mis labios lentamente. Puedo visualizar a personas subiendo las escaleras en busca de sus juegos. Veo a otras cómo alzan sus tarjetas hacia ciertas personas y también cómo sus acompañantes pueden negarse a ofrecerlas.
Eso es lo divertido de aquí.
Jamie si es mi acompañante puede ofrecerme. Lo mismo puedo hacer si alguna mujer quiere estar con él.
Poniéndonos en un juego de celos y apuestas, ansiando ver quién ganará. Solo puedo pensar en que esto será peligroso cuando logro reconocer a Chrissy Harvet en una mesa rodeada de personas. Me tenso levemente, no demostrándoselo a Jamie, pero tampoco me mortifico con eso porque también reconozco el gran cuerpo de Jared McRae en el centro del lugar.
–Esto terminará o muy bien, o jodidamente mal. –dice con seriedad Jamie al darse cuenta de la presencia de los antes mencionados. Bebo lo que queda de vino en la copa y me detengo delante de él.
–Te tengo una advertencia o más bien con mis palabras estarás en apuros. –me acerco para que solo él pueda escucharme. Sus ojos me observan expectantes, pero sé que sus facciones cambiarán por mis palabras– Jared tiene razón. –frunce el ceño– Ambos somos necios y estaremos en un tira y jala por los meses que quedan de tú estadía en Manchester. Quedamos en que tendríamos solo sexo, pero esto no puede continuar.
–¿Qué...?
–No cuando tú me gustas. –él abre los ojos con asombro– Lo haces con toda tú actitud de mierda y tú, Jamie, no aceptarás que sientes lo mismo porque aún la herida de tú exnovia abandonándote en el altar está abierta. –se tensa– Se que te gusto, y no solo porque sea un bombón, sino porque tú no actúas de la manera en la que lo haces con una persona que no significa nada en tú vida. No estoy dispuesta a continuar y que mis sentimientos se intensifiquen. Tuve un corazón roto, no quiero otro.
