Los Cullen siempre fueron reservados y cuidadosos con las personas con la que ellos se involucraban, eso también cuenta con su familia, pero cuando una humana llamada Bella aparece en sus vidas Alice decide llamar a una conocida muy importante de Es...
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Me levanto por un ruido, no es la alarma, no es Jasper, no, es porque un llamado de mi nombre hace que abra los ojos y me encuentre con el cuerpo de mi pequeña hija sobre mí mientras que mueve sus manos por mi cabello desordenado.
— Mami — Me dice tan enérgica como siempre.
— Rach, cariño ¿Qué sucede? — Pregunto con mi voz ronca mientras que froto mis ojos intentando despertarme.
— Es navidad y santa dejó regalos, vamos — Ella se baja de la cama con su pijama de navidad que le dio mi padre.
— Espera que mami se levante — Le digo destapando mi cuerpo.
Yo me bajo dejando ver mi pijama que consta de una camisa de Jasper con un pantalón de cuadros largo, mis medias son blancas y llevo un moño mal hecho como peinado, por lo que no me interesa mi apariencia y tomo la mano de Rachel para luego correr por los pasillos de la casa, pero nos encontramos con Jasper saliendo del despacho, él nos dedica una sonrisa y se encuentra con su pijama que es una blusa negra que le queda al cuerpo y un pantalón de chándal, él se acerca a nosotras.
— Buenos días mis preciosas damas — Me deposita un hermoso beso en los labios para luego agacharse a Rachel y dejarle un beso en la frente.
— Papi vamos a ver los regalos de santa, ven — Ahora toma también la mano del padre y los tres bajamos juntos.
Ella es la primera en llegar a la sala donde toda nuestra familia Denali se encuentra, con Hunter, Rafa y Will, ellos nos miran sonrientes, pero Rachel corre directamente al árbol decorado por ella, debajo de este ve varios regalos.
— ¡Santa me trajo regalos, soy una niña buena! — Dice feliz sacándonos una sonrisa.
Con Jasper nos quedamos en el umbral de la puerta, él me abraza por detrás mientras que yo solamente acaricio sus manos que yacen sobre mi abdomen, nuevamente plano, ambos sonreímos mirando a nuestra pequeña abrir sus regalos, pero cuando iba a abrir el nuestro justo escuchamos la puerta.
— Jasper ¿Puedo pasar? — Escuchamos la voz de Embry del otro lado.
— Sí Embry — Digo yo.
Dicho esto, vemos como el lobo entra en la casa, él nos dedica unas sonrisas de modo de saludo deseándonos una feliz navidad, para luego sentarse al lado de Rachel con una sonrisa.
— ¿Te diste cuenta que la nieve se está endureciendo? — Le digo a mi esposo mientras que miramos por la ventana la nieve.
— Será mañana.
— Lo sé, pero aprovechemos hoy.
Rachel abre un paquete que le tendió Embry y al abrirlo se encuentra con un gorrito lindo, este es de color celeste con varios dibujitos blancos, son copitos de nieve, ella lo acepta con una sonrisa, ya tiene una colección de estos, creo que este es el número treinta o algo similar. Rachel se acerca a nosotros con una sonrisa desfilando su nuevo gorrito.
