Los Cullen siempre fueron reservados y cuidadosos con las personas con la que ellos se involucraban, eso también cuenta con su familia, pero cuando una humana llamada Bella aparece en sus vidas Alice decide llamar a una conocida muy importante de Es...
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Al día siguiente del accidente de Bella ambas nos encontramos en la cafetería del colegio hablando de una tarea que tenemos de literatura, debemos leer un libro de Julio Verne, un poco raro, pero me gusta, últimamente Bella pasa mucho tiempo con el joven Black que me hace sentir como comienza a intentar ser feliz, pero el recuerdo de Edward sigue tan vivo como ayer, al igual que el de Jasper, anoche me llegó una carta suya, pero no la abrí, la dejé con mi regalo.
Yo como mi hamburguesa mientras que hablamos hasta que un aroma familiar llega a mis fosas nasales, con mi mirada busco por toda la cafetería el lugar del que proviene y lo que menos me esperaba era verlo a él en la puerta con una sonrisa y vestido como un adolescente.
— Bella perdóname — Le digo dejando mis cosas sobre la mesa.
Me levanto sin problema y sin pensarlo dos veces me acerco a él para poder abrazarlo, su aroma familiar rodea mi cuerpo y aunque no ha calidez en su cuerpo siento como si la hubiera, todo el tiempo juntos viene a mi mente, esos recuerdos caminando por la acera de noche o cuando bailamos en mi cuarto hasta altas horas de la noche.
— Rafa ¿Qué haces aquí? — Le pregunto aferrándome a su cuerpo.
— Me enteré que necesitabas alguien con quien desahogarte y ¿Quién mejor que tu mejor amigo? — Comenta peinando un poco mi cabello.
— Que tierno ¿Viniste a cuidarme? ¿Mamá te mandó? — Niega.
— Fue Kate — Ambos soltamos una carcajada y nos separamos.
Yo miro a nuestro alrededor y noto como todos los alumnos nos miran confundidos, al parecer yo siempre seré la chica de Jasper, por lo menos frente a los habitantes de Forks, pero mi mirada se dirige a Bella que está con sus amigos, con una sonrisa guío a mi mejor amigo hasta mi mesa y se sienta a mi lado dejando la mochila sobre otra silla.
— Entonces ¿Tú y un Cullen? Eso diría que es nuevo, pero hace casi un año que no nos vemos y quisiera saber muchos detalles como ¿Cómo aguantas estar entre tantos adolescentes hormonados? — Pregunta mirando a todos los adolescentes que nos rodean.
— Lo olvidé tu don es ver los deseos de la gente.
— Exacto y la mitad de aquí solo quieren follar, los mandaremos a un colegio de monjas luego — Cuando dice eso yo me rio.
— Si tú llegas a pisar un convento o algo similar seguro se cae o se incendia, nos iremos al infierno después de todo.
— Pero los homosexuales somos aceptados en el cielo — Asiento, pero luego me apoyo sobre mis codos.
— Pero los inmortales no, recuerda que somos creación de satán — Bromeo y él se ríe.
— ¿Sabes que es lo que te diferencia de estos adolescentes? — Ahora él es quien se acerca a mí.
