DAMAGED [Adam Driver] |SEGUNDA PARTE|

XXX

LUCILLE
Radiografías, testigos, registros de estadías en el hospital, recetas médicas, miles de papeles con pruebas sólidas y especialistas forenses que comprobaron que un hombre de la complexión de Jared provocó todos y cada uno de los maltratos físicos reportados en cada informe, era un grupo grande de personas tras de mí que defenderían mi postura como víctima en este caso, a pesar de odiar el hecho de ser considerada una.

Si bien esto no era un juicio, el juez solo nos había citado a mí y a Jared para considerar si mi demanda por violencia doméstica y tentativa de asesinato podrían proceder y entonces él podría ser juzgado por esos cargos además de concederme el divorcio, Jared se encontraba a unos metros en la mesa de a lado, junto con todo su equipo de abogados.

El juez había salido de la sala hacía ya varios minutos, estaba revisando las pruebas en contra de Jared, yo no podía evitar sudar y sentirme casi desquiciada por la espera, cerré mis ojos de repente y traté de calmarme dando una profunda respiración y tratando de ignorar el hecho de que sentía las miradas de Jared y Adam sobre mi, juntas al mismo tiempo. Odiaba estar ahí, odiaba estar esperando, odiaba la incertidumbre y odiaba aquel vestido escotado que decidí que era correcto para la ocasión.

Gire lentamente mi cabeza, había demasiadas personas sentadas tras de mí, Adam por supuesto, Harry estaba casi escondido en un extremo, Vincent y demás conocidos que se hacían llamar mis amigos, el que hubiera tanta gente solo significaba que habría más espectadores viendo mi derrota contra Jared, quien seguramente ya había comprado al juez y a cualquier otra persona dentro de aquella sala.

Unos instantes después el juez entró a aquel lugar, la tensión casi se podía cortar con un cuchillo. Sabía que este momento marcaría mi vida de por vida, si los cargos se aplicaban hacia Jared entonces vendría una época difícil, audiencias, papeleo, estrés, toda una ruleta de sentimientos.

-Después de analizar detalladamente cada detalle de cada papel que se encuentra en este conjunto de evidencia he tomado una decisión- hizo una pausa, una pausa que quemaba mis entrañas. - Los cargos de violencia doméstica y tentativa de asesinato contra el ciudadano Jared Leto son imputables- un fuerte dolor en mi pecho se hizo presente, la sensación era horrible y casi imposible de aguantar, nauseas y mareo vinieron acompañados de aquella mala noticia.

- El divorcio entre los demandantes Jared Leto y Lucille Charlesstone será agendado durante los próximos días, si es que el señor Leto no decide contra demandar a la señorita Charlesstone por adulterio- casi pude sentir como mi boca se abría lentamente después de escuchar aquella noticia.

-¡Eso es basura!, ¡Aquí el único infiel es este animal con el que tuve la desdicha de casarme!- grité lo más fuerte que pude hacia el juez y también hacía Jared y su grupo de alimañas corruptas que se hacían llamar abogados.

-¿Que me dice del hecho de que usted está viviendo con otro hombre desde que se separó de mi cliente?- respondió uno de los abogados de Jared y mi mirada  se conectó con la de Adam casi de inmediato. En efecto, el juez había sido comprado, nunca vería a Jared pagar por lo que me había hecho. El juez salió de la sala sin más que decir, yo me levanté de mi lugar dispuesta a largarme pero mi abogado me detuvo y trato de darme algunas palabras de aliento, estaba confundido porque este era un caso relativamente sencillo, las pruebas hablaban por sí solas, de no ser por las influencias de Jared esto habría terminado rápido. Pero yo no escuchaba ninguna de sus palabras, no escuchaba nada de lo que pasaba a mi al rededor.

Caminé en dirección a la salida, esta vez Adam fue quien trató de detenerme y darme apoyo, no necesitaba nada de esto, en cuanto trató de abrazarme lo empujé y lo alejé de mi, todos presenciaron aquello pero en ese instante me importaba un carajo.

ADAM

-Lucille, ésta es la décima vez que te llamo ...por favor contesta, sólo quiero saber si estás bien - colgué la llamada y arrojé mi celular a mi cama, había llegado a casa y no había ninguna señal de ella, tenía la pequeña esperanza de encontrarla. La casa se sentía más vacía y más grande de lo que era sin ella aquí. Me mataba el no saber donde estaba.

Había oscurecido ya y yo había agotado mis opciones, había ido a todos los lugares en donde ella podría estar pero había fracasado en mi búsqueda. Decidido a dejar de buscarla pretendí prepararme para dormir y me coloqué la pijama, bajé después hasta la cocina y tomé la primera botella que encontré, me serví un poco y di un gran trago, mi mente seguía pensando en los posibles lugares en donde ella estaba, de pronto mi mirada se quedó fija y un lugar vino a mi mente, uno que no había pensado. Que idiota.

Tomé mis llaves y subí a mi auto, conduje a gran velocidad y casi sin cuidado, tal vez me salté algunos semáforos en rojo y estuve a punto de estrellarme contra varios autos, pero casi fue un milagro que llegara en una pieza a la oficina. Tuve que sobornar a los guardias para que me permitieran la entrada al edificio pero pude llegar hasta el elevador y subir a nuestro piso y ahí estaba ella, dentro de la oficina de Vincent, inconsciente en un rincón con una botella en la mano.

-No puede ser, despierta Lu, ¿Cuanto has bebido?- me tumbé en el piso junto a ella y la sostuve entre mis brazos, traté de despertarla mientras la sacudía desesperadamente.

-Suéltame Adam, apenas tomé unos tragos, solo debí quedarme dormida- dijo recobrando la conciencia y alejándose de mí para colocarse de pie, hice lo mismo tras ella, esperando que perdiera el equilibrio y poder ayudarla.

-Déjame llevarte a casa, es muy tarde, debemos dormir- dije y traté de tomarle la mano pero ella me seguía rechazando.

-"Debemos descansar" "Mañana tenemos que despertar temprano para el trabajo" ¿Para qué , Adam? Ya no encuentro sentido a seguir viniendo aquí, Jared controla y controlará mi vida y lo peor es que fui yo quien le dió el poder de hacerlo en cuanto me case con él, esto qué pasó sólo lo hizo para demostrarme que el que manda en mi vida es él y que nunca podré dejarlo a pesar de que no nos amamos, sólo quiere tener el control, quiere verme en la desdicha, me llamó hace unas horas... quería "arreglar las cosas" sólo para evitarme el martirio que sería para mí el intentar divorciarme de él, fueron sus propias palabras...de lo contrario si decido continuar va a contra demandar y tengo la seguridad de que será más fácil para él encerrarme solo por una supuesta infidelidad que no cometí- dijo y entonces rompió en llanto mientras se llevaba las manos a la cabeza en desesperación.

-Lo arreglaremos, buscaremos la forma, no importa lo que nos cueste, también podemos unirnos a su juego y comprar a quien sea necesario - me miró con una sonrisa de burla.

-Por favor Adam, deja de decir tonterías ... no te necesito, creo que puedo arreglar mis asuntos yo sola, no necesito a un hombre - hizo una pausa y nos quedamos en silencio. -¿Qué es lo que quieres, Adam? Me buscas como loco por toda la ciudad, me llamas infinitas veces porque estás preocupado por mi ...¿Para que? ¡Ya me encontraste! ¿Ahora que sigue? ¿Porque te importo tanto si yo no significo nada para ti? cada vez que te he dado la oportunidad sólo guardas silencio... exactamente como lo haces ahora, ¿ sabes? ya estoy harta de ti ...dime ¿¡Qué tengo que hacer para finalizar todo este jueguito y que desaparezcas de mi vida?!- preguntó casi en un grito, no pude seguir conteniéndome y grito de igual manera, enojado y cansado, lo cual sin duda la asustó.

-¡¿Podrías callarte y dejarme hablar?! ¡Te amo y te he amado desde el momento en que te conocí! Separarme de ti fue lo más doloroso que he experimentado en mi vida- cerré mis ojos aliviado a la vez que el sentimiento de que había cometido un error se apoderaba de mi mente.

[Te agradecería si pasarás por mi otra historia "BULLETPROOF" también con Adam Driver, amor, acción y mafia]