DAMAGED [Adam Driver] |SEGUNDA PARTE|

CAPITULO FINAL

ADAM

Una Lucille muy embarazada entró a la sala de juntas, su barriga ya era de un tamaño considerable, a pesar de tener las típicas molestias del embarazo como calor excesivo y los tobillos hinchados seguía luciendo impecable, usaba un vestido especial de embarazo y unas zapatillas bajas, se había negado a la idea de empezar su descanso por maternidad e insistió en poder asistir a esta importante junta.

A la mirada de los clientes, ella trataba de sonreír y saludar a todos con una gran sonrisa, pero yo sabía que algo la molestaba.

Me acerqué a saludarla, sólo un pequeño beso en la mejilla, aunque ya nos habíamos visto por la mañana antes de salir de casa.

-¿Está todo bien? - Ella suspiró y tocó la parte baja de su vientre.

-Es Lucy, no ha dejado de patear el día de hoy, esto está empezando a cansarme, no puedo esperar a que sea la próxima semana.- la doctora había comentado la fecha del parto, que tentativamente sería la semana próxima. Es por eso que insistía en que se quedara en casa para descansar.

La reunión empezó, graficas y papeleo por doquier, Lucille tuvo que tomar asiento para poder lidiar con todo ese trabajo y además con sus molestias.

El silencio se hizo presente en el lugar, cada quien estaba concentrado leyendo papeles y escribiendo notas, repentinamente , Lucille se dobló sobre su asiento e hizo una mueca mientras tomaba su barriga con ambas manos, algo que sólo yo noté, había sido el guardián de Lucille y su barriga durante sus casi nueve meses.

- No te preocupes cariño, todo está bien, son pequeñas contracciones totalmente normales,perdón por la interrupción- me dijo ella mientras trataba de volver a la normalidad.

Obviamente me alarmé, el parto esta próximo y la bebé puede nacer en cualquier momento, estás contracciones podían empeorar.

Mis sospechas fueron ciertas, al final de la reunión Lucille casi salió corriendo del lugar, la tomé fuertemente y la ayude a sostenerse mientras llegábamos al auto, estaba convencido de que esas "pequeñas contracciones" no significaban que el parto se acercaba, soltó un gran grito de dolor mientras trataba de ayudarla a subir al auto, rápidamente se sostuvo sobre mí y me dispuse a consolarla mientras acariciaba su espalda, aquel grito había sido desgarrador, no podía imaginarme el dolor que estaba sufriendo.

Como era de esperarse, en cuanto llegamos al hospital la internaron, ya era el día en que Lucy llegaría al mundo, entramos a la habitación que se había reservado con anticipación, ella apenas podía ponerse de pie y fue casi imposible ayudarla a cambiarse de ropa, sus gritos de dolor eran cada vez más difíciles de tolerar, en verdad me dolía verla sufrir. Los minutos pasaban y ella seguía con sus contracciones, cada una de ellas más dolorosa que la otra, podía notar cada músculo de su cara arrugarse violentamente tras cada contracción y se me partía el corazón, hasta el punto de llorar junto con ella.

-Ya no puedo, Adam... por favor haz que pare - dijo ella mientras tenía su cabeza recargada en mi hombro y me sostenía de la mano con fuerza. Se encontraba débil y cansada.
Su ginecóloga entró a la habitación e inspeccionó a Lucille y los latidos de la bebé, su expresión después de eso no fue muy alentadora.

-Lucille, se que estás sufriendo mucho, pero necesito que nos preparemos para entrar a quirófano...la bebé tiene que nacer ya y me preocupa la posición en la que viene- Lucille me miró preocupada, con una mirada que jamás había visto -Todo va a estar bien, cariño- le dije mientras le daba un beso en la mejilla.

Minutos después de que se la llevaran a quirófano fue mi turno para entrar, después de ponerme aquella ropa de hospital corrí hasta donde estaba Lucille, acostada con una cortina cubriendo la vista de su pecho para abajo, los doctores procederían en cualquier momento y yo sentía que mi corazón se detendría en cualquier momento.

-Cariño, tengo miedo - dijo ella mientras una lágrima recorría su mejilla.

-No te preocupes... todo saldrá bien, necesito que te mantengas positiva y pienses en el momento en que entraremos a nuestra nueva casa con nuestra bebé y en que seremos una familia ¿si?- asintió tratando de sonreír pero sus lágrimas seguían brotando. Nuestras miradas seguían conectadas durante parte del proceso, hasta que nuestras expresiones cambiaron al escuchar el llanto de nuestra bebé, no pude evitar emocionarme al igual que Lucille, quien lloró de felicidad mientras yo cargaba a nuestra bebé por primera vez y la acercaba a ella para que pudiera verla, sus ojos se iluminaron en cuanto vio a nuestra hija a gran detalle, segundos después una enfermera la tomó en sus brazos para hacerle un chequeo, sentí horrible en cuanto la separaron de mí pero Lucille seguía sonriente y con sus ojos llenos de lágrimas.

-Te amo, Adam- dijo ella en un susurro mientras me miraba y yo le sonreí, le respondí un "también te amo", sus ojos se clavaron en los míos y repentinamente se cerraron, al mismo tiempo en que el monitor de sus latidos entraba en crisis al igual que todos en aquel lugar.

Apenas pude reaccionar cuando ya tenía a dos enfermeras empujándome para que saliera, apenas pude echar un último vistazo, todo era un desastre y había demasiada sangre, pronto mis lágrimas dejarían de ser de felicidad y se convertirían en unas de dolor y preocupación. No sabía que estaba pasando y nadie me decía nada, no podía creer que estuviera pasando todo esto.

Una hora después, el doctor que se encargó de la cesárea salió del quirófano junto con una de las enfermeras que me hizo salir del lugar, trataba de predecir sus miradas pero me fue imposible.

-Señor Driver, me temo que no somos portadores de buenas noticias- en cuanto dijo eso supe a lo que se refería y todo mi mundo se vino abajo, sentí algo en mi pecho y en mi estómago que jamás había sentido, como si algo se hubiera roto dentro mío. -Hemos tratado de hacer todo lo que estaba en nuestras manos pero no tuvimos éxito, la señora Driver perdió mucha sangre y no pudo superarlo, lo sentimos demasiado- hizo una pausa y pasó saliva - La buena noticia es que la bebé está en perfectas condiciones- dijo pero yo me negaba a aceptarlo, todo lo que hice mientras él me explicaba lo qué pasó fue negar, negué con la cabeza, negué en mis adentros , mis lágrimas brotaron como nunca antes había pasado, esta vez sacando un grito de dolor que se escuchó en todo el hospital, aquellos doctores apenas sabían como consolarme cuando me tire al piso sobre mis rodillas mientras lloraba sin cesar y me tiraba del cabello, hasta terminar en una posición fetal.

...

AGOSTO

...

SEPTIEMBRE

...

OCTUBRE

En la radio que se encontraba dentro de aquella pequeña habitación rosa , se escuchaba la canción "Sweet Creature" de la nueva promesa musical Harry Styles, o así lo llamaban los medios de la farándula. Recuerdo que en una de sus entrevistas mencionó que había escrito esa canción en un momento de tristeza, cuando se enteró que una amiga cercana había muerto durante el parto y esa canción era fruto de sus sentimientos en ese momento, "Si estás escuchando esto, esta canción es para la pequeña Lucy", recordar aquel momento aún me pone sensible.

.

Adam se limpió una lágrima que había logrado escaparse y enseguida la regresó a donde estaba, al rededor de su pequeña Lucy, mientras se mecía lentamente en la mecedora y sostenía aquel biberón con el que la alimentaba.

"Sweet creature, sweet creature
When I run out of road, you bring me home"

FIN

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1. Infinitas gracias por el apoyo que le dan y le dieron a mi historia, gracias por tomarse el tiempo para leer, votar y comentar, pase un momento agradable leyendo sus comentarios.

2. Me esforcé por no llorar mientras escribía este final y una disculpa, desde el inicio de esta historia tuve en claro que no quería que terminara en un "felices para siempre".

3. Les agradecería si le dieran apoyo a mi nuevo proyecto que viene en camino "BULLETPROOF" también con Adam Driver, esta vez con una trama más de acción y romance. Espérenlo muy pronto, ya pueden encontrar la sinopsis en mi perfil.