III

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ADAM

Una semana había pasado, por fin regresaba a mi oficina fija, ya no estoy en condiciones para viajar por tanto tiempo y menos por negocios de último momento.


Lo más difícil no fue dormir en un lugar donde el horario cambia, o estar en una habitación de hotel que apenas puedo disfrutar por estar tan lleno de trabajo, si no el hecho de que no vi a Lu una semana entera.


Me había acostumbrado a verla llegar y caminar por los pasillos con su hermosa figura, sus prendas de diseñador, su gran porte y perfección, se que puede ser algo tonto, considerando el poco tiempo que llevamos trabajando juntos.



Llegué a la oficina algo cansado, apenas tenía fuerzas para el trabajo que sabía me esperaba en mi escritorio, ese día no me preocupe por lo que usaría, no escogí ningún traje en especial, tomé lo primero que encontré en mi guarda ropa.



Lucille camino de un lado a otro durante el día, se veía hermosa como siempre. Para mi parecía que todo lo hacía en cámara lenta. Esta vez me saludó sin una mueca en su rostro, me regaló una pequeña sonrisa desde su oficina, supongo es muy pronto para llevarnos un poco mejor.



Decidí que las cosas no se arreglarían entre los dos así como así, entonces quise ayudar un poco comprándole algo para comer y llevárselo a su oficina.

-¿Se puede?- dije después de tocar a su puerta que  como siempre, estaba abierta.


Ella se veía cansada y estresada en medio de las montañas de trabajo que tenía en su oficina, volteó a verme con esa mirada que hacía después de regalarle algo bonito cuando estábamos juntos.


-Muchas gracias... que lindo eres- pareció haber olvidados asuntos entre nosotros y tomó el sándwich, dándole una gran mordida, dejando atrás todo aquel glamour y perfección que demuestra ante todos, solo fue ella misma.



-Quería disculparme por todo lo qué pasó aquella noche con Lea, a veces no sabe controlarse- dije mientras me sentaba en la esquina de su escritorio.



Ella volvió a mirarme, pero esta vez río mientras seguía masticando su comida.


-¿En serio? ¿Ella, Adam? Creí que eras más listo- dijo y soltó una pequeña risa.



-¿En serio? ¿Jared? Creí que eras más lista- dije acompañándola como una risa también .



-Está bien, no puedo decir nada malo sobre ti, creo que los dos hemos tomado muchas decisiones y cambiamos en este tiempo, cualquier a que sea la razón por la que están juntos esta bien- fingió una sonrisa.



Iba a decir algo pero me detuve al verla cada vez más pálida y enferma, su mirada cambió por completo.


-¿Te sientes bien Lu? ¿Te puedo ayudar en algo?- pregunté mientras ella se ponía de pie y se dirigía a la puerta.



-Estoy bien, solo tengo un pequeño mareo, necesito ir al baño un segundo... y para ti soy la señorita Charlesstone, señora Leto o Lucille- caminó lentamente por el pasillo hasta llegar al sanitario.



Regrese a mi oficina, no fue una buena idea lo del sándwich.





Me senté tras el escritorio y minutos después vi a Lucille regresar a su oficina, no se veía muy bien, empecé a preocuparme por ella.




El trabajo no se acababa y yo contaba las horas para poder ir a casa a dormir, mis ojos apenas podían seguir abiertos.




Cuando la noche llegó, tomé mis cosas y caminé con rapidez hacia el elevador, suspiré y me desabotone la camisa un poco una vez que estuve dentro, incline mi cabeza hacia atrás y cerré los ojos, sin percatarme de que Lucille me acompañaba.


Seguía viéndose enferma, me preocupaba que pudiera desmayarse.


-¿Puedo llevarte a casa?- pregunté sin más.



-No gracias, tengo mi propio auto- parecía que algo le dolía, pero no podía notar que era exactamente.


Se llevó su mano al vientre mientras soltaba un sonido de dolor, me preocupe aun más, luego noté que un par de gotas de sangre estaban en el suelo, aquel líquido recorría sus piernas, manchando su ropa y zapatos.


-¡¿Segura que estás bien?! ¡Estás sangrando! - dije mientras la abrazaba y la sostenía entre mis brazos.



-Solo estoy teniendo otro aborto Adam... necesito ir al hospital- otro espasmo la hizo caer sobre sus rodillas.

DAMAGED [Adam Driver] |SEGUNDA PARTE|Where stories live. Discover now