Villa Parte 2
Ye Huairui nunca soñó que encontraría una habitación secreta en la nueva residencia a la que acababa de mudarse.
Era un espacio que ni siquiera existía en los planos arquitectónicos.
Por no hablar de la inmobiliaria, ni siquiera el equipo de renovación había sido capaz de descubrirlo.
El forense Ye tragó inconscientemente.
Sintió que su corazón latía más rápido.
Si una persona normal y corriente se encontrara con una situación así, ya habría cogido su teléfono móvil y marcado el 999, pidiendo a la policía que viniera a ocuparse del asunto.
Pero Ye Huairui tenía una extraña sensación: que había alguna "persona", o algún tipo de fuerza, que lo guiaba a esta sala secreta.
En cuanto vio la entrada de la cámara, el doctor Ye, que nunca había creído en fantasmas ni en dioses, sintió un escalofrío que le recorría la médula espinal: conmoción, miedo, curiosidad y una excitación incontrolable.
Respiró profundamente, luego encendió la linterna de su teléfono móvil y se agachó para entrar en la negrura de la puerta.
Detrás de la "puerta" había una escalera que conducía hacia abajo.
Ye Huairui bajó con cuidado mientras contaba el número de pasos.
Había trece escalones en total, lo que suponía la altura de un piso.
Después de los trece pasos, Ye Huairui estaba seguro de que sus pies habían aterrizado en un terreno llano, así que levantó su móvil y alumbró con su linterna.
El sótano no era muy grande, sólo unos diez metros cuadrados, y se podía ver el final de él de un vistazo.
Hay muy pocas cosas dentro.
Desde la posición actual de Ye Huairui, hay una cama plegable individual en la pared que da a la escalera, una mesa con cajones y una silla en la pared de su izquierda, y dos estanterías diversas, una alta y otra corta, en la pared de su derecha, con unas cuantas cajas de cartón corrugado apiladas junto a ellas.
Había una ventana por la que ventilaba aire cerca de la cabecera de la cama, y sobresalía del suelo, y no estaba claro si el cristal estaba roto o el marco de la ventana estaba deformado, y había agua de lluvia corriendo por la pared, manchando el papel pintado y el suelo cerca de allí con marcas de agua rezumante.
Ye Huairui: "!!"
De repente se dio cuenta de lo que había vivido antes en esta habitación secreta.
Por eso la policía había encontrado a Yin Jiaming en esta zona!
Por eso Yin Jiaming no se asustó cuando le dispararon y huyó a esta villa!
¡Este lugar era su escondite!
&&&& &&& &&&
Durante los cinco días siguientes, Ye Huairui limpió el modesto sótano por dentro y por fuera, completa y totalmente.
Encontró rastros de personas que habían vivido aquí.
El colchón había sido empapado por la lluvia, dejando al descubierto los muelles oxidados del interior.
Había unas cuantas prendas en la estantería de la habitación , y a juzgar por el material, el estilo y el nivel de deterioro, todas eran antiguas de la generación de su padre.
Ye Huairui los desdobló y los comparó con su propia talla, que era una más, lo que significaba que el otro hombre era alto y estaba en forma.
Sobre el escritorio había una lámpara de aceite, con el aceite ya seco, la tapa ennegrecida y pegada por el polvo.
Una pluma estilográfica, de alguna marca importada, había rodado por la esquina de la mesa, pero desgraciadamente el plumín se había caído de golpe y estaba inservible.
En la pared de enfrente de la mesa había un calendario anticuado, con letras rojas sobre fondo blanco, roto de página en página.
Aunque las páginas están enmohecidas y deterioradas, la letra sigue siendo clara, con la línea " 1982 Septiembre" en la parte superior y un brillante "18" en la parte inferior - es Yin Jiamin El día que le dispararon y cayó al mar.
En el cajón del escritorio había algunos periódicos, semanarios y revistas antiguas.
La fecha más temprana era el 22 de julio de 1982, el día después del asesinato, y la primera página tenía un informe sobre el robo de Golden City en letra grande, con un aviso de búsqueda tanto para Yin como para el conductor.
Algunas páginas del periódico todavía tenían marcas escritas y arañadas.
En el artículo semanal sobre el robo en el periódico, alguien había utilizado un bolígrafo para rayar con fuerza bajo el titular "Yin Jia Ming robó y mató a un hombre" con tal fuerza que atravesó el papel, con cinco caracteres chinos tradicionales escritos en letras de dragón al lado: "¡No soy el asesino! "
Viendo esto, Ye Huairui ya podía estar cien por ciento seguro de sus sospechas.
El que había vivido tranquilamente en este sótano secreto en aquel entonces no era otro que Yin Jia Ming, a quien la Policía de Ciudad Dorada había estado buscando durante dos meses.
El mecanismo de la habitación secreta era tan secreto que incluso después de que la policía registrara toda la casa, no pudo encontrar la puerta oculta y la entrada de la escalera escondida en la esquina del armario.
Aunque Ye Huairui no sabía cómo Yin Jiaming conocía la habitación secreta, era obvio que alguien le estaba ayudando.
La comida, el agua potable y los residuos domésticos que se dejaron en la habitación secreta eran demasiado pocos.
