Diversión

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Advertencia: Este capítulo contiene LIGERO lemon, sáltenlo hasta la señal si no quieren leerlo.

Desperté de golpe.

Había tenido un sueño un tanto extraño, no totalmente extraño, pero era inusual en mí. Miré mis piernas, temblaban un poco. No había sido exactamente una pesadilla, había soñado con Takashi de esa manera...

Juré que estaba sonrojada, pues el calor en mi cara era muy notorio. Él se removió en las sábanas, arrugado la cara porque me moví mucho al despertar.

"¿Estás bien?", su voz estaba ronca y muy adormilada, pasó un brazo por encima de mi cintura, lo que me hizo sonrojarme más al recordar el contenido de mi sueño.

"S-si, no pasa nada", traté de apartarme un poco, pero me tomó con fuerza.

"¿Qué hora es?", preguntó confundido, aún en un estado adormilado. Miré el reloj sobre su mesita de noche.

"Las tres de la mañana", tragué saliva. Él colocó su cabeza encima de mi pecho, por suerte era el lado donde no estaba mi tatuaje.

"Aún queda tiempo antes de ir a estudiar... Tu corazón late muy rápido", acarició mi cadera con cariño. Cuando lo noté dormido de nuevo, me aparté de él con cuidado y me senté en la cama y acomodé mi cabello.

Sentí como se movía en su cama, al no sentir mi calor, abrazó la almohada en mi lugar. Pasé mi mano por mi cara, se me había ido el sueño por completo, pero tocaría esperar hasta ir a mi casa para ir por mi uniforme y ducharme, ya que hoy es día de escuela.

Al pasar el tiempo, pasé a casa, al ser tan temprano mi madre estaba dormida aún, pero dejó una nota en la mesa junto con un dibujo de Akiko.

"Dejé tu almuerzo dentro del microondas, vas a tener que presentarme a tu pretendiente, Akiko lo ha dibujado muy guapo. Tu padre va a dejar a Akiko a la escuela, pero no te acostumbres, ayúdame a ir a dejarla. También empieza a empacar tus cosas, recuerda la mudanza".

Amaba las notitas que me dejaba, por alguna razón podía sentir sus emociones a través de su letra. Tomé el dibujo al lado y miré los trazos, al parecer yo no había sido la única buena en dibujar de la familia. Era Takami junto conmigo en el hospital, cuando fuimos ciertas veces a ver a Akiko. También me hizo gracia que mamá haya escrito con sus crayolas.

Le dije a Takashi que estaría bien sola, después nos veríamos en la escuela y él partió a la escuela dándome un corto beso, también mencionó que iría a una reunión privada de los capitanes.

Me sentía realmente enamorada.

Fui por mi almuerzo y lo guardé en mi mochila. Solo faltaba colocarme las medias y los zapatos para salir de casa, me senté en el sillón y comencé a ponerme las medias. Al ver detenidamente mis piernas, noté la cantidad de cicatrices que tenía, no me disgustaban, pero si tuviera la oportunidad de desaparecerlas lo haría.

También tenía el impacto de balín de la primera vez que conocí a los chicos y me intentaron asaltar. No era la primera vez que algo así me pasaba de todos modos, pero los rumores se expanden y llegan a reconocer quien pertenece a una pandilla y quien no. Acaricié cada cicatriz recordando su historia de trasfondo, me asqueé al recordar las cosas.

Sacudí mi cabeza y me puse las cosas rápido, me puse el bolso con rapidez pero olvidé de mi tatuaje casi nuevo y dolió un poco.

"Auch, soy imbécil", miré mi clavícula checando que todo estuviese bien, ya que mi piel estaba botando un poco de sangre.

Me surgió una idea al mezclar los tatuajes con cicatrices, pero eso sería para después.

Camino al colegio, vi muchas más personas caminando hacia sus trabajos, transportes públicos y demás. Iba a un paso normal, ya que iba temprano, pero un tanto nerviosa porque no sabía si mi tarea estaba bien, pero bueno, la vida sigue.

𝓛𝓪 𝓱𝓲𝓬𝓲𝓼𝓽𝓮 𝓫𝓻𝓲𝓵𝓵𝓪𝓻Where stories live. Discover now