𝐔𝐍 𝐅𝐈𝐍𝐀𝐋 𝐅𝐄𝐋𝐈𝐙 | ❝ A él le gusta ella, a ella le gusta él, todos los sabemos, excepto ellos. ❞
Sirius Black: Engreido, mujeriego, arrogante, testarudo, casanova, idiota... esas son solo algunas de las palabras con las que Sabrina describ...
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
" Yo solo tengo ojos para mi pequeña y adorable Donnie. ¿Te dije lo hermosa que estas? "
˚*✩•°˚*✩•°˚*✩•°˚*✩•°
EL PRIMER PARTIDO de Alex y Lucas como miembros oficiales del equipo de Quidditch de Hufflepuff estaba a la vuelta de la esquina y ambos chicos estaban verdaderamente nerviosos. Habían estado entrenando toda la semana sin respiro y Luke había ido a verlos todos los días sin protestar. Siempre se llevaba un libro bajo su brazo para leerlo mientras esperaba a que sus amigos acabaran con el entrenamiento. Sabrina, Sophie y Donn también iban, aunque ellas si se quejaban. Sabrina y Donn por tener que ir a verlos entrenando por horas bajo el brillantes sol que, a pesar de estar acabando el verano aún hacía suficiente calor como para derretirse bajo el sol. Y Sophie se quejaba cuando alguno de los chicos hacía algo mal. Sabrina descubrió que era muy fanatica del deporte.
Las tres chicas siempre se iban después del entrenamiento. Ni Alex, ni Lucas sabían a donde iban, pero Sabrina le había dicho a Luke que iban a estudiar junto a Lily y Severus.
—¿A donde vamos? —preguntó Alex, aún con el uniforme de quidditch, al ver como él y Lucas estaban tan entretenidos hablando de su entrenamiento y las cosas para mejorar que no se habían dado cuenta de que estaban caminando para cualquier lado, siguiendo a Luke. Lo que faltaba era que se perdieran.
—Tranquilo, estamos caminando hacía la biblioteca —le contestó el rubio, sin dejar de caminar, con su libro entre sus brazos, como si fuera un bebé.
—¿A la biblioteca? ¿Para qué? —Ahora fue Lucas quien preguntó.
—Les recuerdo que tenemos tarea que hacer para mañana, nosotros de pociones y por lo que escuche en cuarto año ya les han puesto un examén para dentro de unos días, así que tu también tienes que estudiar Lucas.
—¿Cómo te enteras de eso? —cuestionó Lucas asomprado al recordar que era cierto.
—Luke, en unas horas es nuestro primer partido, ¿Crees que me voy a preocupar por cosas tan irrelevantes como el estudio?
—¡Por supuesto que debes preocuparte! —exclamó el chico, frenando su paso para mirar al castaño con los ojos muy abiertos. Estaba indignado—. La educación tendría que ser una de tus prioridades, Alex. ¡Madre mía!
—Pues, hoy no está entre mis prioridades. Lo más importante de este día es ganar el partido, o al menos no humillarme frente a todo el colegio —le respondió Alex—. ¿Y si me caigo de la escoba? ¿Y si me rompó un hueso? ¿Y si todos se burlan de mi? O peor ¿Y si me hechan del equipo? No, no, no, eso no puede pasar. Deberíamos volver a la cancha a seguir entrenando, solo por si acaso.
La cara del chico era de horror puro.
—¿Estas loco? Estoy cansado, necesito un respiro —se quejó Lucas—. Además yo si quiero ir a la biblioteca, Donnie estará ahí.
