Joyas de Guerra ©

Capítulo 30

《Desconocido》

—Tengo la teoría de que aún no están tan conectados como creíamos.— Linder saca un frasco con un líquido de color negro.

—¿Qué le hace pensar eso?

—Para que ya estén conectados al cien por ciento y completen su última fase.

—¿Su última fase?— Walis se aferra más del lapicero que tiene en la mano — Imposible, su última fase es la Devil.

—Me prefiero a la fase de entrelazamiento.

—¿Cómo lo podemos comprobar?

—Necesitamos herir a cualquiera de los dos.

La palabra confiar, no está en mi corto diccionario.

—¿Y como lo haremos? Es muy difícil herir a cualquiera de los dos, rápidamente sanarían.

—No en este caso —Saco una jeringa e inyecta el líquido negro en ella —Este líquido se conoce como Z10, es un veneno muy fuerte, si una persona normal lo llega a ingerir morirá a los 5 segundos de haber tocado su garganta. Pero como Azael y Perséfone no son personas normales, solo quedarán en coma.

—¿Según tú, como piensas dárselos?

—En un par de horas tendrán una reunión con el ministro de Brasil, tenía pensado inyectar el líquido en un dardo, pero los reflejos de ambos son muy buenos y lo esquivarían con facilidad, aparte de que tienen unos sentidos muy desarrollados.

—¿Entonces?

—Le pedí ayuda a una de las amigas de Azael.

—¿Aleen?

—No, ella jamás aceptaría hacer eso, me refiero a Abigaíl. Desde hace días o semanas he tenido comunicación con ella para pasarle información.

—Abigaíl odia demasiado a Perséfone.— Responde en tono brusco Walis.

—Lo sé, ¿Por qué creen que la escogí a ella? Sin decírselo dos veces, acepto.

—¿Cómo piensa darle el líquido?— Pregunto más desconfiado que nada.

—Traslade el líquido a un perfume, solo es cuestión de que lo rocíe en la cara de Perséfone.

—Si tu plan falla, tú serás el culpable, Linder —amenazó.

—No tienen de que preocuparse, este plan funcionará.

|Perséfone|

En esta vida, uno ya no puede dormir bien. La mayoría ya se había ido a descansar, lo desagradable es que en ese mismo instante nos llegó un mensaje donde específicamente decía que en media hora nos estaría esperando el avión para viajar a brasil.

¡Brasil!

Él más enojado era Nix, el pobre se quejaba por las horas de sueño robadas, si seguimos así, vamos a parecer zombies y no de los buenos. Aproximadamente es un día de vuelo para llegar a Brasil, ¿lo peor? Tener que soportar los ronquidos de John, eso si es una verdadera tortura.