I am in Kuroinu? (Longchinchin)

62

En este momento, Alexander estaba en un sueño.

Estaba de pie en un lugar que desconocía completamente, pero que de alguna manera, sabía dónde estaba.

Y algo entusiasmado, por cierto, ya que siempre había querido visitar este lugar.

Él entonces, mirando la gran sala hermosa y congelada, a un nivel tan espléndido que era suficiente para robarse el alma de las personas con sólo mirar el lugar, se acostó en medio de aquella sala.

Si lo que creía estaba correcto, en este momento...

Alexander estaba en la sala Principal de la Secta de Phoenix de Hielo, en el Reino Canción de Nieve, un Reino Medio del Dominio de los Dioses...

Y para aquellos que no saben de qué se habla, en uno de los lugares que se muestran en la famosa novela ligera, Agains The Gods.

La mejor novela que Alexander alguna vez, había leído.

Ni siquiera estaba seguro de porqué se acostó en el suelo de la sala, ni siquiera sabía porqué estaba aquí, pero eso no importaba...

Su alma, estaba temblando de la emoción que sentía en este momento.

"¿Estará bien?"

"¡Claro que lo está¡ Una mujer debe aprovechar todas y cada una de las oportunidades que tiene."

Unas voces leves se sintieron y Alexander las escuchó.

Se emocionó bastante, ya que solo pensando en que de alguna forma, se podría tratar de Mu Xuanyin, una de las Waifus más queridas de la novela, una persona que no podía ser más Milf y más hermosa, también de unos pechos gigantes... era suficiente para elevar su Alma Otaku al cielo, y bajarla de nuevo.

Como sea, no sabía porqué pero estaba acostado, y seguía escuchando las voces...

"Pero... este método..."

"No tiene nada de malo, todavía existen muchas personas en este Mundo que se enamoran después del casamiento, así que no tiene que dudar."

Alexander realmente no tenía ni idea de qué se estaba hablando, o no entendía, pero igual, estas lejanas y claramente, suaves y familiares voces, seguían llegando a su oído sin si quiera, su permiso.

"Está bien, todavía es algo raro para mí, y algo demasiado repentino... pero aún así... nunca lo había sentido hasta ahora... y probablemente nunca lo sentiré por alguien más."

"Es verdad, recuerdo que en toda la vida que he estado junto a usted, nunca había visto su espíritu tan vivo como ahora."

De alguna forma, a pesar de que las voces se sentían extremadamente lejanas, Alexander podía escucharlas muy cerca de su oído, como un suspiro caliente de esos que Olga y cualquiera de sus Esposas le daba, después de su intimidad.

"Aunque el hecho de que... tenga más Esposas hasta ahora, y que incluso sean ellas..."

"Creo que no tiene que preocuparse por eso, no sé si se ha fijado, pero para alguien que tiene un Harem, a diferencia de aquellos que yo había visto antes en todo el Reino, donde por el más mínimo problema o diferencia se armaba una gran discusión, en este es completamente diferente... y el hecho de que sea así, especialmente con "ese" tipo de mujeres... demuestra lo brillante que es el Alma de este hombre."

"Suspiro, es verdad... una vez, hace mucho tiempo... confundí el Amor... con la admiración, y pues no me trajo nada que más que sólo malos y extraños sentimientos incómodos, así que nunca pensé que alguna vez yo iba a tener este tipo de cosa que había anhelado tanto..."

"No es sólo usted, todas las mujeres lo hacen..."

"¿Incluso tú? ¿Con lo sorprende confiable y madura que eres?"

Alexander no sabía que es lo que pasaba.

Pero estaba seguro de que estaba en un sueño, incluso en uno muy especial.

Ya que a diferencia de las veces que leía, en este momento estaba en uno de esos lugares donde un Otaku más quería estar, o visitar...

Y aunque las expectativas en su corazón eran muy altas...

Raramente, ahora mismo sólo trataba de entender a esas voces femeninas que escuchaba.

"Haaa, por supuesto, no soy tan vieja, ¡Por Dios! ¡Ni siquiera he tenido un hombre! ... Por eso, deberías apresurarte, y cumplir este tipo de íntimo deseo que puedo ver que usted tiene."

"Definitivamente, me guiaré por mi corazón... muchas gracias... yo realmente no se que sería sin ti..."

"No hable de eso, es mi honor y mi placer."

"Está bien... pero espera un momento... ahora que lo pienso..."

"¿Hmm? ¿Qué pasa?"

"¡Ya lo sé! Jejejeje, por cierto, ¿por qué estabas toda sonrojada cuando él te habló antes~?"

"¿D-d-d-d-de qu-qué hablas...?"

"Jujujujuju, esa reacción me lo dice todo... lo pensé ahora mismo pero, resulta que él no sólo me conquistó a mi, instantáneamente... sino que también a ti."

"..."

"Ajá, puedo ser muy tonta para algunas cosas, pero me di cuenta de eso, y bueno, yo... yo realmente desearía... que pudieras cumplir tu sueño al mismo tiempo que yo... y todavía sería mejor, si fuera con el mismo hombre..."

"... ¿Es... cierto?"

"... Eres como una madre para mí, también como mi Hermana Mayor... no hay forma de que no quiera lo mejor para ti también... y creo, sinceramente, que lo mereces más que yo..."

"..."

"..."

"Muchas gracias... realmente..."

"No es necesario, para nada, ahora sólo me preocupa algo..."

"?"

"Será qué... ¿será que él nos aceptara?"

Alexander estaba con los ojos cerrados, sintiendo en piso casi completamente de hielo en su espalda, pero para su sorpresa, en lugar de un frío incómodo...

Se sentía tan refrescante que le parecía simplemente genial.

Miraba, de vez en cuando, en el momento en que abría los ojos, el techo de la gran sala, para encontrar diferentes diseños de otro mundo, y extrañamente, como si fueran chinos, de su Mundo anterior.

Y pues claro que debería ser así, claro, ya que Agains The Gods remarcaba, un Universo completamente dedicado a la cultura china, como los Animes a la cultura japonesa.

Con su memoria fotográfica, recordaba línea por línea, de la novela, cuando se describían todo tipo de cosas que pasaban en el Reino Canción de Nieve.

Y lo más importante, no importa como, no podía descubrir a quién pertenecían esas voces, así que silenciosamente, sólo podía seguir escuchando.

"Oh, si es eso... ¡entonces no tiene que preocuparse! Ví muy bien con los ojos que la miraba a usted y a mí, su mirada me puso tan caliente..."

"¿V-verdad?"

"Ummm, se sentía muy rico... y sólo me estaba mirando..."

"... Sus palmaditas en mi cabeza se sentían tan bien..."

"..."

"... Como sea, entonces muchas gracias por tus consejos, y... ahora que somos nosotras dos, entonces, ¿seguimos con el mismo plan?"

"Si, por ahora sólo continuemos, más adelante encontraré... alguna forma de decirle lo que siento, por ahora sólo... concentrémonos en ti."

"Muchas gracias, y no tienes que preocuparte, si por casualidad... tengo éxito, también tu lo tendrás."

"Realmente, gracias por esta oportunidad, esto es algo que... es demasiado grande..."

"No, de ninguna forma, te lo mereces, completamente."

"..."

"Entonces... voy avanzando... tal vez cuando vuelva... ¡ya sea una adulta completa...!"

"Eso es, ¡esfuérzate mucho, y lucha por tu Amor! ¡Yo te apoyaré!"

Alexander sentía de alguna manera, que al sueño le quedaba poco, y entonces sólo se paró en el piso congelado, y miró hacia todas partes, para recordar el lugar, ya que... definitivamente, el visitaría este lugar en el futuro, sólo que en ese momento, sería en carne y hueso.

Se sacudió un poco las mejillas, y se palmó la ropa.

"Ummm, aquí voy."

"¡Que tenga mucha suerte, Maia-sama!"

Y entonces sólo esperó y esperó a que las voces terminaran de hablar, pero cuando se callaron repentinamente...

'¿Maia?'

Alexander se preguntó con un enorme shock, porqué fue que escuchó este nombre.

..........

Alexander poco a poco salió de su estado durmiente... y notó que todavía estaba en el baño del Castillo de Maia, en el agua caliente, y justo cuando se iba a poner a pensar en el sueño tan extraño que había tenido...

'¿Hmm?'

Sintió una suavidad muy, pero muy familiar, y a la misma vez tan diferente, que abrazaba su cuerpo, o la mayoría de él.

Entonces, abrió lentamente sus ojos.