128

141 7 0
                                    

*¡Truenos!*

De repente, los relámpagos empezaron a mostrarse de las calmadas y oscuras nubes, volviendo ruidoso el ambiente, y llamando la atención de cada ser vivo en el lugar.

*¡Groooooaaaarrrrrr!*

Un rugido estrepitoso y que resoplaba un sentimiento arcaico, se oyó cuando se pudo ver los matices de una figura parpadeante que descendía lentamente de las nubes...

En ese momento...

No importa quién, todos miraron con los ojos bien abiertos, como del cielo descendió una figura echa totalmente de rayos blancos que parecían sagrados...

No era algo 'enorme'... sino a lo sumo, 100 metros de una punta a la otra, mirándose desde abajo.

De lejos parecía un dragón sin alas, con varias otras características irreconocibles debido al eterno parpadeo de los rayos blancos...

Era, para los que veían algo así, una figura digna de ser el Rey de las Bestias Mágicas... incluso, decir que era su Dios, no se quedaba lejos...

*¡Groooooaaaarrrrrr!*

La enorme y aterradora figura, dejó escapar otro rugido extremadamente fuerte y electrizante de sus fauces, para luego seguir descendiendo en silencio hasta quedarse tranquilamente detrás de Alexander, que todavía tenía su mano alzada.

El deslumbramiento de los rayos hacían que la poca iluminación que había en el lugar, fuera desorientada y descontinuada con un enorme fervor....

Alexander, con una expresión plana, bajó la mano que tenía alzada suavemente con un gesto sencillo...

Su acción era naturalmente difícil de apreciar, por la visión normal de los seres humanos, además de los "otros" impedimentos, pero de alguna extraña manera, todos pudieron ver algo así...

Y como si fuera menos, exactamente a la imaginación que se esperaba ver en una visión tan irreal como esta...

La figura, como si tratase de responder una orden de alguien de mayor autoridad que ella... movió un poco su enorme cuerpo y sus ojos, que parecían pequeños soles azules, brillaron fríamente al ver en la dirección del gran ejército de Kuroinu...

..........

"Hmm..."

Vault abrió sus ojos poco a poco, mientras sentía el viento chocar con su rostro.

"Oh, ya despertaste."

Miró hacia el frente, y lo que vió, lo llenó completamente de vigor de nuevo.

"¡Bastardo! ¡¿Qué estás haciendo?! ¡Bájame ahora mismo!"

Vault se dió cuenta de que de alguna forma, estaba volando rápidamente, en este momento sobre lo que parecía ser una montaña, sin poder mover un solo músculo de su cuerpo, a excepción de su cabeza.

"Ya no falta mucho."

Delante, en el aire, se encontraba de espaldas a él, el susodicho sujeto que la Reina de los Elfos Oscuros había convocado.

"¡Bájame ahora mismo o sino me voy a follar a tu Esposa hasta que-...!"

Vault trató de apelar a uno de los puntos más dolorosos y molestos para el ego masculino, con una risa muy oscura y depravada en su rostro, pero...

No pudo continuar, ya que de pronto tampoco pudo mover la cabeza, o las facciones de su rostro...

"Sinceramente... no sé con exactitud, por qué es que el ejército de Kuroinu decidió armar una guerra tan... estúpida como esta, pero bueno, para este momento, no, de hecho, creo que nunca me ha interesado realmente."

El hombre parecía hablar consigo mismo.

"¡Mnh!"

Vault solo podía gemir directamente de su garganta con una expresión rebelde, al no poder ni siquiera hablar, y lentamente el terror lleno su rostro...

Era normal, temer a lo desconocido.

Era normal, temer a aquello que tiene una autoridad o poder más grande que tú.

Vault entonces recordó la escena que se dió antes de que se desmayara...

Esa bestia tan aterradora, al punto de que ni siquiera podía ser llamada una "bestia", en sí...

Vault recordó que fue un destello, lo último que vió antes de que la oscuridad absorbiera su mente.

En este momento, estaba volando a una alta velocidad, con su cuerpo quieto, pasando rápidamente diferentes mapas geográficos...

Si, el cerebro de Vault, abandonó todos sus regados pensamientos mientras se dió cuenta de su situación actual...

Su muy extraña situación actual.

"Es que... ¿hacer un imperio del Sexo, dónde todas las mujeres son esclavas sexuales? Eso es simplemente tan ridículo que no puedo decir mucho... haaa, realmente, saber que un Mundo como este, nace derivado de un Hentai así, es algo muy, pero muy preocupante... aunque bueno, es la realidad."

Vault, que estaba desesperado y aterrorizado hasta la médula para este momento, sólo pudo resignarse a escuchar la clara voz de el hombre en frente de él...

"Oh, ya llegamos."

...

Alexander notó el mar azul y resplandeciente después de que sobrevoló la gran montaña a una larga distancia debajo de su posición actual, y entonces descendió hasta la orilla.

Caminó un poco por la arena, controlando con Manifestación de la Mente/Energía a Vault para que estuviera a una pequeña distancia detrás de sí mismo.

Entonces, se paró allí por un momento.

"Lo único bueno, de todo este triste teatro, ha sido que he podido salvar a cada una de todas las Fortalezas, antes de que ocurriera el ataque, por lo que aunque no debería sentirme como me siento, no dejaré que me sofoque principalmente."

"También fue una sorpresa, que alguien pudiera sobrevivir a un ataque como ese, aunque a duras y extremas penas, pero supongo que eso es mejor. Ah, ahora que lo pienso, el ataque se concentró en el gran grupo que estaba detrás de ti en ese momento, así que es entendible que tan siquiera hubieses podido salir indemne."

Alexander se sentó en la arena mientras hablaba solo, retoricamente, con una sonrisa.

"Por fin, terminó."

El tomó un puñado de arena en su mano derecha.

"El mayor propósito para el que deseé venir a este Mundo, incluso siendo precipitado a niveles demasiado extremos, ya terminó."

Alexander alzó su vista al horizonte del mar azul frente a sus ojos, su mirada era suave.

"Se siente raro, aunque la vaga sensación de satisfacción todavía se aglomera... nunca pensé que una elección al azar, y terminaría dónde estoy ahora."

"Pero bueno... supongo que así sin las cosas, ahora, voy a terminarlo completamente."

Alexander dejó su monólogo y entonces miró hacia Vault, que todavía estaba sostenido en el aire, con lágrimas, mocos, y otros líquidos por todo su cuerpo, en un desastre desesperado, con el pánico presente en cada célula de su ser.

"¿Hmm? Oh, no, no no, no te debes atemorizar todavía, deberías guardar energía, ya que tu peor momento no ha llegado aún."

Alexander, ahora que había captado la mirada de Vault, lo miró con el Sharingan en la Etapa Eternal, y finalmente, metió a Vault en una ilusión, o en un Genjutsu.

"Entonces, te gusta violar, ¿no? Bueno, si es así, te gustará el lugar a donde vas, sólo que, bueno, no habrá chicas allí."

Alexander giró su cuerpo nuevamente en dirección al mar, y se recostó tranquilamente en la arena, con las manos detrás de su cabeza.

Así, pasó el tiempo.

...

En una cantidad desconocida de tiempo, aunque no parecía ser más de varias horas...

Alexander repetidamente se levantó de la arena.

"Limpiar."

Utilizó la Sub-habilidad más destacada de la limpieza sobre sí mismo, y miró hacia Vault, en el lado derecho a varios metros de distancia.

La visión, era grotesca.

Todavía el individuo llamado "Vault", estaba suspendido en el aire, pero...

Su cuerpo era tan diferente, mostraba un deterioro tan avanzado, y una expresión tan aterradora de miedo, que parecía hacer visto la cosa más espantosa y diabólica de este Mundo...

Lo que parecía ser sangre, chorreaba de todos lados de su cuerpo, en espacial, parecía caer una gran cantidad de la parte trasera de su entrepierna...

Aunque parecía más un fantasma del infierno que un ser humano, Alexander, que había fruncido un poco las cejas por tal espectáculo, sabía muy claramente que él estaba vivo.

Con la expresión todavía más plana, Alexander habló, "Técnica #17 de las Técnicas Prohibidas..."

El Sharingan en su ojo, cambió un poco ya que en lugar del fondo normalmente rojo que mostraba, se fue poniendo de gris.

"Inconcepto Amaterasu."

Un fuego gris, débil, y casi imperceptible se originó como una mecha en todo el cuerpo de Vault en el aire, y para el siguiente segundo...

Ya no había nada.

Explícitamente hablando, no había cenizas, no había rastros de alma, no había registros de existencia, nada...

Vault, desapareció completamente de la faz de el espacio, como si nunca hubiera habido "Vault", en primer lugar.

"Haaa."

Alexander suspiró, y entonces sacudió su cabeza para volver a volar en dirección a la Mansión Nothing.

Mientras volaba, una sonrisa liberadora y tranquila se dejó ver en su rostro sin máscara.

I am in Kuroinu? (Longchinchin)Where stories live. Discover now