Capítulo 14

183 35 230
                                    

Veo como Aria duerme a mi lado en la cama, ya está casi amaneciendo y apenas he podido pegar ojo, no puedo dejar de pensar en lo que me contó anoche, y conociéndola seguro que se ha dejado detalles sin mencionar, ha sido una historia muy resumida

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Veo como Aria duerme a mi lado en la cama, ya está casi amaneciendo y apenas he podido pegar ojo, no puedo dejar de pensar en lo que me contó anoche, y conociéndola seguro que se ha dejado detalles sin mencionar, ha sido una historia muy resumida.

No he tenido novia, nunca la he querido y obviamente no ha sido por falta de pretendientas, sino porque no es mi objetivo ahora mismo, no hasta que me largue de aquí, las chicas no se meterían en un barrio como este por alguien como yo y no puedo dejar el distrito 24 así como así, porque aquí está el negocio de la droga y salirse de él no es cosa fácil.

Y eso es algo que me preocupa constantemente porque, aunque tenga los recursos necesarios para poder irme de él, también tengo que conseguir salir de la vida que me ata a la droga y aquí solo sales de una manera.

Tampoco podría enamorarme nunca de alguna chica que viva en este barrio, aunque sería lo más fácil, pero no puedo hacerlo porque eso me ataría a él para siempre, y yo pretendo salir de aquí cuanto antes, porque las muchachas que conozco no quieren dejar esto, se han criado aquí y es lo único que conocen. Casi todas ya tienen hijos siendo más jóvenes que yo ofreciéndoles una vida de pobreza por falta de recursos y con unos padres con muy mal futuro, pero aquí es lo habitual.

Algo así no es lo que quiero para mis hermanas y mucho menos para mis hijos. Pero que nunca haya tenido novia no quiere decir que no sepa cómo tratar a una. Y desde luego no es como ese hijo de puta lo hizo con ella.

Aria es inocente, pura, alegre, divertida, cariñosa, con tiempo ella le hubiera dado todo sin tener que forzarla a ello. La conozco lo suficiente como para afirmarlo, porque es lo que hizo con nosotros, ella sola se ha abierto y nos ha dado su cariño y su confianza al igual que nosotros a ella, todo ha fluido con el tiempo y ha sido sano.

Nunca la obligaría hacer algo perjudicial para ella.

Y todavía me estoy pensando en dejarla quedarse aquí estos días que estará West con nosotros, pero también sé que es cabezota y si algo tiene en mente lo hace.

Vuelvo a mirarla, tiene la respiración acompasada porque está tranquila y tenerla aquí conmigo me hace estar tranquilo también. Ha día de hoy se ha vuelto para mi vida como una igual a mis hermanas, haría lo mismo que hago por ellas, cuidarla, mantenerla a salvo y...

—No has dormido ¿verdad? —me vuelvo hacia ella que se ha incorporado a la cama apoyando la espalda sobre el cabecero al igual que estoy yo.

—Me desvelé hace un rato.

—¿En qué piensas? —pregunta.

En ti.

En tu historia.

En nuestra historia.

—Pensaba en lo que nos toca vivir ahora, y en cómo vamos a llevarlo. Hay que decirles a las niñas. Hay que... —hago una pausa, no puedo pedirle que se haga pasar por mi novia, no después de lo que me ha contado.

Distrito 24Where stories live. Discover now