CAPÍTULO 5

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Mientras prácticamente corro a las empresas Styles, me recrimino a mi misma por llegar tarde. La niebla densa de la mañana le da a las calles un aspecto lúgubre. Pronto llego a la empresa y subo al ascensor tratando de no tardaré. Me hubiese gustado ir por las escaleras, sin embargo, hoy me siento sin ánimos ya que anoche no dormí bien. Todos los problemas que esta teniendo mamá con la casa me aturden, aún no tengo una solución. Es vergonzoso darme cuenta de que estoy hablando sola otra vez, y peor aún, el ascensor se abrió hace un rato. Cuando trato de salir, con mi vista fija en el suelo y lo que debe ser un notorio sonrojo, las puertas de este se cierran nuevamente en mi rostro.

El universo conspira en mi contra.

Resoplo de manera ruidosa sintiéndome impotente. Ahora debo esperar.

Para colmo, cuando llego a mi puesto de trabajo, me doy cuenta que el señor Styles ya se encuentra en su oficina. Antes de que pueda llegar a mi escritorio, el teléfono que comunica con presidencia comienza a sonar.
Al contestar, recibo un aviso del señor Styles con la petición urgente de que me presenté a su oficina.
¿Estará enojado porque llegué tarde?

Camino hasta la puerta de su oficina y siento mis manos congelarse antes de tocar. Acomodo mis lentes y muerdo mi labio inferior antes de cerrar fuertemente mis ojos y golpear bruscamente la puerta dos veces.
Escucho su voz desde adentro permitiéndome entrar.
Cuando abro la puerta y asomo mi cuerpo en ella, noto que el no se encuentra sólo en su oficina, también está el señor Desmond, mi antiguo jefe y otro hombre al que nunca he visto, sentado en uno de los sillones, rubio y de grandes ojos azules, con un rostro amable que inspira confianza a primera vista.

Por amor a Buda, ¿Sera esto tan grave?

Empiezo a dudar que todo esto sea por una simple llegada tarde.

--- Buenos días --- Susurro con voz casi imperceptible sintiéndome intimidada por la extraña situación.

---Buenos días, Aimie, es agradable volver a vernos --- Murmura el señor Desmond con tono fraternal con una sonrisa que hace que se formen pequeñas arrugas a los lados de sus ojos. También me siento feliz de verlo, pero solo me limito a sonreír y asentir creando un silencio tenso en el lugar --- Queríamos hablar contigo de un tema muy serio.

Esto está comenzando a volverse aterrador. Esa frase de "tenemos que hablar de algo muy serio" produce cierta predisposición a que algo malo sucederá. Es lo que siempre he pensado. Es lo que la vida me ha enseñado. Mamá siempre utilizaba esa frase antes de recriminar por algo.

--- Supongo que ya sabe sobre lo que sucedió con las empresas S.A.S --- Prosigue el señor Desmond Styles con gesto tranquilo. El hombre del portafolio permanece en la esquina de la oficina totalmente en silencio al igual que el señor Styles, quien parece indiferente a toda la situación --- El acuerdo ya no se firmará --- Culmina con una calma que parece fríamente calculada.

--- L-Lo sabia, señor --- Afirmo con voz temblorosa --- Se que era muy importante...

---Exactamente por eso. Ese acuerdo era la salvación de la empresa --- Inquiere. No logro comprender el signo de sus palabras. ¿Salvar la empresa? ¿Acaso las prosperas empresas Styles necesitarían ser salvadas? ¿Porque?. Decido esperar diciéndome a mi misma que las respuestas llegarán por si solas. Mi antiguo jefe se aclara la garganta antes de seguir --- Estábamos al borde de la quiebra. Ahora que S.A.S no va a firmar el acuerdo no tenemos capital para invertir --- Prosigue dejándome visiblemente impresionada. Nunca pasaría por mi cabeza que la empresa estuviera a punto de quebrar. El señor Desmond prosigue, pero parece que le costara mucho hablar --- Mi hermano va a dejar una herencia a Harry y con ello podremos sacar la empresa a flote ... --- El deja la frase inconclusa como si no supiera explicar lo siguiente. Permanezco mirándolo, ocultando mi expresión perpleja porque aún no entiendo porque me está diciendo todo esto.

CONTRATO MATRIMONIAL• |H.S| (Editando)Where stories live. Discover now