CONTRATO MATRIMONIAL• |H.S| (Editando)

FINAL

Ha pasado un poco más de un año desde que Harry dejó atrás su compromiso y vino aquí en medio de la noche.
Y a pesar del tiempo, aun me resulta increíble el giro que han dado las cosas en tan sólo meses.

La prensa empezó a especular  sobre el escándalo que produjo la ruptura de su compromiso con Elaine. Luego, se  esparcieron rumores sobre Harry Styles abandonando su compromiso por estar involucrado sentimentalmente con una madre soltera.

A ambos no nos costó demasiado ignorar los rumores hasta que apareció una nueva noticia y lo olvidaron por completo.

Sus visitas a casa se volvieron cada vez más frecuentes, así como sus noches permaneciendo aquí, ante la emoción desmedida de Edward, que insiste en que sea él quien lea para el por las noches, antes de dormir y tome asiento a su lado a la hora de tomar el desayuno. 
Celebramos su cumpleaños número cinco juntos. Obtuvimos una adorable fotografía padre e hijo, ambos con una sonrisa enorme, encantadora, con hoyuelos marcados. También obtuve miradas reprobatorias de mi madre esa noche, y luego un discurso de advertencia, en el que insistió en recordarme lo que sucedió hace ya cinco años atrás. Después de que todos se marcharon, Harry permaneció pensativo y taciturno, algo extraño en él. Se marchó poco después, murmurando una despedida cortante, por lo que supe que había escuchado mi conversación con mi madre. Esa fue la primera noche en semanas que pasó la noche en el apartamento en el que vivía después de marcharse de la mansión Styles.
A partir de un fin de semana después de ello, adoptamos la rutina de llevar a Edward juntos al parque. Ninguno de los dos mencionó nada respecto a lo sucedido en la fiesta de Ed y las cosas volvieron a la normalidad.

Ambos acompañamos a Ed a su primer día de escuela, unos meses después.
Las rutinas han seguido igual, así como los intentos de ambos de hacer un espacio en nuestro apretado horario para tener algo de tiempo juntos y escapar esporádicamente en las tardes a algún lugar tranquilo. Y es común que ambos nos digamos de vez en cuando que nos amamos, aunque eso parece ser un secreto a voces entre nosotros, así como las noches en las que permanece aquí y pasamos la noche juntos, para al día siguiente fingir que nada sucedió.
Por momentos, pienso –Y parece, según Cass – Que finalmente estamos haciendo el intento de conformar una familia.
Un intento tal vez, algo disfuncional, de formar un hogar para Edward.

Aún así, nuestra relación –Si es que tenemos una –, carece por completo de etiquetas o de convencionalismos que nos digan que somos algo, pero todo marcha tan bien que temo que cualquier intento de aclarar de que se trata todo esto solo lo arruine.

--- Estás muy distraída --- Habla Harry a mis espaldas, consiguiendo que me sobresalte.

--- Solo estaba pensando --- Susurro como respuesta. Acomodo mis lentes sobre el puente de mi nariz y sigo haciendo el intento de concentrarme en trabajar en el eslogan que me he propuesto terminar en mi computadora, sintiéndome agotada a pesar de haber dormido diez horas seguidas.
Harry permanece sentado en el sillón detrás de mi, en el silencio que suele haber en casa una vez Ed se queda dormido. Puedo sentir su mirada clavada en mi espalda, sin embargo no pronuncia una sola palabra hasta varios minutos después.

--- Deberíamos conseguir una casa más grande --- Comenta. Me giro en mi asiento para encararlo con el ceño fruncido, extrañada. El permanece mirando al frente, con gesto grave, como si estuviera hablando de negocios.

--- ¿Una casa más grande?  --- Murmuro, sin estar segura de haber oído bien.

Harry asiente.

--- Por supuesto.

--- ¿Por qué? ... Esta casa es acogedora. No hay motivo para querer una más grande ...