CAPÍTULO 8

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Ha pasado una semana de manera más rápida de la que hubiese deseado. Me encuentro en la casa del señor Styles en la que hay estilistas encargados de "arreglarme". Es un poco incómodo, pues nunca he tenido cosas como estas.
Los días posteriores a la fiesta de compromiso transcurrieron con cierta calma, aunque creo que con todo lo que sucedido, el concepto de calma ha cambiado mucho para mi. Al día siguiente de la fiesta, en las revistas de farándula, el señor Styles fue protagonista de las portadas de nuevo.
Esta vez, porque descubrieron que yo era su secretaria , y tal como lo temí, comenzaron rumores respecto a que yo no era el tipo de chica con la que el acostumbraba a salir.

"Esta parece ser una historia romántica muy parecida a la de la Cenicienta. ¡Y justo cuando pensamos que esto no sucedía en el mundo real! ... Así es, el guapo empresario, Harry Styles pronto llegará al altar, aunque aún no comprendemos como es que va a casarse con esta chica, hasta hace muy poco en el anonimato, cuando su relación con la modelo Nadine Leopold parecía estar en su mejor momento. He aquí la foto de la chica que ha logrado atrapar el corazón de este "rompecorazones", aunque parece desencajar totalmente con el prototipo de las chicas con las que Harry acostumbra a salir. ¿Sera que el matrimonio logrará cambiarlo?"

Es lo que leí en una parte de la revista. Creo que armaron más revuelo del necesario. Fue extremadamente vergonzoso ver una fotografía mía, supongo que fue tomada en la fiesta de compromiso, aunque no se en que momento.

Por otro lado, hoy me siento invariablemente nerviosa. Ha llegado el gran día, es el día en que me casaré. Todo esto se siente extraño.
Me encuentro sentada al lado de la ventana que da al jardín mientras varias personas trabajan en mi peinado. Hay muchas otras trabajando en ultimar detalles en la decoración del jardín,en donde tendrá lugar la boda.
Cierro mis ojos con fuerza creyendo que en cualquier momento despertaré de un extraño sueño.
Alguien pone rosas blancas en una de las esmeradamente decoradas mesas del jardín y otras personas se encargan de llevar bancas a cada lugar.

--- ¡Buenas tardes! --- Canturrea una voz conocida y escucho el sonido de una puerta cerrarse. Volteo y pronto, Mandy está frente a mi con una enorme sonrisa. Lleva un largo y pomposo vestido azul con una diadema de flores del mismo color. Mi madre, se encuentra de pie a su lado luciendo más bella que siempre con el cabello recogido y un vestido medianamente largo color ciruela.
Sonríe, pero sus ojso cristalizados denuncian que está conteniendo las lágrimas.

--- ¿Estas feliz? --- Cuestiona mi madre poco después cuando han empezado a ponerme maquillaje.
Sonrío y asiento medianamente avergonzada y trato de disimular mis nervios para tratar de verme feliz. Debería estar feliz si se supone que voy a casarme --- Estás preciosa, mi pequeña --- Susurra.

 Debería estar feliz si se supone que voy a casarme --- Estás preciosa, mi pequeña --- Susurra

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Mi madre me sonríe enternecida mientras una lágrima se desliza por su mejilla.
Suelta una risa nerviosa mientras se apresura a limpiar su rostro y empieza a abanicarse con sus manos.

CONTRATO MATRIMONIAL• |H.S| (Editando)Where stories live. Discover now