~ Capitulo 24 ~

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Teníamos todo preparado para la fiesta sorpresa de Grace, logramos hacerlo en la cancha del hospital de acogidos. Esperábamos a que trajeran a Grace, todos sus amigos del hospital estaban aquí.

Luego de un rato de todos esperar, pudimos ver a la hermosa festejada caminar por la puerta y sus ojos se brotaron en lágrimas cuando todos gritamos sorpresa.

La noche surgió divertida, los chicos se la pasaron muy bien y Grace no podía estar más feliz. Tuvimos que acabar la fiesta a las 10:00 PM porque los chicos no podían quedarse mucho tiempo levantados y como estaban tan emocionados, a algunos no les convenían, pero sobre todo, no sólo hicimos feliz a Grace, sino a cada uno de los chicos.

Kendrick y yo nos sentamos en el sofá, giramos este para que quede justo al frente de la gran pared en cristal, mirábamos la vista del hermoso centro de la ciudad y la torre Eiffel, junto disfrutábamos de una buena copa de vino.

— Hicimos bien, hoy— Dijo mirando perdido la ciudad.

— Me encantó, fue una experiencia increíble— comenté dándole un trago al dulce líquido tinto.

— Gracias— lo escuché decir y sus ojos brillantes se fijaron en los míos. Dentro de mi estómago se sintió un brinco, él es tan Hermoso.

— ¿Por qué?— Pregunté mientras removía mi copa, el sonrió.

— Por convencerme a ir— sentí como su áspera mano tomó la mía dándole caricias con el pulgar.

— No es nada— Dije y junto con eso le sonreí. — ¿Por qué se paró allí?— sin pensarlo, me mordí la lengua al escuchar lo que dije.

— Me recordó a mi hermano más pequeño— Apretó mi mano.

— ¿Por qué?.

— Por qué sufrió de Cancer en el cerebro— Dijo en voz un poco más apagada de lo que normalmente el habla.

— Oh Dios ¿Qué edad tenía?— Pregunté ahora yo agarrando su mano.

— Su lucha termino a los Díez años— su mirada volvió a la ciudad. Aquella sonrisa era amargada, mi corazón se ablando, me deje llevar de mi instinto y lo abrace, al sentir sus brazos acurrucarme, algo en mí se encendió haciéndome cerrar los ojos, él me hace sentir de esta manera en el cual quisiera quedarme para siempre.

— No te preocupes, ya hacen once años que está descansando y todos los hermanos ya lo superamos— Dijo intentando reír, pero se sentía un poco de dolor en aquella risa poca sincera.

Eso es uno de sus defectos, cuando tiene un sentimiento o cuando le pasa algo siempre intenta ocultarlo, por eso su frialdad casi todo el tiempo, quiere ser neutro para no mostrar ningún rasgo de emoción, al principio pensaba que era un bipolar, pero ya con el tiempo estando con él he aprendido mucho de su personalidad. Aveces estando conmigo, es como realmente es y ese es el que me encanta.

La noche continuó en copas de vinos y risas. Las cosas ya se iban de control, ya estaba roja del calor que me producía el tomar cierta cantidad de alcohol, así que me hice un moño algo alborotado.

— Eres tan hermosa— Comentó Kendrick mirando mi perfil, yo lo mire más roja de lo que estaba, el sonrió y con su mano jugó con mi moño como si fuera un botón, los dos estábamos medios ebrios.

Una ayudante para el sr. KendrickDonde viven las historias. Descúbrelo ahora