20. El padre

4.9K 328 35
                                    

Capítulo 21: El padre.

El padre de jasper es un hombre de unos cuarenta y cinco años de edad, alto y con alguno y que otro músculo que se marcaban a través de su camisa, era un hombre muy guapo en realidad. Mi mamá aprieta su mano en la madera de la puerta, sus nudillos se marcan de un color blanco.

-vine por lo de la ventana-dirige su mirada a la destrozada ventana detrás de mi-ya llame a alguien para que la arregle-informa. Su voz es tan fría, me recuerda de inmediato a jasper, de tal palo tal astilla.

-no era necesario-responde mi madre con cierto tono cortante.

-pues ya lo hice y vendrán... -levanta su muñeca dirigiendo una rápida mirada a su reloj-en unos quince minutos más.

Mi madre solo asiente, es como si estuviera impaciente de que el se vaya. El padre de jasper me da una mirada fría, de esas miradas incomodas, me nuevo rápidamente sin saber que hacer y simplemente camino a la puerta trasera saliendo al patio. Por primera vez en el día siento viento, es un viento tranquilo y casi imperceptible, pero me agrada ya que hay calor y necesitaba refrescarme.

Mi mirada se dirige a la pelota a unos escasos metros de mí. Camino a ella tomándola entre mis manos, sonrío recordando a jasper, sí hasta la pelota me recuerda a él, aunque fue su hermano menor quien tiro la pelota, aún así mis pensamientos vuelen a su nombre de inmediato.

-no sabía que se le podría tener afecto a una pelota-gimo levemente sobresaltandome.

Giro mi cabeza hacia atrás, ahí esta el, con su cabeza recostada en sus propios brazos mientras estos descansan en el quincho.

-es por que tu no sabes sobre tener afectos-respondo aventándole la pelota, cae aun lado de él, con la intención evidente de que no le llegase.

No responde. Sin previo aviso se sube arriba del quincho.

-¿qué... Haces?

-¿no es obvio?-pregunta saltando definitivamente abajo de éste.

No quito mi mirada de él, yo con todos mis royos encima no podría saltarlo así como el lo hizo. Una sonrisa de esas irresistibles se deslizan de sus labios, camina a mi, y yo ahí toda nerviosa, con cara de tonta, admirando cada paso que da.

-tu padre esta adentro-informo por las puras de acabar con mi incomodidad.

-ya lo sé-dice pasando una mano por su cabello, algunas mechas de su cabello están caídas levemente, lo hacen ver más atractivo así, algo desaliñado.

-ah-no se que más decir.

Su intensa mirada se queda en la mía por unos segundo, eso me coloca nerviosa, agacho la mirada, ruborizada. Abro la boca para hablar pero la vuelvo a cerrar sin saber que decir, se que el tiene muy claro que me coloca nerviosa, se me nota a leguas.

Levanto la mirada lentamente, y ahí esta la suya, directo a atrapar la mía, ese azul intenso, que hace que mi corazón se acelere, sin yo poder controlarlo, me sucede involuntariamente. Y me da tanta rabia, por que no me puede gustar de esta misma manera a alguien que algún día me llegue a querer, quizás de amar de verdad, aunque se que la gran parte de este "gustar" es mi culpa, siempre fui yo la obsesionada, fui yo la que me encantaba ver por horas y hora sin aburrirme sus fotos en facebook, yo la que creé un álbum con sus fotos, esas fotos donde salia sin camisa empapado de agua al lado de una piscina, álbum que él encontró aquella noche, siempre fui yo la que suspiraba por él.

«Corrección, suspira por él»

Respingo levemente cuando veo pesar su mano frente a mi.

-¿no has tomado tus medicamentos?, loca-por un momento frunzo el ceño sin entender, pero después esbozo una sonrisa rodando los ojos.

-deja de llamarme loca-murmuro quejosa.

-¿por que loca?-le lanzo una mirada de pocos amigos

-por que no y ya-digo cortante.

Él alza los hombros-no lo haré-lo dice con cierto desafío.

-¿y por qué?-pregunto de inmediato.

Se relame los labios-por que no y ya-dice asemejándose a lo dicho por mi anteriormente. Muerde su labio inferior-será nuestro sello personal para siempre.

Para siempre...

Trago grueso-¿para siempre?-pregunto, hablo de nuevo-digo... yo no me considero la loca aquí, pero tu si, hasta te puedes ir del país, o a recorrer el mundo-alzo los hombros.

Una parte de mi, ante ese pensamiento, se entristece, pero tengo que ser realista.

Su mirada no deja la mía. Hay un brillo diferente en sus ojos, su boca se abre para confundirme como siempre lo hace.

-¿y tú quieres dejar esto?-indica a nosotros dos-por que yo no.

Me congelo.

Con el corazón y el estomago hecho un revoltijo. respondo-no.-admito.

Por segunda vez noto ese brillo en su mirada, sonríe levemente.

-siento que... Dependo de esto-¿¡por qué lo dije!? Mi mirada cambia a una de arrepentimiento, vergüenza-yo... ¡no quise! Solo no, ¡argh!-le doy la espalda. Siento tanta vergüenza. ¿por qué siempre tengo que ser tan tonta? Siempre me voy de lengua.

Segundos después, asientos sus manos tomarme de por la espalda.

-eres diferente... Para mi-le costo trabajo decir aquello, aun así las mariposas no tardan en llegar a mi-es extraño-Me doy la vuelta quedando frente a frente.
Enfrento su mirada, por primera vez no hay arrogancia, o esa frialdad que lo caracteriza-solo quiero tenerte.

¿y después abandonarme? ¿ser una más? Las preguntas tormentosas llegan a mi mente de inmediato.

Ladeó la cabeza-osea es solo por sexo-muerdo mi labio inferior reteniendo el llanto, mis ojos no tardan en aguarse.

Lanzo una risita negando, doy un paso atrás acabando con nuestra cercanía-no sé por que tengo la estúpida esperanza de llegar aunque sea a gustarte-vuelvo a negar-estás tan mal, nunca vas a cambiar.

Parece arrepentido-no...

No lo dejo terminar-andate-pido.

Cuando no lo hace, yo camino devuelta adentro, al estar dentro de mi casa, veo algunos hombres colocando la ventana. Seco disimuladamente mis lágrimas, hacercándome a mi mamá, aun esta el papá de jasper.

Jasper...

Muevo la cabeza, tratando de desviar mis pensamientos de él. Mi mamá al notar mi presencia, voltea a mi.

¿tiene los ojos rojos?

Frunzo el ceño de inmediato.

-bueno susan me voy-dice él, no sabia por que pero, sentía la ironía en su voz cada vez que decía el nombre de mi mamá-adiós, cuidense-dice dirigiendo su mirada a mi, me coloco nerviosa, no se el por que, pero me daba desconfianza-¡ah!-voltea nuevamente a nosotros-ojala te vaya bien sara, en la nueva escuela, espero que este sea tu año, de saber todo.

Se voltea saliendo, frunzo el ceño. ¿de saber todo? ¿a que se refiere?

Ese hombre en solo unos segundos al igual que... Jasper, logró confundirme completamente.


Él es mi crush (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora