Beyond The Scene (Jikook, Yoonseok Y Namjin)

25. Noona consejera

[Jin]

Ya estábamos a finales de septiembre, y me sorprendía de lo rápido que había pasado el tiempo hasta ahora. Me gustaría decir que todos nos encontrábamos más unidos desde que nos habíamos mudado, pero mentiría si lo hiciera.

Hacía unas semanas que el ambiente en el comedor se sentía un poco pesado, pero no podía entender las razones de ello. Yoongi y Jungkook no habían tenido alguna otra pelea, y parecía que se ignoraban mutuamente, ya que Jungkook no había hecho ningún esfuerzo por molestar a Yoongi, y éste tampoco lo había provocado. Hoseok y Yoongi estaban aún más unidos que antes, como si comenzaran a quererse de verdad, y de vez en cuando se les veía actuar como una pareja, aunque al parecer aún no habían pasado de ser amigos. Con respecto a Jimin y Jungkook, había notado que se habían distanciado, aunque no entendía por qué, ya que Jimin siempre hacía el esfuerzo por hablar con el menor, pero él no parecía dispuesto a seguirle la corriente. Además, Jungkook y Tae se habían hecho más unidos y pasaban muchos de sus ratos juntos, casi inseparables, cosa que ponía triste a Jimin. Por nuestra parte, Namjoon y yo nos llevábamos bien, éramos muy buenos amigos y siempre era divertido salir de compras con él, ya que siempre me hacía reír; sin embargo, aún me intrigaba porqué me había defendido aquella vez si todavía no habíamos comenzado a ser tan cercanos como hasta ahora, y aun no se lo había preguntado, así que tenía mis dudas.

Esas dudas se esfumaron un día en que me estaba ayudando a hacer la comida para los chicos. Se le veía muy nervioso, así que le dije que yo podía hacerlo solo, pero me insistió. No sabía ni pelar una papa con cuidado, por lo que no supe qué podría ponerlo a hacer para que no rompiera nada o arruinara la cocina.

-¿Quieres que pique estas papas? -me preguntó con una sonrisa, como si hubiera tomado confianza de sí mismo para cocinar.

A mí no me daba demasiada confianza, pero no podía negarme si se le veía tan animado. Terminé cediendo, rezando para que, en el acto, no se cortara algún dedo o destruyera la tabla de picar.

Yo me encontraba haciendo la sopa a la que le agregaríamos las papas picadas, así que sólo estaba esperando a que él terminara su labor para poder proseguir con la mía. Estaba observando a Namjoon desde la estufa con los brazos cruzados, mientras él, con dificultad y las manos temblorosas, intentaba picar las papas con cuidado.

Se veía tan bien cuando se concentraba, ya que sus hombros se tensaban un poco y solía lamerse sus labios a cada rato, después de tragar saliva. Además, en ese momento, su figura inclinada sobre la barra, me parecía tan sensual, aunque nunca se lo admitiría. Daba igual que lo pensara, ya que él era hetero y no es como si yo, precisamente, fuera el tipo de persona que le gustara.

-¿Tienes problemas con eso? -le pregunté, aproximándome hacia él.

Vi que tragaba saliva, pero no parecía querer rendirse ante la situación.

-No, claro que no -murmuró, limpiándose el sudor de la frente con el torso de su mano.

-¿Necesitas ayuda? -cuestioné, parándome a su lado.

-¿Insinúas que no puedo hacerlo? -me preguntó mientras fruncía el ceño y me miraba.

Yo me reí ante su reacción, ya que, incluso, parecía indignado.

-¿Por qué no me dejas enseñarte cómo hacerlo? -le sugerí, sin dejar de sonreír.

Él resopló, asintiendo.

Yo me puse detrás suyo y tomé cada una de sus manos con la mías, para guiarlo. Sentí que temblaba un poco y que tenía las manos un poco sudadas, pero no comenté nada al respecto.