55. Noche perfecta

1.5K 169 95
                                    

[Yoongi]

Los Jung habían tenido que irse a una cena de navidad benéfica por parte de la línea de restaurantes que ellos dirigían. Sin embargo, Hoseok y yo habíamos decidido quedarnos en casa, ya que éste había dicho que la cabeza le dolía un poco y que no se sentía con demasiados ánimos de ir. Así que nos dejaron solos.

Yo estaba tocando el piano que los Jung me habían regalado hace años y que habían puesto en el salón para que lo tocara para ellos o para que lo tocara cuando yo quisiera. Hoseok estaba arriba, durmiendo. Como había dicho que no sentía muy bien, le canté un poco y, una vez que quedó dormido, bajé y me encontré con aquel piano.

No había podido evitar sentarme en el asiento que estaba frente a él y observar las teclas mientras pasaba mis dedos sobre ellas, pero sin presionarlas. Recuerdo que había pensado que aquello era más de lo que me merecía, pero ellos me lo habían dado de una manera tan amable que no había podido negarme, y aunque lo hubiera hecho, creo que lo habrían dejado ahí para mí, por si en algún momento estuviera listo para aceptarlo.

Solté un pequeño suspiro cuando se me vino la imagen de Hoseok junto a mí mientras le tocaba una melodía, y su rostro maravillado por los rápidos movimientos de mis dedos. En ese tiempo, siempre me decía que le enseñara, aunque yo jamás lo había hecho. En realidad, no es que no hubiera querido hacerlo, pero pensaba en que, si él aprendía a tocarlo, ya no se sentaría a mi lado a escucharme y ya no me necesitaría para ello.

Esos eran mis pensamientos egoístas, pensamientos que seguía teniendo de vez en cuando y que muchas veces me sorprendía tanto de tener. Era increíble, porque antes no me habría detenido a pensar en que Hoseok se relacionara con otras personas o que se acercara a los demás como lo hacía conmigo, y ahora ni siquiera podía pensar en el hecho de que mirara a nadie más o me sentía extraño, con una sensación para nada agradable. Tal vez era que, quizás, lo amaba en verdad y sólo quería que fuera mío. Todavía no lograba entender lo que sentía por él por completo, pero sabía que era real y que jamás me había sentido de esta manera con alguien, así que decidí llamarlo amor.

Seguí pasando las yemas de mis dedos por las teclas, hasta que recordé la canción que estaba tocando la primera vez que vi a Hoseok. Él era un niño muy tierno y su actitud me había sorprendido un poco, porque nunca había conocido a alguien como él. Además, era extraña la manera en la que se emocionaba con todo y sus miedos irracionales por casi cualquier cosa. Y ahora... ahora había crecido tanto; se estaba convirtiendo en todo un hombre, lo cual se veía reflejado en los músculos cada vez más tensos sobre sus brazos, sus piernas y su abdomen, y en su rostro, pues se estaba volviendo tan malditamente guapo a medida que el tiempo pasaba más y más.

Había veces en que me miraba en el espejo y no sentía que mi rostro estuviera madurando demasiado. Además de que yo no tenía un buen cuerpo como Hoseok, ni siquiera me empeñaba en tenerlo. Normalmente, no me solía hacer este tipo de preguntas, pero no entendía cómo es que le gustaba alguien como yo. Yo no era un buen bailarín y mi voz no servía para el canto; tampoco actuaba tan bien y tenía un temperamento de la mierda, para nada comparado a él. Entonces, ¿cómo es que una criatura tan perfecta como Hoseok podría querer a alguien tan imperfecto como yo?

Sin dejar de pensar en ello, comencé a tocar aquella melodía con delicadeza, como si temiera romper las teclas si las presionaba con más fuerza. Mis dedos viajaron de una tecla a otra, haciendo esa música que tanto me relajaba, provocándome aquella sensación tan placentera de satisfacción, sintiéndome completo. Dejé de tocar cuando sentí aquello y me percaté de que sentía eso mismo por Hoseok, pero con un poco más de fuerza, cosa que me hizo sonreír.

En ese momento sentí que unos brazos rodeaban mi cuello, y de inmediato supe que era él.

—Me encanta cuando tocas de esa forma —susurró sobre mi oreja, provocándome un pequeño escalofrío.

Beyond The Scene (Jikook, Yoonseok Y Namjin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora