Melody y Modesty, Contra el mundo de fantasía.

Capítulo 10.- Por Tim...

El llanto constante me parte el corazón, mi hijo Tim, llora amargamente en su habitación.

No es un llanto de tristeza, es de dolor.

Quiero entrar a su cuarto, y llevar su dolor lejos de él, pero soy tan inútil.

Quisiera llevarlo al médico, pero para nosotros los noga, es prácticamente imposible, si bien el servicio médico en el reino de Astlan, es subsidiado por el gobierno, al punto de que solo debes pagar una pequeña fracción del precio real... pero, eso solo aplica para las personas del reino y nosotros no somos personas.

Podemos ir a un hospital pero... no tendremos el descuento, tendríamos que pagar el precio completo y como no somos personas, no hay forma alguna de que podríamos conseguir ese dinero.

Cuando el gobierno no te considera persona, no tienes derechos. No podemos tener propiedades o trabajar en algún puesto regulado por el gobierno, directa o indirectamente, esto incluye pertenecer a la nómina de cualquier negocio.

Si quieres darle de comer a tu familia solo te queda trabajos mal pagados y de una sola ocasión.

Pero no hay nada que podamos hacer, después de todo, no tenemos un primogénito. Algunos estudiosos dicen que nunca los tuvimos y eso prueba que somos odiados por el creador, otros afirman que en un comienzo teníamos uno, pero fracasamos al protegerlo y terminó por extinguirse, pero en cualquiera de las dos opciones todas terminan igual, nosotros sufrimos.

-o-

Hoy, caminando por el mercado, me encontré con un hombre, era un Varea, ya sabes esos tipos altos, que incluso sus niños más pequeños alcanza el metro setenta, de piel pálida, y siempre con un vello facial demasiado exagerado para mí gusto.

Ese en particular tenía una barba muy lustrosa que llegaba a sus rodillas, la cual al igual que su larga melena que era solo ligeramente más corta que su barba era de color negra. Él debería medir cerca de los dos metros y medio, un chaparro entre los suyos.

Levantaba un letrero de tela en el cual buscaba alguien para cazar un sorprema, una bestia horriblemente peligrosa, pero muy valiosa, una sola podría valer unos cientos de miles de Lins.

En un primer momento solo pude concentrarme en escapar de mi dolor, el ver la solicitud de ese sujeto provoco que me acordara de Tim, después de todo, estos trabajos eran su especialidad.

Como dije, los naga no podemos tener un trabajo estable, por eso mi hijo, empezó a trabajar de cazador por contrato. Normalmente las caserías son dejadas para el ejército o algunas agencias de casería privadas, pero hay ocasiones en las que el objetivo y las condiciones del cliente son tan malas que ninguna agencia acepta sus peticiones, y es ahí cuando buscas a los malnacidos, que según el gobierno no deberían existir, la paga en relación con el riesgo es una mierda, pero es de los mejores trabajos que puedes conseguir.

El hombre me tomo del hombro cuando pase frente a él.

"Fa, no le interesaría ganar 200,000 Lins."

Planeaba ignorarlo pero al oír la cantidad mi corazón retumbo. Con esa cantidad, tal vez yo...

"Entonces... pero, los sorprema son muy escurridizos, no va decirme que sabe dónde encontrarlo, no tengo la intención de vagar por meses en el bosque."

Estuve a punto de aceptar de golpe, pero no debo, una de las razones por las que son tan valiosos es que siempre viven solos y pasan su existencia escondidos, es casi imposible encontrar uno.

"Oh, de eso no se preocupe, encontramos a un viejo anciano cerca de la Comarca de oriente, no debería ser muy difícil cazarlo."

Oh, así que era eso.