Melody y Modesty, Contra el mundo de fantasía.

Capítulo 22.- Los héroes llegan al último...

Frente a nosotros estaba una bestia con ojos iracundos, su mirada me penetraba hasta lo más interno de mi ser y el miedo más instintivo se despertaba. Quería correr lejos, escapar y no voltear a atrás, pero muy dentro de mi sabia, que no había forma en que pudiera escapar.

"El tasmonio, descuida Melody, me encargare de él."

Ela pronuncio aquellas palabras, mientras mantenía cierta confianza, a diferencia de Modesty o yo, ella no parecía sorprendida, era como si ya lo esperara. Con un paso firme, Ela camino contra la bestia, quien empezó a gruñir y mostrar sus colmillos, el intenso resplandor escarlata que se filtraba entre sus dientes se intensifico.

Ela apretó la piedra que traía en su mano, y esta lentamente comenzó a cuartearse, empezando a liberar su energía novial cubriendo la esfera.

El aire se tensó, nadie hacia nada. Los segundos se extendían hasta parecer horas, pero todo cambio cuando la esfera empezó a liberar pequeños destellos violetas, y una extraña estática apareció.

Ela sin pensarlo mucho levanto la piedra y la lanzo contra la bestia, esta soltó un rugido agudo y salto contra la piedra, no estoy del todo seguro de que sucedió, ya que de golpe un enorme destello blanco cubrió mi vista, y cuando por fin comenzaba a aclarase, el sonido de un relámpago me aturdió, jamás en mi vida había escuchado algo tan aterrador.

No podía ver con claridad, y lo único que escuchaba era un zumbido, a medida que el tiempo pasaba, mi corazón se agitaba más, mis manos sudaban, el sudor de un ser humano es de 1825 litros al año, me pregunto si el de las sireins será similar...

¡Calma! Estoy aterrado, no lo niego, solo desearía estar en mi casa, pero no es momento de distraerme, no puedo darme ese lujo.

Mis sentidos volvieron poco a poco. Por fin pude apreciar lo que había sucedido, un pequeño círculo del pasto estaba carbonizado y sobre él, el tasmonio se encontraba tirado, inerte.

"Funciono..."

Un leve susurro de Ela, me hizo centrar mi vista en ella. Caminaba lentamente directo hacia la bestia, pero justo cuando estaba por llegar, el tasmonio se levantó y soltó un fuerte alarido.

Su pelaje negruzco estaba quemado, y en sus infernales ojos se veía el dolor y la ira.

Como si de un dragón se tratara, un aullido se convirtió en una llamarada, Ela cubrió su cara con sus manos, mientras saltaba hacia atrás, pero no fue suficiente y parte de sus antebrazos terminaron ligeramente quemados.

El tasmonio no espero un segundo y corrió contra Ela, con la boca abierta mostrando su poderosa mandíbula, Ela no grito, no lloro, no corrió, solo se le quedo viendo, resignada a su final, yo quería correr, mover mis piernas y salvarla pero el miedo no me lo permitía.

Pero antes de que llegara, una mano tomo a Ela por el cuello de su vestido y la arrastro lejos del ataque, rumbo al bosque.

"[¿Por qué tardaste tanto enana idiota?]"

Grite fuertemente, ante la galante figura de mi hermana gemela, quien sonreía felizmente.

"[Los Héroes siempre llegan al último.]"

Respondió sin dejar de observar a la bestia.

El tasmonio, giro y levanto su columna mientras que el brillo de sus ojos se intensifico, conocía esa pose de hace un segundo, la bestia quería incinerarlas.

"¡Cuidado, va lanzar su llama!"

Ante mi advertencia, siguió arrastrando a la aturdida Ela atrás de un árbol, el tasmonio al ver esto, alzo la mirada y dirigió el fuego al cielo, para al terminar, correr en dirección a las niñas. Modesty y Ela corrieron pero eran mucho más lentas que su atacante y eventualmente el tasmonio se abalanzó sobre Ela, saltando desde la copa de un árbol, al cual trepo con destreza. Modesty tropezó al sentir el peso extra, la bestia mordió el brazo derecho de Ela, y ella grito atormentada.