Melody y Modesty, Contra el mundo de fantasía.

Capítulo 17.- Llanto de media noche.

Una de las peores cosas que eh sufrido desde que renací en este mundo es el hecho de que no tengo la certeza de que puede o no ser real.

Antes de que todo esto sucediera estaba completamente seguro que algo como los fantasmas no existían, pero ahora al ver a personas aventando bolas de fuego, no puedo asegurarlo.

¿Qué, porque digo todo esto?

Bueno, resulta que desde hace un par de semanas, desde que volvimos del coliseo, algo extraño a estado sucediendo en mi casa. Cada noche, justo cuando todas las luces están apagadas, un suave pero constante llanto comienza a resonar a través de las paredes de adobe.

Son pequeños sollozos, pero puedo decirles que cada pequeño gemido esta cargado de una profunda tristeza.

En un principio solo me tapaba con el escudo máximo, mi cobija, y lo ignoraba, pero eventualmente se están volviendo cada vez más fuertes y más doloroso de escuchar incluso en una ocasión me pareció escuchar "Por Melody..." entre los llantos.

Fue por ello que decidí ir a buscar de dónde venían los llantos, en cuanto empezaron me levante, pero gracias a la estructura de la casa llena de eco, me fue imposible decir de dónde venían, fui a todas las habitaciones de la casa, pero yo era la única despierta.

Cuando intente decirles a mis padres ellos me dijeron que solo era mi imaginación, pero en la noche a solas en su cuarto, los escuche platicar. Aparentemente el tema les preocupaba seriamente incluso plantearon la opción de llamar al sacerdote Noa.

Para aquel momento aún me negaba a creer que era cierto, mi lado lógico de mi antiguo mundo se negaba a aceptar la existencia de seres del mas allá.

Para este momento Ela, había comenzado a visitar nuestra casa constantemente, prácticamente cada tercer día, saliendo de la academia pasaba a nuestra casa para jugar un rato

Tengo que admitir que estar con ella me hacía olvidarme de los llantos pero, solo era momentáneo y mientras más tiempo pasaba, más miedo se fundía en mi mente.

Buscando algo de tranquilidad pensé en preguntarle a Ela, si es que los fantasmas existían, si era la lógica Ela que casi me mata por mencionar que los auris eran magia, seguro me podría dar una respuesta que calmara mi torturada mente, lamentablemente, me equivoque.

Cuando le pregunte puso una cara muy seria y se puso a pensar, y su contestación fue un simple "No estoy segura.", Al día siguiente vino con un libro grueso que se titulaba historias de obeliscos del reino de Astlan.

Cuando lo abrió comenzó a explicar algo acerca de cómo la energía novial combinada con emociones negativas y una gran concentración de estas podían generar uno de los tres misterios de la energía novial, los obeliscos, los cuales se representaban como construcciones gigantescas que provocaban caos en los alrededores, y entre ese caos los fantasmas era una de sus primeras señales.

Seres creados de energía novial y emociones negativas, almas en pena que vagan por la tierra de los vivos buscando venganza con quien se cruce en su camino.

Esto no era justo, la magia no existe pero los fantasmas no son solo una realidad, sino que son un problema grave.

En un momento quise negarlo pero la presentación de ser uno de los tres misterios de la energía novial le daba mucha fuerza después de todo, otro de aquellos secretos eran los auris.

Esto ha seguido así, durante días, incluso Noa termino dándose una vuelta, pero no parece que notara nada fuera de lo normal, pero los llantos siguen haciendo eco, no es todas las noches, pero es lo suficientemente seguido como para que no te olvides que hay algo lamentándose en la casa, hemos llegado al punto en que mis padres están considerando mudarse.