Louis es invitado a ver el partido de Inglaterra vs Croacia, en la copa del mundo. Tiene un accidente en las escaleras y un lindo rizado es quien le ayuda en ese patético y vergonzoso momento.
Había algo en ese chico que le había dejado anonadado...
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Mientras Harry lanza a Louis a su cama, mientras sus labios vuelven a encontrarse y mientras su temperatura corporal se eleva aun más al sentirse cerca, Louis solo puede pensar en como lograron llegar a la cama sin matarse en el camino. Habían estado besándose un montón y bebiendo vino también, así que obviamente llegó un punto donde ambos se pusieron más calientes y necesitados de lo normal.
Las manos de Harry tocan todo el cuerpo de Louis que puede, sus manos le acarician lentamente, dejando un rastro de calor por donde sea que sus dedos avanzan. Louis siente su erección chocando contra el pantalón de chándal que trae puesto, casi haciéndose daño debido al roce que provoca el cuerpo de Harry contra el suyo.
Todo es besos, caricias y sonidos estrangulados.
La habitación de Harry está levemente iluminada gracias a la luz de la luna y a la de los faroles de la calle. Con esta iluminación el rizado se ve aún más hermoso de lo que es, Louis casi no puede controlar el sentimiento que le embarga al mirarlo, se pierde por un momento en los orbes verdes de Harry y se siente en paz, rodeado de confianza. Entonces está tirando del rostro del rizado hacia el suyo y besándolo con vehemencia. Harry responde fundiéndose en él y soltando un sonido de afirmación.
Aunque la situación cambia rápidamente de curso; cuando Harry toma el control. Louis le da una mirada a Harry totalmente hambrienta y se muerde el labio cuando el rizado comienza a quitarse la ropa.
Louis está por hacer lo mismo, cuando la voz ronca de Harry le detiene.
—No. Lo haré yo.
Lo único que Louis hace, es asentir.
En cuanto Harry termina de desvestirse observa a Louis tendido sobre su cama. No hay una imagen más hermosa que esa, del ojiazul con el rostro sonrosado, el flequillo despeinado y un rastro de sudor en la línea de su cabello. Harry le sonríe, una sonrisa totalmente lasciva, de esas que prometen hacerle temblar las piernas y pedir más.
Se acerca al ojiazul lentamente, deja un beso en sus hinchados labios y toma el borde del pantalón de chándal comenzando a bajarlo lentamente por esas torneadas y bronceadas piernas. Sus labios se unen al camino, haciendo un recorrido desde sus muslos hasta sus tobillos. El aire del ambiente golpea la desnuda erección de Louis haciéndole susurrar. A su pantalón le sigue la polera y prontamente ambos están completamente desnudos.
Louis está acercándose hacia Harry para besarlo, el rizado acorta el camino y le besa con hambre, con fuerza, con pasión. Le hace jadear cuando chupa su lengua y gemir cuando se separan con un chasquido, Louis está por decir algo, cuando Harry niega de inmediato.
—Sobre tus codos y rodillas.
La respiración del ojiazul se atasca en su pecho. Su erección da un respingo, al saber exactamente qué es lo que quiere hacer el rizado.
