Louis es invitado a ver el partido de Inglaterra vs Croacia, en la copa del mundo. Tiene un accidente en las escaleras y un lindo rizado es quien le ayuda en ese patético y vergonzoso momento.
Había algo en ese chico que le había dejado anonadado...
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
Louis no podía dejar de pensar en las palabras que Harry había pronunciado. Las letras y el sonido de su voz resonando en el fondo de su cabeza, haciendo alusión a lo mencionado por el rizado; «novio» «novio» «novio» ¡Harry había dicho que él era su novio! El ojiazul cree —es más bien lo que se hace creer a si mismo— haber disimulado muy bien su sorpresa, se presentó a si mismo con una sonrisa y se sentó junto a Harry y al costado derecho del chico castaño que Louis cree que se llama Niall y que recuerda de Rusia, Louis se ríe de sí mismo, él es realmente malo con los nombres.
Los amigos de Harry eran totalmente diferentes a los suyos. Niall era un poco parlanchín (tal como lo recordaba de sus escasos encuentros anteriores), hablaba rápido, bebía mucho y reía estruendosamente. Estaba acompañado esta vez, de su novio desde hace dos años, un castaño de aspecto misterioso y callado llamado Zayn, que sonreía con ternura hacia todo lo que hacía o decía el castaño. El otro chico se llamaba Liam, tenía el cabello castaño corto y ojos cafés totalmente cálidos, abrazó a Louis y le sonrío abiertamente cuando se presentaron, no bebía alcohol, pero sí le gustaba mucho la comida, sonreía cuando hablaba y tomaba la mano de su novia a cada tantos minutos.
Louis se sintió cómodo con ellos, encajó perfectamente en el círculo cerrado de gente especial para el rizado. Harry le acariciaba el muslo y las manos debajo y sobre la mesa, le sonreía cada tanto tiempo y besaba su cien o su cabeza en cada oportunidad que tenía.
El ojiazul nunca había visto tan cariñoso a Harry como ahora.
Por un momento, una idea cruzó por su cabeza. A lo mejor, tal vez... Harry se estaba comportando así para mostrar algo frente a sus amigos. Posiblemente solo quería hacerles creer que realmente eran una pareja.
Ese pensamiento lo golpeó directo en las bolas. Harry no era así, o al menos eso quería creer ciegamente.
Comieron hamburguesas grasosas y deliciosas, bebieron cervezas y conversaron de la vida y de todo lo que había pasado desde la última vez que se habían visto. Cuando son cerca de las once y media, Niall exclama que quiere ir a bailar y no dejará que nadie se vaya sin al menos haber estado una hora en el club, Harry lo mira de inmediato preguntando con la mirada si está bien, y cuando Louis asiente con una pequeña sonrisa, el castaño insiste en ponerse en movimiento.
—Estoy muy muy feliz de ir a bailar. —Dice cuando se suben al uber que han pedido.
—Lo que tú quieres es seguir bebiendo—le reprocha Zayn negando divertido.
—Pero tú me cuidas, así que todo está bien—Niall besa sonoramente su mejilla haciéndole sonreír.
Y es así como a las dos y media de la mañana todos —exceptuando a Liam— están medianamente ebrios, sudorosos y sonrientes. Han bailado, bebido, reído y cantado a todo pulmón. Louis no recuerda cuando fue la última vez que se divirtió tanto sin sus propios amigos en el mismo sitio, pero esto era simplemente maravilloso.
