Capítulo 46: Sobrenatural

2K 60 9
                                    

Peter le mantiene la vista, y con cada segundo que transcurre mirándose, a los dos se les nubla más la mirada de emoción.

- ¿Qué cambió Lali?

Lali baja la vista y traga ruidosamente. Empieza a acomodarle la sábana a la altura del pecho, como con nerviosismo.

- Contestame... algo tuvo que pasar para que te hayas decidido. Y ya sabés que sí, creo que podemos volver a estar juntos... ¡no quiero otra cosa!

- No soy boludo... el viernes a la mañana me dijiste que querías acostarte con otro... ¿lo hiciste?... ¿estamos a mano y por eso pensas que ahora si podemos volver?

Lali está en silencio, antes de responderle toma una gran cantidad de aire.

- No pude hacerlo... no pude estar con otro... no sé si fué Dios, el destino, o que... pero no pude.

- ¿Pero lo intentaste?

Lali levanta la vista otra vez hasta sus ojos... -¡Sí!... lo intenté... y te confieso que iba muy bien pero...-

- ¡Traé el desfibrilador!...porque me vá a dar un infarto...

- ¡Já!... no seas idiota...

- ¿Qué tanto lo intentaste?... ¿hasta dónde llegaste?

- ¡Ayy Peter! Quédate con lo que te dije... ¿Qué más querés saber? ¿No te alcanza?

Peter se calla la boca, pero su morbo lo abruma.

- ¿Entonces?

- Vayamos despacio por favor... no digamos nada a nadie. Si no funciona, va a ser peor...

Peter- ¿Mirá si no va a funcionar?... ¿vos me amas?

Lali asiente con su cabeza y lo besa chiquitito y le toma la cara entre sus manos acariciándolo - ¡Con toda mi alma! –

Peter se sonríe y trata de subir su mano libre para tocarla, pero le duele todo y se queja de dolor...

- No te muevas... por lo pronto... quiero cuidarte, tenés que reponerte y después hablamos.

- Pero estás dispuesta a intentarlo... y eso para mí es lo único que me importa en la vida...

- Descansá... en un ratito te voy a dar de comer... ¿tenés hambre?

- ¡Sí... quiero comerte a vos!

...................................

La internación de Peter lo demoró 9 días en el sanatorio.

Por suerte podía levantarse de la cama, para ir al baño. Aunque necesitaba ayuda para higienizarse. Imaginemos que sólo tenemos disponible una sola mano, pero que todo nuestro torso está absolutamente encapsulado hasta la cintura por una coraza de yeso.

Fué necesario ponerle el yeso, por la cantidad de huesos que estaban comprometidos. Si sólo hubiese sido la clavícula, se solucionaba con los vendajes en 8 y quizá un cabestrillo o alguna férula para el hombro. Pero dado que había varios huesos con problemas, decidieron hacer esta manualidad atroz.

El día antes del alta, se armó el debate. Cuando Lali llegó a la habitación encontró a Peter y a Claudia terminando una acalorada discusión, de la que por suerte no llegó a participar.

Claudia- ¡Peter por Dios! ¿Vos no ves que estás imposibilitado hijo?... ya está preparado tu cuarto, te compré unas sábanas de esas que venden en la tienda de artículos ortopédicos, para que no te haga llagas estar en la cama.

Una vez más...Where stories live. Discover now