Capítulo 18

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Mientras seguía la voz de la rubia en sus oídos, recordando como hace unos minutos había dicho que le seguía importando, tardó un poco más en recordar que le dijo que quien llamaba otra vez era Holly, su novia a la que antes había colgado. Y ahora pensándolo se estaba empezando a sentir mal ¿había parecido una borde no contestándola? Un sentimiento de haber ofendido a Holly apareció en su mente, haciendo que marcara rápidamente su número de teléfono. Aunque seguramente tendría que cortar pronto porque su madre la llamaría para cenar ya, pero quería saber si ella se había molestado porque no haber contestado y además lo mismo si había llamado dos veces era por algo importante.

"¿Holly?" Fueron escasos segundos antes de que escuchara que ella había aceptado su llamada.

"¡Oh Darl! Pensaba que te había pillado ocupada y ya no hablaríamos hoy" Respondió alegre de poder hablar con ella después de todo el día sin saber nada sobre su vida.

"He estado hace un rato ocupada, pero ya estoy libre completamente para ti" Comentó recordando como Apple se había ido y dejado su conversación para que pudiera contestarla a ella.

Eso hizo más feliz a su novia, lo notó en su tono de voz. No habían podido hablar desde ayer por la noche porque se le acabó la batería justo cuando ella le escribió un WhatsApp contestándola a su mensaje de buenos días. Se recostó sobre la cama para mirar el espejo que había en techo de su habitación mientras le contaba las cosas que había hecho hoy, sin ella.

"Y después de comprar zapatos, fuimos a merendar a la Casa del Té, menos mal que me terminó convenciendo Ashlynn porque no recordaba lo bien que sabía ese café latte"

"Yo antes iba más con Raven cuando no salía con Dex, pero sí, aunque Maddie y su padre sean algo estrambóticos, preparan un café magnífico" Suponía que ella no había ido allí porque recordaba que Blondie dijo que en ese lugar fue donde Holly le comentó que era lesbiana.

"Lo he pasado bien esta tarde de compras, he podido dejar de extrañarte durante bastante rato. Pero dime ¿y tú qué has hecho hoy sin mí?" Ella no había hecho nada interesante hoy.

"No he hecho nada divertido como tú, solo he dado una vuelta por el pueblo por la tarde y ya" Comentó mientras miraba el joyero que había comprado para ella, no, no había hecho nada para comentar que fuera importante.

La menor de las O'Hair insistió un poco más en saber, pero no le dio el gusto por qué en verdad no había nada destacable para decirla. Solo había estado toda la tarde buscando un regalo para ella, y eso quería que fuera sorpresa. Así que le dijo que mejor siguiera ella contando los pequeños detalles de su quedada con su amiga. Y mientras le contaba las tiendas a las que había entrado, la ropa y zapatos que habían comprado, los precios que tenían algunas cosas... se imaginaba que eso podían haber hecho si se hubiera quedado en la ciudad. Extrañaba a su novia, no estar cerca de ella en todo el día ni darse besos como otras cosas que tanto habían hecho en verano juntas, se sentía raro ahora.

Estaba tan absorta en su mente, pensado como se vería ella ahora en pijama, que tardó un momento en centrarse de nuevo en la realidad y darse cuenta de que su madre la llamaba porque llevaban esperándola para cenar un buen rato. No quería dejar de escuchar todo lo que había hecho Holly esta tarde, pero como hiciera subir a su madre, las paredes temblarían seguramente y no quería escuchar como la recriminaba. Así que tuvo que pedir perdón a su novia y proponerla antes de colgar, si luego quería llamada otra vez, porque quería seguir escuchándola hablar y al menos sentir que estaban juntas. Pero ella respondió que tenía que madrugar para una cosa, así que despidieron y bajó hacia el comedor con la confirmación de que luego no habría llamada.

Durante la cena no hubo otro tema de conversación que no fuera la gran victoria del campeonato de voleibol. Entendía la euforia que sentían sus hermanos, Daring en especial porque él hizo todo, pero con contarlo una vez valía ¿no? Ella no los había visto jugar, pero por las veces que lo repetían él y su madre en especial, podía decir que se sabía todos los detalles de esa final. Junto con la forma del trofeo porque el rubio no paraba de enseñarlo y admirarlo mientras se hacía el modesto, pensó irónicamente. Menos mal que una vez que terminaron se cambió de tema de conversación, ya que sus padres y su abuela eran los grandes admiradores del ganador del campeonato, se había ido a dar un paseo nocturno.

𝒮𝑒𝒸𝓇𝑒𝓉♡𝓈  𝑒𝓃𝓉𝓇𝑒  𝒜𝓅𝓅𝓁𝑒  𝓎  𝒟𝒶𝓇𝓁𝒾𝓃𝑔Where stories live. Discover now